miércoles, 30 de noviembre de 2016

#hemeroteca #historia | Ataques británicos contra las Islas Canarias en el siglo XVIII

Ataques británicos contra las Islas Canarias en el siglo XVIII / Carlos Fernando Hernández Bento.
La Orotava, Santa Cruz de Tenerife: Le Canarien, 2016 [11-30].
241 p.
ISBN 9788494552755 / 15 €

/ ES / ENS
/ Canarias / Gran Bretaña / Guerras / Historia – Siglo XVIII

La presente obra es un intento de profundizar en los ataques que los británicos realizaron contra las Islas Canarias en el siglo XVIII, desde su propia óptica. Para ello, analizaremos sus fuentes archivísticas, bibliográficas, hemerográficas y museísticas, inéditas en la mayor parte de los casos hasta hoy. Incluye estudios de las acciones de Jennings contra Tenerife (1706), Davidson y Willes en Fuerteventura (1740), Windham contra La Gomera (1743), Nelson en Tenerife (1797) y otras muchas.

DOCUMENTACIÓN
Prólogo al libro de Carlos Hernández Bento "Ataques británicos a las Islas Canarias en el siglo XVIII"
Emilio Abad Ripoll | Amigos del 25 de Julio, [s.d.]

http://amigos25julio.com/index.php?option=com_content&view=article&id=2031:prologo-al-libro-de-carlos-hernandez-bento-qataques-britanicos-a-las-islas-canarias-en-el-siglo-xviiiq&catid=18:prologos-introducciones-&Itemid=17

#libros #mujeres #ciencia | Las mujeres de la Luna : historias de amor, dolor y valor

Las mujeres de la Luna : historias de amor, dolor y valor / Daniel Roberto Altschuler, Fernando J. Ballesteros.
Pamplona : Next Door Publishers [etc.], 2016 [11].
376 p.
Colección: El Café Cajal.
ISBN 9788494443541 / 18,50 €

/ ES / ENS / BIO
/ Astronomía / Carrera espacial / Ciencia / Mujeres – Historia / Mujeres en la ciencia / Visibilidad

En la superficie de la Luna contemplamos nuestra historia. Los accidentes selenográficos constituyen un registro intacto de la formación de la zona del Sistema Solar más cercana a la Tierra. Su nomenclatura es el reflejo de los claroscuros de nuestra sociedad. De las 1586 personas honradas con un nombre de cráter, únicamente 28 son mujeres y en su mayoría pertenecen a Europa y EE. UU., datos que evidencian que quienes han contribuido al avance de la ciencia han recibido un reconocimiento muy desigual.

A través de las páginas de este libro, los astrónomos y divulgadores científicos Daniel Roberto Altschuler y Fernando J. Ballesteros nos invitan a reflexionar sobre este hecho y, por encima de todo, nos brindan la oportunidad de conocer mejor la vida de estas 28 mujeres.

«Las mujeres de la Luna nos cuentan historias de amor, dolor y valor, de triunfos insólitos alcanzados por la perseverancia, y de tragedias inducidas por las circunstancias. Nos dan la oportunidad de contar historias olvidadas».

#libros #homofobia | La cultura de la homofobia y cómo acabar con ella

La cultura de la homofobia y cómo acabar con ella / Ramón Martínez ; prólogo de José Luis Rodríguez Zapatero.
Barcelona [etc.] : Egales, 2016 [11].
186 p.
Colección: G Ensayo
ISBN 9788416491636 / 17,50 €

/ ES / ENS
/ Derechos / Homofobia / LGTBI / LGTBIfobia / Violencia homófoba

¿Qué es realmente la homofobia? ¿Cuál es su origen? ¿Quiénes son sus culpables? Años después del matrimonio igualitario, cuando podría parecer que hemos alcanzado la igualdad para lesbianas, gais, bisexuales y transexuales, nos siguen llegando noticias de agresiones. Las reformas legales son imprescindibles, pero no suficientes para cambiar todo un contexto cultural que sigue privilegiando una sexualidad sobre el resto. Para erradicar la violencia necesitamos reflexionar profundamente sobre ella. Solo así será posible responder a la pregunta clave: ¿qué podemos hacer para acabar con la homofobia?

«Con un estilo ágil y brioso, con rigor en la argumentación, incorporando y asumiendo la óptica insustituible de los perjudicados, de las víctimas, esta obra es una elocuente llamada a esa perseverancia, a considerar que la lucha por los derechos es una lucha incesante, una lucha sin fin, sobre todo cuando se alza frente al muro de patrones culturales de imposición seculares. […] En este sentido, ‘La cultura de la homofobia’ es un aleccionador aldabonazo frente a cualquier tentación de complacencia o pasividad.» Del prólogo de José Luis Rodríguez Zapatero

#livres #photographie | Vera y Victoria

Vera y Victoria / photographies et textes, Mar Sáez.
Roquevaire, France : André Frère Éditions, 2016 [11].
80 p.
Ed. français – anglais.
ISBN 9791092265552 / 25 €

/ FR / EN / Fotografía
/ Amores / Lesbianismo / Mujeres / Parejas / Testimonios / Transexualidad

Vera a avoué à Victoria qu’elle était transsexuelle le jour où elles s’embrassèrent pour la première fois, c’était dans un parc. Cette révélation n’a rien changé à leur attirance respective, et au cours des quatre années où elles vécurent ensemble, elles s’aimèrent comme elles n’avaient jamais aimé auparavant.

Durant cette période, Vera et Victoria n’étaient plus deux personnes distinctes, elles ne furent plus qu’une et construisirent une maison ensemble, emplie de rêves et de projets d’avenir. Vera et Victoria restèrent indifférentes au regard que l’on pouvait porter sur leur relation, et s’adonnèrent complètement à leur amour et à leur passion.

Le livre prend la forme d’un journal visuel, réalisé entre 2012 et 2016 à travers lequel l’auteur Mar Sáez tente de pénétrer puis de décrire l’univers intime de Vera et Victoria. L’univers d’une relation amoureuse très intense à travers lequel de nouvelles facettes des rapports dans le couple ont émergées. Pas mieux, pas pire, que pour un autre type de couple.

Mar Sáez est une jeune photographe espagnol, elle est basée à Madrid, en 2015, elle collabore avec le Musée Reina Sofia en master d’histoire de l’art contemporain. Dans ces derniers projets, elle étudie la question très actuelle du genre.

#libros #mujeres #islam | La cárcel del feminismo : hacia un pensamiento islámico decolonial

La cárcel del feminismo : hacia un pensamiento islámico decolonial / Sirin Adlbi Sibai.
Tres Cantos, Madrid : Akal, 2016 [11]
320 p. 

Colección: Inter Pares.
ISBN 9786079564186 / 18 €

/ ES / ENS
/ Colonización / Decolonial / Feminismo / Islam / Mujeres

Inspirándose principalmente en el pensamiento decolonial latinoamericano, en los llamados feminismos de la Tercera Ola y en el pensamiento islámico del filósofo marroquí Taha Abderrahman, esta obra plantea una crítica profunda a los fundamentos epistemológicos de los feminismos islámicos, a la vez que tantea la urgencia de un pensamiento islámico decolonial como la respuesta y quizás la ‘única’, pero no unificada, solución posible a la crisis del pensamiento islámico contemporáneo. Se trata de una invitación a comenzar un recorrido otro de verdadera introspección dialógica intracultural e intracivilizacional islámica cuya premisa básica parte paradójicamente de «la consciencia del No Ser» en el contexto del «imperio de la anulación del Otro» y que nos brinda posibilidades reales de liberación y de regeneración, así como de una reinserción anticapitalista, antisexista, antipatriarcal, antirracista, anticlasista y anticolonial en los presentes y futuros de los que, como sujetos colonizados, hemos sido expulsados.

Desde una lectura decolonial renovada de la ‘islamofobia’ como una de las estructuras de poder, control, gobierno y subalternización del Islam y los musulmanes en el sistema-mundo moderno/colonial, esta investigación muestra cómo los discursos feministas islámicos son una respuesta reactiva a la misma. En este sentido, pueden leerse desde lo que Judith Butler ha denominado «la paradoja de la subjetivización», y es que los discursos que resisten tales normas, son en sí mismos habilitados o creados, incluso, por esas mismas normas, lo cual supone una limitación constitutiva que, aunque no anule su capacidad de agencia social, sí los convierte en discursos reiterativos o rearticuladores inherentes al poder.

