Imagen: El Mundo / Una seguidora de Roy Moore con 'los diez mandamientos' |
Doug Jones, el candidato demócrata al Senado por Alabama, venció el martes a su rival republicano, Roy Moore, en la carrera para ocupar el escaño que el fiscal general, Jeff Sessions, dejó vacante, lo que lo convierte en el primer senador demócrata por Alabama de los últimos 25 años. Moore ha sido acusado por ocho mujeres de abusos sexuales.
Gara, 2017-12-14
http://www.naiz.eus/es/hemeroteca/gara/editions/2017-12-14/hemeroteca_articles/duro-reves-electoral-para-trump-al-ganar-los-democratas-en-alabama
El candidato demócrata al Senado estadounidense por el estado de Alabama Doug Jones venció en este bastión republicano. Se enfrentaba al exjuez ultraconservador Roy Moore, apoyado por Donald Trump pese a estar acusado de abusos sexuales a adolescentes. Desde 1992 un demócrata no era elegido senador en este estado sureño.
En un principio, Trump había respaldado la candidatura de Luther Strange en las primarias del Partido Republicano, sin embargo, éste acabó perdiendo ante Moore, un evangelista que cita la Biblia a menudo y que hace años fue expulsado del Tribunal Supremo de Alabama por desafiar órdenes judiciales.
Jones derrotó a Moore tras una virulenta campaña que cautivó a Estados Unidos, y va a privar al partido en el poder de un crucial escaño en la Cámara Alta del Congreso. El candidato demócrata logró un 49,9% (670.551 votos), mientras que Moore, quien ganó por sorpresa las primarias republicanas, obtuvo un 48,4% de (649.240 votos).
En los centros del candidato republicano en Montgomery, sus seguidores escucharon los resultados en silencio.
Se trata de un duro golpe personal para Trump, quien había apelado a la lealtad de sus seguidores, ignorando las acusaciones contra Moore en un intento de mantener este escaño a fin de mejorar las posibilidades de adopción a corto plazo del gran recorte fiscal que está preparando en el Congreso.
Aunque no pisó Alabama, pidió activamente el voto por Moore a través de Twitter, con llamadas telefónicas y en un mitin el pasado viernes en una ciudad de Florida fronteriza con ese estado sureño.
Además de un discurso tradicional en contra del aborto, los homosexuales y los transgénero, Moore retomó los grandes temas de las presidenciales como la inmigración y la defensa, erigiéndose en socio de confianza del presidente.
Ayer, Trump trató de tomar distancia respecto al candidato republicano. «La razón por la que originalmente apoyé a Luther Strange es que dije que Roy Moore no sería capaz de ganar las elecciones. ¡Tenía razón!», escribió a primera en Twitter. Felicitó a Jones por su «victoria duramente peleada».
Este es el segundo revés electoral para el inquilino de la Casa Blanca. En noviembre, los demócratas ganaron varias elecciones para gobernadores y otros escaños locales.
«Si los demócratas pueden ganar en Alabama, podemos competir en todas partes», dijo Hillary Clinton. A partir de ahora, la mayoría republicana del Senado tendrá 51 escaños de 100, reduciendo su margen de maniobra casi al mínimo.
Mayoría mínima
El triunfo del exfiscal Doug Jones, quien se dio conocer tras lograr la condena de los miembros del Ku Klux Klan que colocaron una bomba en una iglesia negra matando a cuatro niñas, reduce al mínimo la mayoría republicana en la Cámara Alta del Congreso, lo que obstaculiza la aprobación de las reformas de Trump, sobre todo, el gran recorte fiscal que prepara.
La ONU pide a EEUU que cese la impunidad sobre la tortura
El relator especial de la ONU sobre la tortura, Nils Melzer, pidió ayer a EEUU que cese su política de impunidad ante presuntos delitos de tortura cometidos por funcionarios. Recordó que ya en 2014 el informe del Comité de Inteligencia del Senado sobre el programa de detención e interrogatorio de la CIA hizo público «el uso sistemático de la tortura bajo custodia estadounidense».
Advirtió de que EEUU «viola claramente la Convención contra la Tortura al no perseguir los delitos de tortura cometidos bajo custodia de la CIA, a la vez que envía un peligroso mensaje de complacencia e impunidad a los funcionarios en el país y alrededor del mundo».
