Barcelona [etc.] : Egales, 2007 [10].
172 p.
Colección: Salir del armario.
ISBN 9788488052476 / 17 €
/ ES / NOV
/ Aceptación / Amores / Homosexualidad / Literatura / Sexo
Jorge Freyre creía estar confortable y definitivamente instalado en la ilusión de la «normalidad», pero todo cambió en el tiempo de un fin de semana: apenas dos días y un encuentro casual bastaron para que descubriera (mejor sería escribir «confirmara») que no era la persona que aparentaba ser. A partir de ese instante, ya nada fue igual.
Para reordenar su vida, Jorge decide abandonar Madrid y el trabajo que en la capital tiene como creativo publicitario e instalarse en su Galicia natal, cerca de su madre y su hermana, en la confianza de que este regreso a la casilla de salida le permitirá reconciliarse con el pasado. Que es tanto como aceptarse tal y como uno es. Una labor ardua en la que contará con la insospechada complicidad de un adolescente desenvuelto y caprichoso, y durante la cual confirmará (aunque sea a costa de una porción de la felicidad burguesa y convencional que le estaba prometida a su hermana) que la hipocresía que le llevó a negarse a sí mismo sigue gozando de buena prensa.
Para reordenar su vida, Jorge decide abandonar Madrid y el trabajo que en la capital tiene como creativo publicitario e instalarse en su Galicia natal, cerca de su madre y su hermana, en la confianza de que este regreso a la casilla de salida le permitirá reconciliarse con el pasado. Que es tanto como aceptarse tal y como uno es. Una labor ardua en la que contará con la insospechada complicidad de un adolescente desenvuelto y caprichoso, y durante la cual confirmará (aunque sea a costa de una porción de la felicidad burguesa y convencional que le estaba prometida a su hermana) que la hipocresía que le llevó a negarse a sí mismo sigue gozando de buena prensa.
Los cuerpos incompletos
Rafael Arribas | El Arco de Papel, 2012-05-18
http://elarcodepapel.blogspot.com.es/2011/01/los-cuerpos-incompletos.html
Lejos del sempiterno debate sobre la vigencia de una narrativa gay militante, lo que al lector de verdad le importa es que se cuenten historias sugerentes y que se cuenten bien. Editores y críticos deben considerar este hecho para conectar con los deseos del consumidor. Por eso, estar ‘fichado’ en una casa que apuesta por la literatura en clave homosexual no ha sido la razón primera de que hoy traigamos en el bolsillo este libro de Alfredo Iglesias Otero. Está aquí por ser un relato genuino, aunque aborde temas recurrentes (pasión, sexo, amistad, familia… amor), un relato que además está sabiamente resuelto y, por si esto no bastara, escrito desde las entrañas.
Los cuerpos incompletos es, entre otras cosas, una conmovedora alegoría de lo cotidiano, una lúcida mirada introspectiva allí donde las pasiones humanas, en constante efervescencia, se bifurcan rodeadas de convencionalismo y simulacro. Para darle sentido a su vida, Jorge Freyre decide abandonar Madrid y se instala en su Galicia natal, en el convencimiento de que la búsqueda de sus sueños juveniles le ha de servir de revulsivo para reconciliarse consigo mismo y aceptarse como realmente es. Nuevos encuentros –todos y ninguno fueron Gabriel- marcarán un camino sin retorno, en el que la existencia del protagonista no volverá a ser ya nunca la de antes.
Al terminar el libro (leído de un tirón, lo confieso) reparo en el breve currículo de la solapa y descubro sorprendido que se trata de la ópera prima en castellano de este diseñador y comunicador apasionado por la literatura. Con tan buenos resultados, no sería justo que Alfredo Iglesias y su novela pasaran desapercibidos a un público hispano cada vez más necesitado de lecturas sanamente emocionales. Por la parte que nos toca, ya aguardamos impacientes su próximo título.
Los cuerpos incompletos es, entre otras cosas, una conmovedora alegoría de lo cotidiano, una lúcida mirada introspectiva allí donde las pasiones humanas, en constante efervescencia, se bifurcan rodeadas de convencionalismo y simulacro. Para darle sentido a su vida, Jorge Freyre decide abandonar Madrid y se instala en su Galicia natal, en el convencimiento de que la búsqueda de sus sueños juveniles le ha de servir de revulsivo para reconciliarse consigo mismo y aceptarse como realmente es. Nuevos encuentros –todos y ninguno fueron Gabriel- marcarán un camino sin retorno, en el que la existencia del protagonista no volverá a ser ya nunca la de antes.
Al terminar el libro (leído de un tirón, lo confieso) reparo en el breve currículo de la solapa y descubro sorprendido que se trata de la ópera prima en castellano de este diseñador y comunicador apasionado por la literatura. Con tan buenos resultados, no sería justo que Alfredo Iglesias y su novela pasaran desapercibidos a un público hispano cada vez más necesitado de lecturas sanamente emocionales. Por la parte que nos toca, ya aguardamos impacientes su próximo título.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.