DOCUMENTACIÓN
“El feminismo islámico es una redundancia, el islam es igualitario”.

La granadina Sirin Adlbi Sibai acaba de publicar 'La cárcel del feminismo', una reflexión sobre las mujeres musulmanas y el patriarcado.
Miguel Ángel Medina | El País, 2017-02-01
http://elpais.com/elpais/2017/01/30/mujeres/1485795896_922432.html

#hemeroteca #progenitura | El acusado de usar un vientre de alquiler dice que no pagó por su hija

Imagen: El Mundo / Residencia de la pareja gay en Vícar, Almería
El acusado de usar un vientre de alquiler dice que no pagó por su hija.
"El trato que se está dando a Juan José es un claro caso de homofobia y racismo", dice Carlos Aránguez, su abogado.
Miguel Cabrera | El Mundo, 2016-11-30
http://www.elmundo.es/andalucia/2016/11/30/583f1ebe268e3e4d418b478f.html

Juan Jesús G.S. el joven almeriense acusado de usar un vientre de alquiler y pagar por él a la madre, ha declarado ante el juez que acordó de "forma altruista" con la mujer, "una amiga" con la que había mantenido una relación afectiva, tener un bebé mediante inseminación artificial para ayudarle a ser padre junto a su novio, un peluquero de Vícar, pero ha negado que pagara ninguna cantidad por "su propia hija".

Juan José ha declarado desde Almería por videoconferencia ante el Juzgado de Instrucción número 3 de Arcos de la Frontera -la madre del bebé, Sonia, es de Cádiz- y ha contestado a las preguntas de todas las partes. En su declaración ha asegurado que tras tener la niña se inscribió en el Registro Civil, donde consta quién es el padre y la madre, es decir que en ningún caso se alteró la filiación, y sin negar cualquier derecho de su amiga respecto a su hija. El juez ha pedido una prueba de paternidad para confirmar que es el padre biológico de la niña, que en la actualidad está en un centro de menores de la Junta de Andalucía, una vez que la Administración ha asumido su tutela.

Carlos Aránguez, abogado del acusado, ha explicado a El Mundo que su cliente solo abonó, "y por transferencia, el coste de la inseminación artificial, y otras pequeños gastos, como la ropa prenatal y el ajuar del bebé básico, la bañerita, el cochecito y cuatro cosas más". "Lo tratan como si hubiera comprado el bebé de otro y eso es una barbaridad", añade.

El letrado, que se ha mostrado radicalmente disconforme con el trato recibido por su cliente, ha solicitado la devolución inmediata de la menor a su padre, después de que el Juzgado haya decretado la suspensión de la patria potestad del bebé, al considerar también que la niña "no estaba desamparada, era especialmente querida y estaba especialmente bien cuidada".

Aránguez expone que Juan Jesús "no ha cometido ninguna ilegalidad, pues en España la maternidad subrogada no es delito, aunque la Ley de Reproducción Asistida no reconoce esta práctica, de forma que su actuación puede ser irregular, pero no delictiva".

Homofobia y racismo
En cualquier caso, el abogado considera que "este es un caso claro de homofobia y racismo -su patrocinado es gitano- ,y consideró totalmente injusto que personas con dinero puedan hacer lo mismo que han hecho Juan José y Luis, su pareja, acudiendo a otros países donde la maternidad subrogada está permitida, como Estados Unidos, Rusia o Ucrania, y disfrutar de sus hijos en España, "como ocurre con Bosé o Ricky Martin, por ejemplo", mientras quien no tiene posibilidades económicas, "como puede ser un gitano pobre y homosexual" se ve en la situación de la pareja almeriense. Y es que Juan José se enfrentaría, por el delito de alteración de paternidad del que es acusado, a una pena de cinco años de prisión. "No puede haber un derecho para pobres y otro para ricos", plantea Aránguez, quien defiende el derecho de todos los homosexuales españoles a ser padres.

El abogado se ha mostrado también muy crítico con el trato recibido por parte de los servicios sociales de la Junta de Andalucía, puesto que su patrocinado, desde que se le retiró la guardia y custodia de la niña, "ha acudido todos los días a interesarse por ella, y no solo no ha podido verla, sino que ni siquiera le han informado si come bien, si tiene algún problema de salud, e incluso se han negado a entregarle una foto del bebé, a pesar de que es su padre biológico y tiene derecho a saber cómo está su hija".

"Juan José no es un tipo de persona que compre a un bebé, y menos a su propia hija, simplemente no estuvo bien asesorado y no tenía suficiente dinero para irse a Estados Unidos", concluye el letrado, quien sí reconoce que el joven y su pareja hablaron con otras personas en su intento de ser padres. "Es cierto, pero no delictivo", insiste. También reconoce el error cometido por la madre, quien al ser preguntada sobre el bebé afirmó que había muerto al nacer. "Lo dijo cuando se sintió acorralada, y lo primero que se le ocurrió fue algo tan burdo y absurdo como eso, para evitar preguntas", concluye.

Y TAMBIÉN…
Una pareja gay, detenida por alquilar un vientre para ser padres.

Una joven y una pareja de peluqueros gays han sido detenidos por alquilar un vientre por 10.000 euros para tener una niña nacida en Villamartín (Cádiz) que la pareja se llevó a Vícar con tres días de vida. Los tres están imputados porque en España la práctica es ilegal pero puede hacerse en numerosos países extranjeros por el triple de dinero.
Laura Garófano / Miguel Cabrera | El Mundo, 2016-11-29
http://www.elmundo.es/andalucia/2016/11/29/583d4358468aebd74e8b45f0.html

#hemeroteca #transfeminicidio | Diana Sacayán, la transexual argentina asesinada, homenajeada en Bangkok

Diana Sacayán, la transexual argentina asesinada, homenajeada en Bangkok.
EFE | El Diario, 2016-11-30
http://www.eldiario.es/sociedad/Diana-Sacayan-transexual-homenajeada-Bangkok_0_585841673.html

Los delegados de la Asociación Internacional de Lesbianas, Gays, Bisexuales, Trans e Intersex (ILGA) reunidos en Bangkok rindieron hoy homenaje a la activista transexual argentina Diana Sacayán, asesinada el año pasado.

Sacayán, con una reconocida trayectoria de lucha y militancia y elegida secretaria de ILGA en 2014, recibió una mención honorífica en la conferencia mundial de la organización que se celebra en la capital tailandesa hasta el próximo viernes.

"Diana Sacayán fue asesinada en octubre de 2015 en su departamento en la capital federal de Buenos Aires, fue claramente un crimen de odio (...), por la forma brutal en que fue asesinada", señaló a Efe el director ejecutivo de ILGA para América Latina y el Caribe en Argentina, Pedro Paradiso.

El cuerpo sin vida de Sacayán fue hallado en su domicilio, con heridas de arma blanca y atado a la cama.

"Si bien hay muchos crímenes contra travestis y transexuales, el hecho de que fuera una de las líderes impulsoras a nivel local e internacional hizo el caso muy visible", señaló el también secretario de la Comunidad Homosexual Argentina (CHA).

Paradiso afirmó que el crimen cometido contra Sacayán fue el primero en el que se utilizaron los términos "feminicidio" y "travesticidio" en un caso de este tipo y precisó que el juicio a dos personas acusadas de su asesinato comenzará antes de fin de año.

"Diana destacó por su defensa de la vida y del derecho al trabajo de los transexuales, sobre todo del trabajo, porque hay una discriminación muy fuerte. Muchos transexuales tienen que prostituirse como forma de sobrevivencia", puntualizó Paradiso.

Sacayán luchó para crear un cupo laboral para transexuales en Buenos Aires y por la Ley de Identidad de Género, que permite el cambio del nombre y sexo en los documentos oficiales de identidad.

