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| Imagen: El Mundo / José Ramón García Hernández |
Marisol Hernández | El Mundo, 2018-06-30
http://www.elmundo.es/espana/2018/06/30/5b3694f6e5fdea1d628b4671.html
Responsable de Relaciones Internacionales del partido, José Ramón García Hernández fue el primero en confirmar que se presentaba a liderar el PP, en medio del espeso silencio de otros.
P. ¿Qué debería imitar el PP del resto de partidos referentes del centro derecha europeo?
R. El lunes presento un contrato del nuevo PP con España porque creo que se ha hecho una lectura incorrecta del momento actual. El PP tiene que rearmarse. En un momento en que el Estado tiene menos recursos, hay que dotar de más capacidad al ciudadano, a la comunidad, a la sociedad civil.
P.¿Cuáles serían las mayores cambios de esta fórmula?
R. Lo primero que la sanidad y la educación estén centralizados, gran parte del ‘procés’ se ha hecho detrayendo estos recursos.
P. Y sobre funcionamiento interno, ¿qué debe exportar el PP?
R. El partido conservador británico, para elegir a sus diputados, hace un llamamiento a sus afiliados para que presenten sus currículos y sobre los mejores, el resto de la militancia decide. También he propuesto primarias para cada cargo orgánico. Esto te obliga a planificar tu carrera porque habría limitación de mandatos de ocho años. Perpetuarse en el poder es una forma de corrupción. Si no le gustas a los afiliados no volverás a repetir. Rompe también la lógica de la confrontación interna y centra al partido en ganar elecciones. Si no lo hacemos ahora vamos a fracasar.
P. Con esta mayor activación de la figura del afiliado el censo sería real y habría más inscritos.
R. Yo he peleado para que se elimine el requisito de la inscripción previa, que me parece un obstáculo. Afiliarse al partido ha sido más fácil o menos dependiendo del momento y había que pagar o no. Para desafiliarse hay que decir que lo haces y esto es violento. No comparto lo de depurar el censo, esto corresponde a cada persona.
P. Decía que si no se actúa van a fracasar pero en los últimos años no se ha reaccionado.
R. Yo sí creo que se han hecho cambios. El PP del 2012 no es el del 2018. Se han introducido las primarias.
P. Defiende que se debe tener en cuenta el voto católico. ¿Al afiliado católico le ha molestado más que a otros los casos de corrupción?
R. Sí. El afiliado católico tiene una gran concepción de dignidad y servicio de la vida pública. Quiere que se defiendan cuestiones de principios. Hay temas que le han alejado porque no se ha estado a la altura de la confianza que se depositó. El aborto, la eutanasia, la ideología LGTBI, que parece que es la única con la que no se puede disentir.
P. ¿Cree que el PP se ha enredado en debates como la maternidad subrogada que no corresponden con su base social?
R. Son temas que hemos afrontado. En la maternidad subrogada coincidimos con el PSOE. Es una de las grandes aberraciones de la modernidad. Cosifica a la mujer hasta un extremo que me parece inaceptable. La ley LGTBI de Podemos la cambiamos con un intenso debate en el grupo parlamentario. Sobre el aborto los que queríamos otra cosa, pedíamos un plan de maternidad, un cambio en la ley de adopción, en la ley de acogimiento. Medidas positivas para cambiar la cultura de la muerte a la cultura de la vida. El siglo XXII no será nada benévolo con el siglo XXI cuando juzgue todos estos temas morales. Ser progresistas de verdad y eso la izquierda le está costando entenderlo es defender a los más débiles.
P. Si fuera presidente ¿qué haría el PP para reducir la amenaza que supone Ciudadanos?
R. Simplemente ser de nuevo el PP. En cuanto seamos el PP será una mala noticia para Cs. Ellos fueron a un congreso, entraron socialdemócratas y salieron liberales. No son creíbles. En el Congreso votan mucho más con la izquierda que con la derecha. Usaron el pacto de investidura con nosotros para ir contra nosotros. Eso se les ha acabado. Por eso parece que están constipados.
P. ¿Y qué es ser otra vez el PP?
R. Tener muy claro nuestras señas de identidad, liberales, conservadores y de humanismo cristiano. Saber qué defiende. Hacer políticas modernas con esos valores. Cuando alguien vota al PP no es que sea del PP es que confía en el PP. Es referencia porque hace políticas que benefician a todos los españoles.
P. ¿Qué debería imitar el PP del resto de partidos referentes del centro derecha europeo?
R. El lunes presento un contrato del nuevo PP con España porque creo que se ha hecho una lectura incorrecta del momento actual. El PP tiene que rearmarse. En un momento en que el Estado tiene menos recursos, hay que dotar de más capacidad al ciudadano, a la comunidad, a la sociedad civil.
P.¿Cuáles serían las mayores cambios de esta fórmula?
R. Lo primero que la sanidad y la educación estén centralizados, gran parte del ‘procés’ se ha hecho detrayendo estos recursos.