En un principio, Trump había respaldado la candidatura de Luther Strange en las primarias del Partido Republicano, sin embargo, éste acabó perdiendo ante Moore, un evangelista que cita la Biblia a menudo y que hace años fue expulsado del Tribunal Supremo de Alabama por desafiar órdenes judiciales.
Jones derrotó a Moore tras una virulenta campaña que cautivó a Estados Unidos, y va a privar al partido en el poder de un crucial escaño en la Cámara Alta del Congreso. El candidato demócrata logró un 49,9% (670.551 votos), mientras que Moore, quien ganó por sorpresa las primarias republicanas, obtuvo un 48,4% de (649.240 votos).
En los centros del candidato republicano en Montgomery, sus seguidores escucharon los resultados en silencio.
Se trata de un duro golpe personal para Trump, quien había apelado a la lealtad de sus seguidores, ignorando las acusaciones contra Moore en un intento de mantener este escaño a fin de mejorar las posibilidades de adopción a corto plazo del gran recorte fiscal que está preparando en el Congreso.
Aunque no pisó Alabama, pidió activamente el voto por Moore a través de Twitter, con llamadas telefónicas y en un mitin el pasado viernes en una ciudad de Florida fronteriza con ese estado sureño.
Además de un discurso tradicional en contra del aborto, los homosexuales y los transgénero, Moore retomó los grandes temas de las presidenciales como la inmigración y la defensa, erigiéndose en socio de confianza del presidente.
Ayer, Trump trató de tomar distancia respecto al candidato republicano. «La razón por la que originalmente apoyé a Luther Strange es que dije que Roy Moore no sería capaz de ganar las elecciones. ¡Tenía razón!», escribió a primera en Twitter. Felicitó a Jones por su «victoria duramente peleada».
Este es el segundo revés electoral para el inquilino de la Casa Blanca. En noviembre, los demócratas ganaron varias elecciones para gobernadores y otros escaños locales.
«Si los demócratas pueden ganar en Alabama, podemos competir en todas partes», dijo Hillary Clinton. A partir de ahora, la mayoría republicana del Senado tendrá 51 escaños de 100, reduciendo su margen de maniobra casi al mínimo.
Mayoría mínima
El triunfo del exfiscal Doug Jones, quien se dio conocer tras lograr la condena de los miembros del Ku Klux Klan que colocaron una bomba en una iglesia negra matando a cuatro niñas, reduce al mínimo la mayoría republicana en la Cámara Alta del Congreso, lo que obstaculiza la aprobación de las reformas de Trump, sobre todo, el gran recorte fiscal que prepara.
La ONU pide a EEUU que cese la impunidad sobre la tortura
El relator especial de la ONU sobre la tortura, Nils Melzer, pidió ayer a EEUU que cese su política de impunidad ante presuntos delitos de tortura cometidos por funcionarios. Recordó que ya en 2014 el informe del Comité de Inteligencia del Senado sobre el programa de detención e interrogatorio de la CIA hizo público «el uso sistemático de la tortura bajo custodia estadounidense».
Advirtió de que EEUU «viola claramente la Convención contra la Tortura al no perseguir los delitos de tortura cometidos bajo custodia de la CIA, a la vez que envía un peligroso mensaje de complacencia e impunidad a los funcionarios en el país y alrededor del mundo».
Roy Moore y los designios de Dios.
Gina Montaner | El Mundo, 2017-12-14
http://www.elmundo.es/internacional/2017/12/14/5a315e6e46163f825c8b4626.html
El sentido común indicaba que el republicano Roy Moore no debía ganar las elecciones al Senado por Alabama porque era un pésimo candidato. Sin embargo, este martes primó hasta el final el escepticismo en un estado donde no había ganado un demócrata ese escaño desde hacía más de dos décadas. Por otra parte, a pesar de las serias acusaciones que pesan sobre Moore, en su mayoría el partido republicano lo apoyó y financió su campaña, con el propio presidente Donald Trump apostando por él con tal de que no ganara un demócrata liberal en un bastión ultra conservador.