En 2012, con la promulgación de la citada legislación, Sacayán fue la primera transexual en recibir su nuevo documento de identidad de manos de la entonces presidenta argentina, Cristina Fernández.

Paradiso lamentó que en 2015 fueran asesinadas en Argentina seis travestis y transexuales y siete gays, mientras que otras dos personas se suicidaron por el acoso que sufrían debido a su orientación sexual.

El activista argentino criticó a los grupos religiosos y políticos conservadores que trabajan contra los derechos del colectivo LGTBI (lesbianas, gays, transexuales, bisexuales e intersex), porque promueven la discriminación.

#hemeroteca #libros #feminismo | Carmen G. de la Cueva: “El feminismo es un trabajo que empieza muy pronto y que dura toda la vida”

Imagen: La Vanguardia / Carmen G. de la Cueva
Carmen G. de la Cueva: “El feminismo es un trabajo que empieza muy pronto y que dura toda la vida”.
La escritora andaluza publica ‘Mamá, quiero ser feminista’ (Lumen, 2016) un relato vital en primera persona acompañado por los dibujos de la ilustradora Malota.
Carmen López Álvarez | La Vanguardia, 2016-11-30
http://www.lavanguardia.com/de-moda/20161130/412257994796/entrevista-libro-lumen-feminismo-carmen-g-de-la-cueva.html

El título ‘Mamá, quiero ser feminista’ (Lumen, 2016) tiene un significado más sutil de lo que pueda pensar la lectora o el lector al leerlo por primera vez. El uso de la primera persona indica que se tratará de un testimonio personal sobre el camino a la toma de conciencia de la escritora sobre el tema principal. Pero la referencia a su madre es sumamente importante y no sólo una manera de hacer atractivo el documento.

“A mi madre, a mi hermana, a la memoria de las mujeres de mi familia que ya no están: este es el silencio que yo quería romper”. Carmen G. de la Cueva dedica su trabajo a esas familiares que la acompañaron en su formación como persona y como mujer, porque no se nace como tal sino que se llega a serlo, como explicó Simone de Beauvoir en ‘El segundo sexo’.

Carmen G. de la Cueva tardó apenas diez meses en gestar el libro. Conoció a la editora con la que acabó trabajando en febrero, en una de las visitas a Barcelona que hizo con su proyecto ‘La Tribu de Frida’ (ahora renombrado La Tribu). La editorial Lumen lo ha publicado ahora, ilustrado por Mar Hernández, que firma su trabajo como Malota.

La comunicación entre ambas ha sido fluida, algo esencia para plasmar en imágenes un testimonio tan personal como el de la escritora. “Hemos hablado por mail, por Whatsapp, le envié fotografías de mis álbumes familiares para que, de alguna forma, ella se pudiese inspirar. Ha interpretado el texto y ha empatizado con la historia. Siento que si no hubiese estado ella habría salido otro libro diferente, más feo. Me encanta cómo ilustra Mar y su manera de verlo”, explica.

El objetivo de la autora ha sido escribir “un libro feminista desde la experiencia, menos académico”. Para ello cuenta la historia de su vida desde su infancia y primera juventud en un pequeño pueblo de Andalucía pasando por sus estancias en otras ciudades europeas buscando su camino vital. Todo ello ligado a los libros que fue leyendo todo ese tiempo y que la ayudaron a encontrar muchas respuestas a esas preguntas que se hacía sobre si otra realidad sería posible.

La lectora o el lector que se sumerja en las páginas del libro lo hará en la vida de Carmen G. de la Cueva, ya que su trabajo es todo un ejercicio de exposición: “Cuando lo entregué sentí que no lo podía pensar mucho más porque sentí un poco de pudor, claro. Al final ha sido un ejercicio de romper el recato y de contar cosas así. Pero pensé que podría ayudar a empatizar con otras chicas que en algún momento de su vida se podrían haber sentido de una forma parecida”.

Su familia también tiene una presencia importante en el relato de la escritora, obviamente, ya que no deja de ser la historia de su vida hasta el momento ¿Cómo se sintieron al leerlo? “De momento no les ha parecido más, al contrario. Se han emocionado leyendo algunas partes y están contentos. Pensé que mi padre no lo iba a leer, pero mi hermana pequeña me envió hace días una foto de él leyéndolo y dice que le confesó que se había confesado que se había emocionado”.

Las memorias de esos momentos vitales de Carmen G. de Cueva también hacen las veces de relato de iniciación. Al preguntarle si le recomendaría a una mujer que se esté “estrenando” en el feminismo su trabajo como primera lectura, la escritora responde afirmativamente.

“Al final lo que quiero demostrar es que el feminismo es un trabajo que empieza muy pronto y que dura toda la vida y que cuanto más hablemos entre nosotras y más nos contemos más herramientas tendremos para defendernos y llegar a la igualdad”. Y añade que: “Espero que esos relatos y esos momentos particulares en los que pienso como particularmente fuertes ayuden a otras chicas a contar sus propias experiencias y a identificar la violencia”.

#hemeroteca #prostitucion #feminismo | "Soy prostituta y feminista"

"Soy prostituta y feminista".
Ofrecen servicios sexuales y no se sienten explotadas. Es su (polémica) lucha por la igualdad de género. Aquí dan la cara.
Alberto Rojas | El Mundo, 2016-11-30
http://www.elmundo.es/papel/historias/2016/11/30/583c18dcca4741ed098b4601.html

Natalia no es de este mundo, como tampoco lo son los unicornios, las hadas y los trasgos. Para una buena parte de la población es imposible que exista una mujer así: que se prostituya por elección propia, sin presiones de ningún hombre, y con cierta pasión por su profesión. Pero lo que ya la convierte en una rareza absoluta para muchos es que, además, se considere una feminista. Una prostituta feminista, o lo que es lo mismo, alguien que lucha por la igualdad entre el sexo masculino y femenino y un justo reparto de roles.

¿Pero es posible? Por supuesto, porque Natalia, María o Amanda no son excepciones, ni son pocas, ni están carentes de opinión. Quieren que su voz se escuche. Son mujeres de carne y hueso. De carne y hueso que, según ellas, no está a la venta. «Nosotras no vendemos nuestro cuerpo, sólo ofrecemos un servicio sexual. Y punto», afirma Natalia Ferrari, una de las chicas más activas, sobre todo en las redes sociales, por la defensa de su libertad de elección y de su profesión: «La prostitución, cuando funciona con condiciones éticas, te ofrece pasar un buen rato con alguien que quiere estar contigo, con un pacto muy claro de lo que va a suceder en la cita y sin que haya complicaciones para ninguna de las partes», dice. A diferencia de la gran mayoría de mujeres y hombres que se dedican a este mundo, ella ha decidido dar la cara (literalmente) en esta lucha.

María Riot es otra de las prostitutas que mezclan su actividad con el activismo. Y tampoco oculta su rostro. «Sí, me considero una puta feminista. Veo a una parte del feminismo como una herramienta muy poderosa de empoderamiento. Nosotras nos creamos nuestro propio feminismo, el de las prostitutas, el más básico y necesario: el de poder hacer de nuestro cuerpo lo que queremos y luchar porque ninguna mujer le diga a otra lo que tiene que hacer con su cuerpo o sus genitales». María es también actriz de cine X, otro de los contextos donde los clichés machistas son más pronunciados: «Nosotras no vendemos nuestro cuerpo, primero porque es nuestro y no se puede vender, y segundo porque nuestra profesión no es otra cosa que ofrecer sexo a cambio de dinero».

¿Tiene sentido la lucha feminista en la prostitución? Probablemente más que en ningún otro ámbito, ya que puede tratarse de una de las trincheras más misóginas de la sociedad, un terreno de juego demasiado propicio para la cosificación de la mujer y su sumisión a los deseos masculinos. Pero el coste personal de esa pelea es elevado, así como el estigma. Y el problema es que los ataques (al menos los más dolorosos) no vienen casi nunca de los hombres, sino de las mujeres, de aquéllas que se consideran, como ellas, feministas: son las que, según la opinión mayoritaria en este movimiento, defienden que la prostitución es el hija del patriarcado y las prostitutas, mujeres sin escapatoria.