P. Y sobre funcionamiento interno, ¿qué debe exportar el PP?
R. El partido conservador británico, para elegir a sus diputados, hace un llamamiento a sus afiliados para que presenten sus currículos y sobre los mejores, el resto de la militancia decide. También he propuesto primarias para cada cargo orgánico. Esto te obliga a planificar tu carrera porque habría limitación de mandatos de ocho años. Perpetuarse en el poder es una forma de corrupción. Si no le gustas a los afiliados no volverás a repetir. Rompe también la lógica de la confrontación interna y centra al partido en ganar elecciones. Si no lo hacemos ahora vamos a fracasar.
P. Con esta mayor activación de la figura del afiliado el censo sería real y habría más inscritos.
R. Yo he peleado para que se elimine el requisito de la inscripción previa, que me parece un obstáculo. Afiliarse al partido ha sido más fácil o menos dependiendo del momento y había que pagar o no. Para desafiliarse hay que decir que lo haces y esto es violento. No comparto lo de depurar el censo, esto corresponde a cada persona.
P. Decía que si no se actúa van a fracasar pero en los últimos años no se ha reaccionado.
R. Yo sí creo que se han hecho cambios. El PP del 2012 no es el del 2018. Se han introducido las primarias.
P. Defiende que se debe tener en cuenta el voto católico. ¿Al afiliado católico le ha molestado más que a otros los casos de corrupción?
R. Sí. El afiliado católico tiene una gran concepción de dignidad y servicio de la vida pública. Quiere que se defiendan cuestiones de principios. Hay temas que le han alejado porque no se ha estado a la altura de la confianza que se depositó. El aborto, la eutanasia, la ideología LGTBI, que parece que es la única con la que no se puede disentir.
P. ¿Cree que el PP se ha enredado en debates como la maternidad subrogada que no corresponden con su base social?
R. Son temas que hemos afrontado. En la maternidad subrogada coincidimos con el PSOE. Es una de las grandes aberraciones de la modernidad. Cosifica a la mujer hasta un extremo que me parece inaceptable. La ley LGTBI de Podemos la cambiamos con un intenso debate en el grupo parlamentario. Sobre el aborto los que queríamos otra cosa, pedíamos un plan de maternidad, un cambio en la ley de adopción, en la ley de acogimiento. Medidas positivas para cambiar la cultura de la muerte a la cultura de la vida. El siglo XXII no será nada benévolo con el siglo XXI cuando juzgue todos estos temas morales. Ser progresistas de verdad y eso la izquierda le está costando entenderlo es defender a los más débiles.
P. Si fuera presidente ¿qué haría el PP para reducir la amenaza que supone Ciudadanos?
R. Simplemente ser de nuevo el PP. En cuanto seamos el PP será una mala noticia para Cs. Ellos fueron a un congreso, entraron socialdemócratas y salieron liberales. No son creíbles. En el Congreso votan mucho más con la izquierda que con la derecha. Usaron el pacto de investidura con nosotros para ir contra nosotros. Eso se les ha acabado. Por eso parece que están constipados.
P. ¿Y qué es ser otra vez el PP?
R. Tener muy claro nuestras señas de identidad, liberales, conservadores y de humanismo cristiano. Saber qué defiende. Hacer políticas modernas con esos valores. Cuando alguien vota al PP no es que sea del PP es que confía en el PP. Es referencia porque hace políticas que benefician a todos los españoles.
P. El PP de Aznar no tuvo un claro perfil católico.
R. Sí. Sólo hay que decir un nombre: Jaime Mayor Oreja.
P. Pero era sólo una parte...
R. Yo disiento. Ministro del Interior. El que diseña la política que lleva al fin de ETA. Fue una parte importantísima. Los católicos estaban muy contentos de votar al PP de Aznar.
P. La decepción fue Mariano Rajoy.
R. No Rajoy. El PP. Aceptamos lo que decían los adversarios y leímos muy mal la modernidad. Pensamos que era parecernos un poco a los otros.
P. ¿Se ha presentado usted para mantener su puesto en la dirección del PP?
R. No. Los que me conocen saben que yo soy de silla plegable. Donde te llaman vas y donde puedes servir te quedas.
R. Sí. Sólo hay que decir un nombre: Jaime Mayor Oreja.
P. Pero era sólo una parte...
R. Yo disiento. Ministro del Interior. El que diseña la política que lleva al fin de ETA. Fue una parte importantísima. Los católicos estaban muy contentos de votar al PP de Aznar.
P. La decepción fue Mariano Rajoy.
R. No Rajoy. El PP. Aceptamos lo que decían los adversarios y leímos muy mal la modernidad. Pensamos que era parecernos un poco a los otros.
P. ¿Se ha presentado usted para mantener su puesto en la dirección del PP?
R. No. Los que me conocen saben que yo soy de silla plegable. Donde te llaman vas y donde puedes servir te quedas.
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