Contra todo pronóstico el oponente demócrata Doug Jones ganó por un margen estrecho. Jones, con un importante bagaje como fiscal al frente de uno de los casos más sonados contra miembros del Ku Klux Klan que en los sesenta perpetraron ataques terroristas, hizo una campaña efectiva defendiendo los valores y principios. En su discurso tras el triunfo agradeció el voto de los afroamericanos, que resultó crucial para su victoria.
Ha resultado irónico que el republicano, invocando a Dios y hasta plagas bíblicas, precisamente ha perdido por ser la encarnación de un individuo sin valores y con principios que promueven el odio a las minorías. En la recta final de su campaña Moore tuvo que enfrentarse a las acusaciones de al menos cuatro mujeres que aseguran las acosó sexualmente cuando eran unas jovencitas. El hoy derrotado candidato las tachó de mentirosas al "servicio" de las supuestas noticias falsas que según muchos republicanos, como el propio presidente, propagan los "medios liberales".
Además de los escándalos sexuales que ahora lo persiguen, Moore es un defensor a ultranza de criminalizar a los homosexuales, ilegalizar el derecho al aborto o prohibirles a los musulmanes que tengan cargos en el Congreso. Sin el menor sonrojo se ha mostrado nostálgico de los tiempos de la esclavitud cuando, según él, "la familia todavía importaba". El candidato que hasta la víspera de su derrota contó con el apoyo de Trump ha llegado a insinuar que los ataques del 9-11 fueron un castigo divino por la aceptación de la "sodomía" y los "derechos reproductivos" de las mujeres.
Cuando se supieron los resultados que en un principio se negó a aceptar, Roy Moore les dijo a sus seguidores que no estaba preocupado porque "Dios todo lo controla". En esta ocasión la patada también vino del cielo.
Gina Montaner | El Mundo, 2017-12-14
http://www.elmundo.es/internacional/2017/12/14/5a315e6e46163f825c8b4626.html
El sentido común indicaba que el republicano Roy Moore no debía ganar las elecciones al Senado por Alabama porque era un pésimo candidato. Sin embargo, este martes primó hasta el final el escepticismo en un estado donde no había ganado un demócrata ese escaño desde hacía más de dos décadas. Por otra parte, a pesar de las serias acusaciones que pesan sobre Moore, en su mayoría el partido republicano lo apoyó y financió su campaña, con el propio presidente Donald Trump apostando por él con tal de que no ganara un demócrata liberal en un bastión ultra conservador.
Contra todo pronóstico el oponente demócrata Doug Jones ganó por un margen estrecho. Jones, con un importante bagaje como fiscal al frente de uno de los casos más sonados contra miembros del Ku Klux Klan que en los sesenta perpetraron ataques terroristas, hizo una campaña efectiva defendiendo los valores y principios. En su discurso tras el triunfo agradeció el voto de los afroamericanos, que resultó crucial para su victoria.
Ha resultado irónico que el republicano, invocando a Dios y hasta plagas bíblicas, precisamente ha perdido por ser la encarnación de un individuo sin valores y con principios que promueven el odio a las minorías. En la recta final de su campaña Moore tuvo que enfrentarse a las acusaciones de al menos cuatro mujeres que aseguran las acosó sexualmente cuando eran unas jovencitas. El hoy derrotado candidato las tachó de mentirosas al "servicio" de las supuestas noticias falsas que según muchos republicanos, como el propio presidente, propagan los "medios liberales".
Además de los escándalos sexuales que ahora lo persiguen, Moore es un defensor a ultranza de criminalizar a los homosexuales, ilegalizar el derecho al aborto o prohibirles a los musulmanes que tengan cargos en el Congreso. Sin el menor sonrojo se ha mostrado nostálgico de los tiempos de la esclavitud cuando, según él, "la familia todavía importaba". El candidato que hasta la víspera de su derrota contó con el apoyo de Trump ha llegado a insinuar que los ataques del 9-11 fueron un castigo divino por la aceptación de la "sodomía" y los "derechos reproductivos" de las mujeres.
Cuando se supieron los resultados que en un principio se negó a aceptar, Roy Moore les dijo a sus seguidores que no estaba preocupado porque "Dios todo lo controla". En esta ocasión la patada también vino del cielo.
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