La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, presentó hace dos meses una guía destinada a medios de comunicación en la que recomendaba cambiar términos como prostituta o trabajadora sexual por «mujer en situación de prostitución», o clientes por «prostituidores» o «puteros». El problema es que la publicación no distinguía entre las mujeres que libremente quieren dedicarse a este trabajo y las víctimas de la trata, una de las peores lacras de nuestra sociedad.

En realidad, nadie sabe con certeza qué porcentaje de las meretrices ejercen por obligación y cuáles por elección. En 2010, Naciones Unidas calculó que una de cada siete mujeres prostitutas en Europa eran víctimas de trata. ¿Pero qué sucede con las seis restantes? Para esta guía del Ayuntamiento de Madrid son, de nuevo, como los unicornios. No existen. Pero hablamos de una de las grandes industrias del planeta, con más de 40 millones de mujeres y hombres que ejercen este oficio.

La primera vez. «Decidí dedicarme a la prostitución hace cuatro años», cuenta Ferrari. «Mi trabajo en un museo no aportaba nada a mi desarrollo personal, por lo que decidí dejarlo y buscar alternativas. Y me di cuenta de que el sistema laboral sólo me ofrecía más de lo mismo. No recuerdo muy bien cómo o por qué empecé a considerar la prostitución. Hablando sobre esto una amiga me confesó que era prostituta desde hacía un año. Tener su apoyo y escuchar su experiencia me reafirmó en que esté podría ser un trabajo muy empoderador. Eso y mi necesidad de pagar el alquiler me hizo decidirme. Como apunte diré que la primera vez sentí que tendría que haber empezado a trabajar como prostituta mucho antes».

María Riot tiene una historia paralela. Y una opinión similar: «Desearía haberme dado cuenta antes de que podía ser trabajadora sexual, en vez de pasar años como cajera de supermercado o en locales de ropa, teniendo que soportar jefes, cumpliendo horarios y haciendo tareas insalubres como estar parada sin descanso durante ocho horas seguidas».

Amanda Carvajal es una escort de lujo madrileña. No se considera feminista ni activista, pero lleva igual de mal las acusaciones de otras mujeres: «No conozco un trato más justo e igualitario que el que hay entre una prostituta y un cliente», argumenta. «Yo decido cuánto cobro, la duración de las citas y qué se hace y no en ellas. El cliente acepta y, si no le gustan las condiciones, simplemente el encuentro no se produce. Eso para mí es igualdad de género, pues es un acuerdo en el que tanto él como yo salimos ganando. Y mucho. Incluso, me atrevería decir que yo me siento más beneficiada que ellos, pues el increíble crecimiento personal que he experimentado gracias a mis clientes durante todos estos años es incalculable».

Varias asociaciones de profesionales del sexo, como Aprosex, Hetaira, Genera, Cats y Prostitutas Indignadas llevan tiempo defendiendo los derechos de este colectivo, la despenalización y la diferenciación clara con las redes de trata. «Me han criticado mucho por dar la cara y decir que me gusta mi trabajo y que es una opción laboral legítima», dice Natalia Ferrari. «Parece que si eres una prostituta empoderada no tienes derecho a manifestarte. Si eres una víctima, además, no tienes la capacidad de hacerlo y ya ellas lo hacen por ti».

María Riot se siente cansada del fuego amigo y «de las repartidoras de carnets de feministas». «Lamentablemente he recibido más críticas de mujeres que de cualquier otro grupo. También he visto las mismas etiquetas destinadas a alguna directora de porno con la que he trabajado». Riot se refiere a Erika Lust, autora de cintas que apuestan por una mirada femenina donde la mujer no es utilizada como un objeto sexual, toma la iniciativa y explora sus propios placeres: «Como directora de cine adulto, siempre he fomentado una serie de valores feministas delante y detrás de la cámara. Es decir, que no sólo hago películas donde el placer femenino importa y la representación de las relaciones sexuales es realista, igualitaria y respetuosa, sino que el proceso de producción es ético y fomenta la participación de mujeres en cualquier puesto de trabajo. Mi equipo está compuesto en un 90% por mujeres, desde la operadora de cámara, la ayudante de producción hasta la sonidista», dice una de las pocas cineastas de celuloide X para adultos. «Las mujeres también tenemos derecho a representar nuestra visión de la sexualidad. Muchas veces me dicen que es contradictoria con los valores feministas, pero nada más lejos de la verdad. Disfrutar del sexo explícito en pantalla no es algo intrínsecamente masculino. Creo que nos equivocamos cuando atacamos e insultamos a otras mujeres porque no coincidimos en algo, cuando en realidad podríamos hacer críticas constructivas y ayudarnos entre nosotras para poder debatir y repensar nuestro lugar».

Aunque la verdadera diana del feminismo más ortodoxo es la actriz porno Amarna Miller: «la feminista favorita de los machistas», según la define una de sus detractoras. La intérprete, poeta, escritora, fotógrafa y musa de Podemos está acostumbrada a recibir insultos de odiadoras de redes sociales, pero ella sigue dando la cara: «Dedicarte al trabajo sexual en una sociedad mayoritariamente machista es complejo y te hace enfrentarte a muchos estereotipos», comenta en el descanso de su último filme. «Es muy fácil teorizar sobre el trabajo sexual cuando nunca has estado en un set de rodaje, pero no tanto dar la cara cuando eres tú misma la que se enfrenta al estigma todos los días».

Vídeo polémico. Miller ha estado en la picota desde que protagonizó un polémico vídeo promocional del Festival Erótico de Barcelona donde denunciaba la hipocresía de la sociedad española: «Muchísimas de nosotras somos mujeres empoderadas que nos dedicamos a esto porque queremos. Hay sectores abolicionistas que no conciben que el trabajo sexual pueda ser una forma de empoderamiento femenino, mientras otras ramas del feminismo nos plantean que el trabajo sexual es una forma de recuperar el control sobre nuestro propio cuerpo y nuestra sexualidad».

Les molesta además el «acoso» a los clientes, que no deben pagar, según ellas, la persecución a la que se somete «desde el Estado» a las trabajadoras sexuales. «El problema de las leyes que persiguen a los clientes como si fueran criminales no es únicamente que los estigmatizan: es que nos hacen vulnerables a la violencia a nosotras», denuncia Natalia Ferrari. «El riesgo de multas hace que las profesionales trabajen en zonas más apartadas e inseguras. Muchas tienen que bajar tarifas, hacer prácticas sexuales que no quieren, o aceptar que les negocien el uso del condón. Si un cliente tiene miedo, no querrá darme su nombre real ni su número de teléfono y eso me pone en peligro porque dificulta mis medidas de seguridad. Está demostrado que perseguir la demanda no sirve para proteger a las mujeres, y fuerza a las putas a trabajar en condiciones lamentables, dándole poder a los agresores».

Además, no comparten la denominación prostituidor, ya que entienden que son ellas quienes toman la decisión de prostituirse, y no ellos. «La gente que contrata estos servicios busca disfrutar, sentirse bien, comprendido, respetado y poder desconectar», afirma Ferrari. María Riot añade que «es básicamente un intercambio económico por un servicio sexual, que muchas veces es más psicológico que físico y que muchas personas necesitan o desean. Es un trabajo que disfruto mucho y que me da muchas satisfacciones. Hoy en día no podría imaginarme trabajando de otra cosa».

La mayoría de estas chicas salen y entran en el trabajo sexual dependiendo de su situación personal o económica del momento. «Desde que empecé a trabajar, he dejado la prostitución varias veces», cuenta Ferrari. «Lo hago por desconectar o porque no es compatible con los proyectos de vida que tengo en ese momento. Una de las ventajas de ser prostituta es que puedes dejarlo y volver cuando quieras. Y siempre tendrás trabajo. No pienso en dejarlo a largo plazo, sé que cuando lo considere conveniente podré hacerlo y que también podré volver cuando me dé la gana».

