Imagen: El Diario Vasco |
La Casa de las Mujeres acoge el jueves una nueva sesión de Bibliotecas Humanas. El formato de esta actividad invita a conocer historias diversas y fomenta el diálogo.
Eli Korta | El Diario Vasco, 2018-04-10
http://www.diariovasco.com/san-sebastian/relatan-vivencias-20180410001853-ntvo.html
Una biblioteca humana es un espacio en el que los libros son personas, de tal forma que los lectores toman en préstamo los 'libros disponibles' durante la sesión para escuchar sus historias de viva voz e iniciar una conversación entre 'libro' y lector. Este formato pretende crear un marco de diálogo enriquecedor entre personas diferentes con el fin de superar estereotipos y prejuicios. Todo ello se basa en la premisa de que todas las personas tienen algo que contar desde un punto de vista singular y único.
Este jueves a las 18.00 horas la Casa de las Mujeres, en la calle Okendo 9, acogerá una sesión de Bibliotecas Humanas, organizada por el Departamento de Igualdad del Ayuntamiento donostiarra y Plus 55.
En esta ocasión los libros serán cuatro mujeres con sus títulos correspondientes: 'Mi vida en China', de Hong Yang Wang; 'Entre Oriente y Occidente', por Yousra Khessas Ghenim; 'Las mujeres del Himalaya', de Karmele Osa y 'Mujeres en pie de guerra', a cargo de Pilar Romea.
La jornada comenzará con un pequeño recital de poesía con la colaboración de Olerkarien Txokoa. A continuación se dará paso a la biblioteca humana para finalizar después con varios cuentos a cargo de los narradores del Txoko de Narrador.
Origen danés
El origen de este formato se sitúa en Copenhague a comienzos de la década de los 90. Ante una situación de violencia surgió una iniciativa para fomentar el diálogo y sensibilizar a los jóvenes daneses contra este problema.
Todo ello se materializó en el 2000 en el proyecto internacional Human Library, cuyo lema reza 'No juzgues un libro por su cubierta', que tiene como objetivo superar los estereotipos en la sociedad.
Tal como avanzan los impulsores de la iniciativa en Donostia, la biblioteca humana tiene un aforo limitado a unas 20-25 personas.
Los libros (o algo que les represente) se distribuyen en la sala para que los lectores escojan uno de ellos al comenzar el encuentro. De este modo, se crean pequeños grupos en los que la persona-libro expone su vivencia durante veinte minutos para después iniciar un diálogo. La sesión tiene una duración total de hora y media, por lo que hay tiempo para conocer las historias de diferentes libros y conversar con muchos participantes.
Aseguran que es una actividad «muy enriquecedora» porque «suceden cosas muy especiales». «Aunque ante los mismos títulos se aborden ideas similares, en cada grupo surgen conversaciones distintas que las hacen únicas», comentan los organizadores.
En ese sentido, animan a los ciudadanos a participar en estos encuentros: «hay que ir para verlo, oírlo y experimentarlo».
Este formato se incorporó a la programación cultural donostiarra en 2015. Actualmente con la organización colaboran Donostia Kultura, Ubik de Tabakalera, las bibliotecas municipales y el departamento de Diversidad Cultural.
Para este año hay previstas numerosas sesiones en los distintos centros culturales de la ciudad, como la prevista el próximo 24 de abril en la casa de cultura de Okendo, entre otras.
Participación
Según explican los organizadores, hay dos formas de participar en este tipo de actividades. Por un lado, como persona-libro, pensado para quienes gustan de exponer reflexiones, vivencias, conocimientos y aficiones.
Y, por el otro, como persona-oyente o lectora, para quienes prefieren escuchar, preguntar, opinar y aprender cosas nuevas.
Para inscribirse basta con ponerse en contacto con la persona responsable correspondiente en cada centro cultural.
La iniciativa ha tenido buena acogida entre los donostiarras, según comentan desde Plus 55. De hecho, además de los participantes hasta la fecha, actualmente hay unas 50 personas dispuestas a colaborar en nuevas sesiones.
Este jueves a las 18.00 horas la Casa de las Mujeres, en la calle Okendo 9, acogerá una sesión de Bibliotecas Humanas, organizada por el Departamento de Igualdad del Ayuntamiento donostiarra y Plus 55.
En esta ocasión los libros serán cuatro mujeres con sus títulos correspondientes: 'Mi vida en China', de Hong Yang Wang; 'Entre Oriente y Occidente', por Yousra Khessas Ghenim; 'Las mujeres del Himalaya', de Karmele Osa y 'Mujeres en pie de guerra', a cargo de Pilar Romea.
La jornada comenzará con un pequeño recital de poesía con la colaboración de Olerkarien Txokoa. A continuación se dará paso a la biblioteca humana para finalizar después con varios cuentos a cargo de los narradores del Txoko de Narrador.
Origen danés
El origen de este formato se sitúa en Copenhague a comienzos de la década de los 90. Ante una situación de violencia surgió una iniciativa para fomentar el diálogo y sensibilizar a los jóvenes daneses contra este problema.
Todo ello se materializó en el 2000 en el proyecto internacional Human Library, cuyo lema reza 'No juzgues un libro por su cubierta', que tiene como objetivo superar los estereotipos en la sociedad.
Tal como avanzan los impulsores de la iniciativa en Donostia, la biblioteca humana tiene un aforo limitado a unas 20-25 personas.
Los libros (o algo que les represente) se distribuyen en la sala para que los lectores escojan uno de ellos al comenzar el encuentro. De este modo, se crean pequeños grupos en los que la persona-libro expone su vivencia durante veinte minutos para después iniciar un diálogo. La sesión tiene una duración total de hora y media, por lo que hay tiempo para conocer las historias de diferentes libros y conversar con muchos participantes.
Aseguran que es una actividad «muy enriquecedora» porque «suceden cosas muy especiales». «Aunque ante los mismos títulos se aborden ideas similares, en cada grupo surgen conversaciones distintas que las hacen únicas», comentan los organizadores.
En ese sentido, animan a los ciudadanos a participar en estos encuentros: «hay que ir para verlo, oírlo y experimentarlo».
Este formato se incorporó a la programación cultural donostiarra en 2015. Actualmente con la organización colaboran Donostia Kultura, Ubik de Tabakalera, las bibliotecas municipales y el departamento de Diversidad Cultural.
Para este año hay previstas numerosas sesiones en los distintos centros culturales de la ciudad, como la prevista el próximo 24 de abril en la casa de cultura de Okendo, entre otras.
Participación
Según explican los organizadores, hay dos formas de participar en este tipo de actividades. Por un lado, como persona-libro, pensado para quienes gustan de exponer reflexiones, vivencias, conocimientos y aficiones.
Y, por el otro, como persona-oyente o lectora, para quienes prefieren escuchar, preguntar, opinar y aprender cosas nuevas.
Para inscribirse basta con ponerse en contacto con la persona responsable correspondiente en cada centro cultural.
La iniciativa ha tenido buena acogida entre los donostiarras, según comentan desde Plus 55. De hecho, además de los participantes hasta la fecha, actualmente hay unas 50 personas dispuestas a colaborar en nuevas sesiones.
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