#hemeroteca #vih | Daniel Zulaica: “Como el VIH ya no mata, la gente ha perdido el miedo y ha bajado la guardia”

Imagen: Deia / Daniel Zulaica
Daniel Zulaica · Coordinador del Plan vasco contra el Sida: “Como el VIH ya no mata, la gente ha perdido el miedo y ha bajado la guardia”.
En febrero de 1985, Zulaica atendía su primer paciente de sida. Dedicado en cuerpo y alma a luchar contra el VIH, se retira, a sabiendas de que la enfermedad está bajo control.
Concha Lago | Deia, 2016-11-30
http://www.deia.com/2016/11/30/sociedad/estado/como-el-vih-ya-no-mata-la-gente-ha-perdido-el-miedo-y-ha-bajado-la-guardia

Se jubila por todo lo alto, con un congreso de sida en Donostia, su ciudad, que reúne a lo más granado de la especialidad .
-Sí, estos días se reúnen más de 700 expertos de este campo y eso ya indica la relevancia. Además lo hemos podido hacer coincidir con el 1 de diciembre, el Día Mundial del Sida.

Pero la OMS acaba de decir que en la zona europea ha habido un 7% más casos de VIH. ¿Se está revertiendo la tendencia? o ¿nos las prometíamos demasiado felices?
-Los datos de la OMS hablan de todo Europa e incluyen Rusia, Ucrania... que son países con muchos consumidores de drogas, que no utilizan las medidas preventivas que se usan en Europa Occidental. Pero si consideramos nuestro entorno más cercano, la tendencia está estabilizada desde hace diez o quince años. En el conjunto del Estado hay unas 3.000 nuevas infecciones cada año y en Euskadi alrededor de 150.

Sin embargo un tercio de los vascos no sabe que son portadores del VIH.
-Bueno el porcentaje oscila dependiendo de las estadísticas. Pero lo cierto es que hay muchas personas que desconocen que son portadores. A través de ellos se puede transmitir el virus y conocer que se está infectado por el VIH permite ponerte en tratamiento cuanto antes y que tu organismo se deteriore menos.

Ahora ya casi no se habla de sida como en los 90 cuando había tantos fallecidos. Pero el VIH sigue ahí.
-Sí por eso decimos que es importante el diagnóstico precoz, que las personas que estén infectadas lo sepan. Y en Euskadi tenemos muchos medios y se han puesto muchos recursos para ello. Por ejemplo desde hace seis años están los test rápidos de las farmacias. Vas a las siete de la tarde a una farmacia y en 15 minutos ya tienes el resultado.

¿Se ha bajado la guardia con el sida y se cree que es algo del pasado?
-Yo creo que sí. Que como el VIH ya no mata, la gente le ha perdido el miedo, ha bajado la guardia y ha relajado los hábitos. Este es un daño colateral de los tratamientos porque siempre que hay terapias eficaces, se da el mismo fenómeno. Un paso adelante en los tratamientos son dos pasos atrás en la prevención. Pero como dicen los afectados, a pesar de que el VIH se haya convertido en una enfermedad crónica, es mejor no estar infectado.

¿Imaginaban la progresión de los tratamientos?
-Hace 30 años no había medicación y la media de vida de los pacientes era de 60 días desde que eran diagnosticados. El antes y el después en los tratamientos lo marca 1996.

¿Qué pasó aquel año?
-Aparecieron los nuevos antirretrovirales. Y además se descubrió que asociándolos de tres en tres -porque se iban descubriendo cada vez más familias-, se conseguía más éxito. Porque aunque el virus mute se hace resistente a uno de ellos pero a tres es muy difícil.

¿Los nuevos diagnósticos corresponden a personas jóvenes?
-No, entre los jóvenes no hay más casos. La edad media de los nuevos infectados ronda los 37 años. Mientras que hace 20 años los afectados eran las personas que consumían drogas intravenosas, ahora el colectivo de hombres que tienen sexo con hombres es el que contabiliza más del 50% de las nuevas infecciones. Por eso Osakidetza quiere incidir en este colectivo gay con la adopción de estrategias preventivas.

En los últimos tiempos, usted se ha hecho cargo también de la estrategia para la hepatitis C. Y todo con el común denominador de que los tratamientos para las dos enfermedades son caros no, carísimos.
-Pues sí, en su día, los tratamientos del VIH también eran muy caros pero progresivamente fueron apareciendo genéricos y se han abaratado. Con la hepatitis C, Osakidetza ha hecho un gran esfuerzo y se ha tratado a aquellos pacientes que lo necesitaban. La diferencia es que el tratamiento de la hepatitis cura y el del sida es de por vida.

martes, 29 de noviembre de 2016

#hemeroteca #vih | Chemsex y vínculos emocionales

Imagen: El Confidencial / Booom, Ibiza
Chemsex y vínculos emocionales.
Se hacen necesarios nuevos tipos de intervención para la prevención de la transmisión del VIH asociada a este tipo de prácticas sexuales.
Marta Villar | gTt · Grupo de Trabajo sobre Tratamientos del VIH, 2016-11-29
http://gtt-vih.org/actualizate/la_noticia_del_dia/29-11-16

Una investigación de tipo etnográfico llevada a cabo en Francia sugiere que muchas de las prácticas sexuales relacionadas con el uso de drogas que tienen lugar entre los hombres gais más jóvenes están relacionadas con la búsqueda de amor y el establecimiento de vínculos emocionales con otros hombres.

El estudio contó con la revisión etnográfica de dos páginas de citas para gais y con la realización de 25 entrevistas en profundidad a gais usuarios de drogas de París y Lyon (Francia). Las entrevistas se centraron tanto en las variables sociales del uso de drogas como en los principales acontecimientos de las vidas de los hombres que desencadenaron el consumo.

Los encuestados tenían edades comprendidas entre los 23 y los 30 años. Del total, 11 de ellos practicaban el ‘chemsex’ (utilización de drogas durante las relaciones sexuales tanto para aumentar la desinhibición como para poder prolongar la duración de las sesiones) y los 14 restantes practicaban, además, el ‘slamming’ (uso inyectado de algunas de estas sustancias durante las sesiones de ‘chemsex’). Varios de los entrevistados fueron diagnosticados del VIH.

Otros estudios realizados en parejas heterosexuales usuarias de drogas inyectadas mostraron que el acto de inyectarse puede ser una experiencia íntima donde el uso compartido de la jeringuilla es visto como una señal de confianza y amor. En general, estas relaciones están generizadas: a menudo la mujer es la segunda en inyectarse y no suele hacérselo ella misma.

Durante las entrevistas se observaron como temas recurrentes la vida en pareja y las relaciones románticas. Para algunos de ellos, el inicio del uso inyectado de drogas tuvo lugar tras una ruptura de pareja o en el comienzo de una intensa relación donde la pareja es usuaria de drogas inyectadas . Tras la ruptura, la práctica del ‘slamming’ permitió a algunos jóvenes gais liberarse sexualmente de una relación monógama.

Un ejemplo de ello es Gaspard, un ingeniero de 28 años que describió dos periodos durante los cuales aumentó el consumo de sustancias -uno de ellos tras conocer su diagnóstico por VIH y el otro tras una ruptura amorosa, donde empezó a utilizar drogas inyectadas-. Dos semanas después de la ruptura, Gaspard conoció a su actual pareja en una fiesta sexual, lo que demuestra que estos encuentros pueden llevar a relaciones que no son meramente sexuales. Gaspard refirió que su pareja le desalentó de seguir realizando ‘slamming’ y, en el momento de la entrevista, llevaba 6 meses en seguimiento con un especialista en adicciones.

Jules, un estudiante de 23 años, describe sentimientos de fusión romántica durante la sesión de inyección. En sus propias palabras "Conocí a mi ex, con el que estuve casi 6 meses. Yo tenía 21 años, casi 22. Fue durante una sesión de ‘slamming’ y la mefedrona ayudó. Estás enamorado de todo el mundo, lo que pudo haber ayudado al comienzo de nuestra historia como pareja. Al principio mi novio era el que me inyectaba". Los sentimientos de amor derivados del uso de drogas químicas pueden conllevar comportamientos que acarreen consecuencias negativas sobre la salud y en el plano social. La intensidad de la relación de pareja fue marcada por el uso intensivo de drogas, el aislamiento social y Jules estuvo cerca de perder su trabajo y su plaza en la universidad.

Otro de los hombres entrevistados describe el uso de drogas como respuesta a la soledad y el aburrimiento. Como explica Amine, de 26 años, "no trabajaba. Tenía mucho tiempo libre, así que lo hacía todo el tiempo, no tenía nada más que hacer. Usaba las drogas para salir del aburrimiento y yo estaba muy aburrido. Durante aquella época siempre estaba con el ordenador, todo el tiempo en casa. Busqué conectar con algo y lo encontré, si eran drogas mucho mejor".

No obstante, Amine rápidamente se dio cuenta de los riesgos a los que el ‘slamming’ le exponía. Conseguir un trabajo, asistir a narcóticos anónimos, visitar a un especialista en adicciones y empezar una nueva relación con una pareja no consumidora le permitieron moderar el uso de drogas.

La entrevista con Edouard, un profesor de 29 años con el VIH, ilustra cómo algunos hombres separan sus deseos sexuales de los romances. Estuvo en una relación abierta durante 6 años con un hombre no usuario de drogas. Mientras con otros compañeros sexuales maneja los riesgo de manera ligera, con su pareja estable lo hace de manera cuidadosa. En sus propias palabras "Nosotros somos serodiscordantes. Siempre tenemos sexo con condón, especialmente desde que, hace unos años, tuvimos un pequeño problema y le transmití una Infección de Transmisión Sexual (ITS) y decidimos ser cuidadosos".

En otro estudio llevado a cabo entre hombres gais de Holanda sobre el uso de la metanfetamina y el ‘slamming’, todos los encuestados refirieron haber experimentado mayor libertad sexual debido a la capacidad de la sustancia de minimizar los sentimientos de vergüenza e inseguridad sobre el rendimiento sexual y el atractivo . Algunos de los participantes también citaron la necesidad de conexión humana como el principal atractivo del ‘chemsex’. Muchos de los encuestados experimentaron este sentimiento de conexión y de comunidad con el uso de la metanfetamina y la práctica del ‘slamming’. Aunque algunos describieron sentimientos de superficialidad y egocentrismo durante estas experiencias, también indicaron que el uso comunitario de drogas y el interés sexual común les proporcionó sensaciones de conexión y de pertenencia.

Los datos recogidos en el presente estudio ponen de manifiesto la relación entre el uso de drogas durante las prácticas sexuales y el establecimiento de vínculos emocionales con compañeros sexuales. Mientras que algunos entrevistados iniciaron el uso de sustancias después de una ruptura de pareja, otros conocieron a sus parejas en el contexto del ‘chemsex’ y/o del ‘slamming’.

Cabe recordar los riesgos potenciales que el ‘chemsex’ y el ‘slamming’ con relación a la adquisición del VIH, el virus de la hepatitis C y/u otras ITS, por lo que se hace necesario incrementar las estrategias de prevención dirigidas a este colectivo (Véase La Noticia del Día 29-10-2015).

Fuente: Aidsmap / Elaboración propia (gTt-VIH )

Referencia: Amaro, R. Taking chances for love? Reflections on love, risk, and harm reduction in a gay slamming subculture. Contemporary drud problems 43: 216-227, 2016.

Knoops L., Bakker I., Bodegom R., et al. Tina&slamming: MSM, cristal meth and intravenous drug use in a sexual setting. Amsterdam, Mainline, Soa Aids Netherlands, 2015.
Y TAMBIÉN…
'Chemsex': el fenómeno de drogas y sexo grupal sin control que activa los casos de VIH.

Fiestas privadas con barra libre de drogas y sexo han convertido esta práctica en un peligro de salud pública en varios países: muchos pierden la percepción del riesgo y deciden no utilizar preservativo.
El Confidencial, 2016-12-01
http://www.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/2016-12-01/chemsex-dia-mundial-sida-vih-homosexuales-drogas-sexo_1298125/
'Chemsex', el «preocupante fenómeno» del sexo con drogas.
El primer estudio realizado en España cifra en un 37% de varones que practican estas conductas con hombres infectados por VIH.
Arantxa Aldaz, 2016-11-30
http://www.elcorreo.com/bizkaia/sociedad/201611/30/chemsex-preocupante-fenomeno-sexo-20161130163336.html

lunes, 28 de noviembre de 2016

#hemeroteca #racismo #lgtbi | Así es como muchos homosexuales fomentan el racismo contra negros y asiáticos

Imagen: El Diario / Orgullo en Maspalomas, Gran Canaria
Así es como muchos homosexuales fomentan el racismo contra negros y asiáticos.
Muchas minorías étnicas aseguran que se enfrentan al racismo cada día y que, a veces, la intolerancia proviene de entornos LGTB. Que a ti te opriman no te legitima para oprimir a otros: nada más lejos de la realidad.
Owen Jones · The Guardian / Traducción de Cristina Armunia Berges | El Diario, 2016-11-28
http://www.eldiario.es/theguardian/negros-asiaticos-homosexuales-fomentan-racismo_0_584091996.html

El racismo es un serio problema dentro de la comunidad LGTB y hay que abordarlo. A pesar de la determinación de muchas personas que pertenecen a minorías étnicas dentro de la comunidad LGTB por hacerlo, esto no está sucediendo. "¿Cómo puedo ser un intolerante cuando yo mismo pertenezco a una minoría oprimida?", es una respuesta muy común entre algunas personas LGTB blancas. Pero otra razón mucho más perniciosa es que el mundo LGTB gira en torno a los hombres gays blancos y excluyen al resto. La bandera del arcoíris es más blanca de lo que parece.

"Me tratan como a un objeto sexual por el color de mi piel y nunca me tratan como a una persona", cuenta Saif. "La comunidad está acostumbrada a aceptar a hombres gays blancos, masculinos y musculosos. El resto de nosotros no somos aceptados realmente o "no somos uno de los suyos". No es que eche la culpa al individuo, sino a ser condicionado por una comunidad que venera la "imagen sexual del hombre gay blanco".

Según una investigación elaborada por FS magazine, un sorprendente 80% de hombres negros, un 79% de hombres asiáticos y un 75% de hombres de sur de Asia han experimentado racismo dentro del ambiente gay.

Esto se manifiesta de muchas maneras. Algunos son rechazados por su etnia o es la misma etnia la que hace que sean tratados como objetos. En las webs de citas y en las ‘apps’, abundan perfiles que especifican "no asiáticos" o "no negros", excluyendo como si nada a grupos étnicos enteros. Es como una versión reducida de “no se permiten perros, no se permiten negros, no se permiten irlandeses”, como dice Anthony Lorenzo.

"En aplicaciones como Grindr", escribe Matthew Rodríguez, "los hombres gays blanden sus preferencias raciales para citas con la misma arrogancia y falta de complejos que los hombres heterosexuales cuando eligen a los jugadores para su equipo de béisbol ideal".

Homi me explica que tiene origen persa y que "a veces le confunden con un griego, un italiano o un español". Una vez, en una discoteca, otro cliente le estuvo persiguiendo implacablemente. Al final, este le preguntó de dónde era. Cuando Homi respondió que era de India, el otro hombre respondió horrorizado: "Perdona, no lo hago con indios. Los indios no son mi tipo".

Y esto no solo sucede en Occidente. Luan, un periodista brasileño, me contó que su país tiene una "imagen de belleza eurocentrista" y que hay un "culto al hombre blanco que es absurdo, dado que más de la mitad de la población es negra o mulata". Otros cuentan también cómo en alguna ocasión han sido rechazados a las puertas de algún local LGBT por el propio personal.

"No pareces gay, sucio paki"
Michel, un hombre procedente del sur de Asia, me contó que le echaron porque "no parecía gay" y, además, le llamaron "sucio paki" (término insultante contra las personas de origen paquistaní). Asegura también que todo se ha complicado todavía más desde la matanza del club de Orlando porque el atacante era musulmán.

Y también está la otra parte de la ecuación: la cosificación. Para Malik, algunas de sus experiencias son muy cercanas al "fetichismo" de raza. El rechazo a las personas por su etnia ya es bastante malo, comenta, "pero todavía puede ser peor cuando alguien te reduce a tu etnia, sin permiso, cuando tienes una cita o tienes un rollo". Su origen árabe es estereotipado por algunos aspirantes a amantes, e incluso presumen de su papel sexual.

Cuando el Royal Vauxhall Tavern –un conocido local LGTB de Londres– organizó un acto en el que un actor blanco (Charlie Hides) simulaba ser negro, Chardine Taylor-Stone inició una campaña contra el espectáculo. La campaña se llamó Stop Rainbow Racism (‘Paremos el racismo en la comunidad LGTB’). El actor "exageraba y perpetuaba ciertos estereotipos racistas, hacía comentarios soeces", explica. Tras iniciar una campaña de recogida de firmas para poner fin al espectáculo, recibió amenazas. "Las personas blancas LGTBIQ que verdaderamente quieren luchar contra el racismo tienen que hacerse fuertes y hacerse cargo de lo que está sucediendo en su comunidad", escribe.

Las publicaciones LGTB también son culpables. Históricamente, han sido cosa de hombres blancos, han desatendido los asuntos raciales, y han retratado a los hombres blancos como objetos de belleza. Dean dejó de comprar revistas gays convencionales hace dos años. "Las únicas veces que escriben sobre personas negras es cuando han hecho algo homófobo. Los medios gays son completamente blancos".

Sin embargo, según me cuenta un periodista gay negro ha habido un cambio positivo en los últimos meses. Pero este cambio se debe solo al trabajo de personas que pertenecen a una minoría étnica LGTB que "llevan por su cuenta revistas, inauguran sus propios clubes dentro del ambiente" y utilizan redes sociales, blogs, podcasts y llevan a cabo boicots para forzar el cambio.

Las 'apps' fomentan el racismo y la baja autoestima
Mientras que la gente LGTB es mucho más propensa que la gente heterosexual a sufrir angustia psicológica, esto aumenta entre las minorías étnicas. Indudablemente, el racismo juega un papel muy importante en todo esto. Tal y como cuenta Rodríguez, ver perfiles en las ‘apps’ de citas que rechazan a ciertos grupos étnicos enteros hace que "el racismo se internacionalice, que se dañe el autoestima y también que se produzca estrés psicológico".

Muchos de los derechos y de las libertades que consiguió la comunidad LGTB llegaron de la mano de la lucha de negros y minorías étnicas. Los disturbios de Stonewall, por ejemplo, no fueron protagonizados por blancos. Lo menos que puede hacer la gente blanca LGTB es devolver este tipo de actos y enfrentarse al racismo dentro de sus propias filas. Shangela, un actor, me cuenta que el racismo dentro de la comunidad LGTB "duele más porque proviene de gente con la que comparto una alianza".

La extrema derecha que se abre paso en Occidente está intentando, muy conscientemente, incluir las campañas proderechos LGTB en sus propias agendas. Retratan a los musulmanes como una amenaza existencial para la gente homosexual, particularmente después de lo sucedido en Orlando. Algunos solo hablan sobre los derechos LGTB si es para fustigar a los musulmanes o a los migrantes en su conjunto. Ahora algunas webs estadounidenses seguidoras del nacionalismo blanco venden banderas del orgullo combinadas con banderas confederadas.

La semana pasada, Milo Yiannopolous –un homosexual que busca atraer la atención y que se ha convertido en un icono gay de la extrema derecha– estuvo en el centro de la polémica porque se le retiró una invitación a dar una conferencia en su antigua escuela. En Países Bajos, la derecha antiinmigrantes fue liderada por un hombre gay (Pim Fortuyn) hasta que fue asesinado. Al parecer, en Francia, hasta un tercio de las parejas homosexuales que se han casado apoyan al partido ultra Frente Nacional.

Por supuesto que la lucha contra el racismo tiene que estar dirigida por gente negra que sufre las consecuencias. Tenemos el ejemplo de Black Out UK, que lucha por ser una organización por los hombres negros homosexuales, o de Media Diversified, que lleva a cabo campañas para conseguir representación de las minorías en los medios. Pero si la gente blanca LGTB no escucha las voces de los marginados, poco cambio va a haber.

Que a ti te opriman no te legitima para oprimir a otros: nada más lejos de la realidad. La gente LGTB ha tenido que luchar contra la intolerancia y la opresión durante generaciones. Es trágico que ellos mismos causen e ignoren la injusticia que se está produciendo en sus propias filas.

#hemeroteca #inmemoriam | Marcos Ana… ¡Qué cortas se quedan las palabras!

Imagen: Hoyesarte / Marcos Ana
Marcos Ana… ¡Qué cortas se quedan las palabras!.
Javier López Iglesias | Hoyesarte, 2016-11-28

http://www.hoyesarte.com/in-memoriam/marcos-ana-que-cortas-se-quedan-las-palabras_234787/

Su bonhomía fue su paradoja. Razones tuvo para el rencor y, sin embargo, fueron su tono y su gesto los de un hombre sosegado, sin rastro de que le hubieran quemado 23 años de su vida en la cárcel, por el "gravísimo delito" de no pensar como los que gobernaban.

Nació como Fernando Macarro. De su padre, Marcos, muerto en 1937 durante un bombardeo, y de Ana, su madre, dos veces sentenciada a la pena capital, tomó prestada la identidad con la que comenzó a firmar desde la celda “los poemas que me salvaron la vida”.

Marcos Ana no era su nombre. El jueves pasado se marchó a los 96 años largos el poeta que habitaba ese seudónimo.

Quien esto escribe lo visitó hace cuatro años en su casa de Madrid con el objetivo de incluir el relato de su existencia en La experiencia de envejecer, un libro de entrevistas en el que protagonistas diversos se refieren al paso del tiempo por sus vidas.

A lo largo de tres horas aquel hombre contó, sin una sola huella de venganza, durísimos trozos de lo que la vida le había deparado. La escena de él mismo recogiendo de la acera el cadáver mutilado de su padre. Las infrahumanas condiciones de las celdas desde las que escribía “en papelillos de fumar, mojando en una especie de tinta la punta de alfileres las palabras que me permitían resistir, seguir viviendo”.

También de las condenas, cuando por dos veces fue sentenciado a morir acusado de tres asesinatos de los que absolutamente nada sabía y por los que ya habían sido fusilados otros reos. O el emocionado descubrimiento de la luz, el paladar, las mujeres… “Cuando conocí el amor -tras ser liberado a los 42 años y haber permanecido en prisión desde los 19- y supe que sin libertad el hombre pierde gran parte de su sentido, su íntima razón de ser”.

Él hablaba. Sonreía. Temblaba de admiración mi mano recogiendo su memoria… Desde el respeto profundo que infundía me sentí incapaz de manejar toda aquella conmoción. Descarté para el libro su entrevista.

Machadianamente digno -bueno, en el buen sentido de la palabra, bueno-, Marcos Ana. Su bonhomía fue su noble paradoja.

¡Qué cortas hoy, qué solas se me quedan las palabras!

#hemeroteca #iglesia | Los obispos piden a Méndez de Vigo que blinde la religión en el pacto educativo

Imagen: El Diario / José María Gil Tamayo
Los obispos piden a Méndez de Vigo que blinde la religión en el pacto educativo.
La Conferencia Episcopal mantuvo una reunión el pasado 18 de octubre con el ministro de Educación para pedirle que no toque el actual status de la asignatura. "El hecho religiosos es algo positivo y tiene todo el derecho del mundo a estar presente en el desarrollo integral de los niños y jóvenes", ha apuntado el portavoz José María Gil Tamayo.
Jesús Bastante | El Diario, 2016-11-28
http://www.eldiario.es/sociedad/obispos-Mendez-Vigo-religion-educativo_0_585142095.html

Los obispos quieren un pacto educativo... pero el suyo. El portavoz de la Conferencia Episcopal, José María Gil Tamayo, ha desvelado una reunión mantenida el pasado 18 de octubre con el ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo, en la que resaltó la “necesidad urgente” de un pacto educativo, que obtenga “un gran consenso”, y que, sobre todo, no toque el actual status de la clase de Religión (de oferta obligatoria y computable) ni los privilegios de la Iglesia en materia de contratación de profesores.

“Tenemos que dejar añejas posiciones: la educación tiene que ser un campo neutro, formamos para la realidad, no para las entelequias”, ha declarado el religioso. "Vemos la necesidad urgente de un pacto educativo, que acabe de una vez con los cambios al vaivén de las ideologías imperantes, y que ofrezca la posibilidad de un gran consenso en el que la educación sea una cuestión de Estado, que redunde en mejores ofertas de calidad", declaró Gil Tamayo, quien incidió en que, en esta materia, todas las instituciones católicas tendrá una sola voz.

"La Iglesia quiere concurrir de forma unitaria. Quiere tener una voz única en el concurso de voces que se den cita en este debate", declaró Gil Tamayo, quien subrayó la importancia de la educación católica en España, con 2.600 centros específicamente católicos, con 1,468 millones de alumnos, 2500 centros concertados católicos, más de 25.500 profesores de Religión o más de 3,5 millones de alumnos inscritos en enseñanza religiosa.

"La Iglesia tiene un peso, una palabra y un ideario, quiere ser coherente y concurrir al servicio del bien común de la sociedad española, y quiere hacerlo con voz unitaria", recalcó el portavoz episcopal, quien pidió la "concordancia de todos los actores" (padres y madres de alumnos, responsables de colegios, profesores de Religión....).

"Estamos para sumar, porque vemos la necesidad reiterada de este pacto por el bien de nuestros jóvenes", incidió Gil Tamayo, quien añadió que "no se entró en detalles" durante el encuentro con el ministro.

"El hecho religioso es algo positivo"
Eso sí, el portavoz episcopal recalcó que dicho acuerdo ha de tener en cuenta el actual "marco de acuerdos internacionales, que tienen rango de ley orgánica", y que la asignatura de Religión esté plenamente integrada en el currículum. "Estos son nuestros principios. Necesitamos acabar con la incomunicación y caminar juntos", añadió Gil Tamayo.

El religioso ha pedido "un aporte positivo al conjunto de la oferta educativa" en España, a la par que defendió "el derecho de aquellos que quieren que se eduque a sus hijos conforme a sus convicciones". "Coherencia en los principios, porque sin identidad no hay diálogo, y al mismo tiempo mano tendida. Ver lo que nos une, y a partir de ahí desarrollar un proyecto educativo para el bien de los niños y los jóvenes españoles".

"¿Cómo se lleva esto a la práctica? Ya buscaremos la manera. Pero estamos obligados a hacerlo por coherencia. Dejemos la rémora trasnochada: el hecho religioso es algo positivo... el hecho religioso católico tiene todo el derecho del mundo a estar presente en el desarrollo integral de los niños y jóvenes en virtud del derecho de los padres a educarlos".

domingo, 27 de noviembre de 2016

#hemeroteca #libros #feminismo | Rebecca Solnit: Feminismo de datos

Imagen: El Diario / Fotograma de 'She's Beautiful When She’s Angry'
Rebecca Solnit: Feminismo de datos.
‘Los hombres me explican cosas’ de Rebecca Solnit es el libro feminista que cambiará tu manera de ver el feminismo y la de todos los que están a tu alrededor.
Marta Peirano | El Diario, 2016-11-27
http://www.eldiario.es/cultura/feminismo/Feminismo-datos_0_583741979.html

Uno de los problemas del feminismo es que su lenguaje está lleno de gestos que escapan al sexo opuesto, como el de llevar las llaves apretadas en un puño camino del portal o el de sonreír y asentir con la cabeza cuando un hombre te explica algo sobre un tema del que sabes mucho más que él. Este último protagoniza el famoso ensayo de la historiadora, activista y ensayista californiana Rebecca Solnit que da nombre a este libro, posiblemente el texto feminista más celebrado y comentado de los últimos diez años.

La ola de reconocimiento que generó ‘Los hombres me explican cosas’ cuando se publicó por primera vez en 2008 fue tan grande que introdujo (aunque ella lo niegue) un nuevo verbo en el vocabulario anglosajón: ‘mansplaining’. Se usa para describir al hombre que explica algo a una mujer de manera injustificada, condescendiente y no solicitada, sin tener necesariamente mucha idea sobre lo que explica, pero asumiendo que ella lo ignora todo sobre el particular. Solnit decidió contarlo porque "las mujeres jóvenes necesitan saber que ese menosprecio no es el resultado de sus defectos o falta de conocimientos sino la vieja y aburrida guerra de género de siempre.

En otro ejemplo menos hilarante, una profesora invitada a una universidad pregunta a los estudiantes jóvenes qué medidas tomaban ellos para evitar las violaciones. Ellas tienen mil respuestas, ellos ninguna, porque no han tenido nunca que pensar en ello. Estas son las estructuras que aquí hemos llamado ‘Micromachismos’, y que no son sutiles pero sí invisibles, incluso para quien las sufre.

Ser hombre como factor de riesgo
El otro problema del feminismo, que comparte con otras causas nobles como la lucha contra el racismo, el maltrato animal o el calentamiento global, es que la implicación emocional de los implicados conduce la discusión hacia parámetros éticos, empañando los datos empíricos con una carga emocional que confunde el resultado. Contra este problema, Solnit propone una lectura literal de los datos tal y como se nos presentan, buscándolos en contextos que no están vinculados a la violencia de género, sino a la violencia sin más.

Con esos datos en la mano, es difícil no coincidir con la impactante conclusión de un estudio médico: "Ser hombre ha sido identificado, en varios estudios, como un factor de riesgo para el comportamiento criminal violento, igual que la exposición al tabaco antes del nacimiento, tener progenitores antisociales y el pertenecer a una familia pobre".

Los hombres cometen la mayor parte de los crímenes. "Las mujeres entre los 15 y los 40 años tienen más posibilidades de morir o ser lesionadas o desfiguradas debido a la violencia masculina que debido al cáncer, la malaria y los accidentes de tráfico juntos", dice en una cita el periodista Nicholas D. Kristoff. Pero este no es un libro contra los hombres sino contra la violencia machista. Si somos capaz de aceptar lo que dicen los números, argumenta Solnit, "tal vez seamos capaces de teorizar acerca de la procedencia de la violencia y sobre qué podemos hacer al respecto de la manera más efectiva".

De la misma manera, aborda conflictos que hemos identificado como culturales, generacionales o económicos, como el matrimonio entre personas del mismo sexo. Para Solnit, la radicalidad del matrimonio homosexual consiste en transformar una relación tradicionalmente jerárquica en una igualitaria. Lo que rechaza la iglesia y el sector conservador de manera tan fehaciente no es el acto sino el contrato: un matrimonio donde no haya un hombre y una mujer debe necesariamente renegociar las leyes que establecen que, citando al derecho estadounidense, "la misma esencia o existencia legal de la mujer se suspende durante el matrimonio, o al menos es incorporada y consolidada a la del marido". Un matrimonio entre iguales es una granada lanzada al corazón mismo de la desigualdad.

Locas, malas y mentirosas
El genio de Solnit, cuya prolífica carrera incluye libros tan deliciosos como ‘Wanderlust. Una historia del caminar’, consiste en hacernos mirar lo que ya hemos visto y verlo de otra manera. "Siento que formo parte de una nueva fase de la revolución feminista para restablecer la dignidad, la integridad corporal, la autonomía y la plena participación de las mujeres en la vida pública", decía en una entrevista reciente. Su ensayo sobre Virginia Woolf es un tratado sobre la empatía, la emoción contra la que luchamos cuando no queremos ayudar ni entender a los demás. Allí discute con Susan Sontag sobre la importancia de mirar, y sobre el valor de continuar mirando, cuando somos testigos de atrocidades. "Porque las atrocidades no tienen un fin y de alguna manera debemos trabajar con ellas".

En ‘El síndrome de Casandra’, habla de cómo las mujeres que ponen en cuestión a un hombre suelen oír "que deliran, que están confusas, que son manipuladoras, maliciosas, conspiradoras, congénitamente mentirosas". Todas esas locas maliciosas saldrán de su lectura transformadas en activistas de su propia causa. En los dos últimos ensayos de este libro imprescindible encontrarán las herramientas.