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| Imagen: El Diario Vasco / Inforgrafía del entorno futuro de La Bretxa, Donostia |
El Ayuntamiento instala paneles informativos en el edificio 'tupper' para explicar la historia de La Bretxa y los detalles del nuevo proyecto.
Dani Soriazu | El Diario Vasco, 2018-07-28
https://www.diariovasco.com/san-sebastian/reforma-pescaderia-arrancara-20180728004130-ntvo.html
La operación para remodelar el mercado de La Bretxa empezará a ver la luz el próximo mes de septiembre. Lo hará con los primeros derribos y obras interiores en el edificio Pescadería para crear los nuevos espacios donde se ubicarán el nuevo ambulatorio de la Parte Vieja, la pista polideportiva y los puestos del mercado tradicional, que subirán a ras de calle, entre otros. A ello le seguirán después los trabajos para acometer la desaparición del 'tupper' o las mejoras en el edificio Arkoak y en el entorno peatonal.
El anuncio lo hizo ayer el propio alcalde, Eneko Goia, junto al titular de Abastos Gestión -la empresa concesionaria- Jaime Gómez de Baluguera. El acuerdo entre la institución local y la empresa para reformar el entorno del mercado se firmó el pasado 23 de junio, después de un largo periodo de trámites administrativos y negociaciones con los asentadores, que dieron el visto bueno a los cambios. Con el semáforo en verde, a falta solo del informe de impacto ambiental, el Ayuntamiento acometerá en apenas dos meses las obras en Pescadería.
El consistorio será el encargado de contratar estos trabajos, si bien el coste de los mismos correrá a cargo de la concesionaria, Abastos Gestión, como parte del pago del canon de tres millones de euros que debe hacer al Ayuntamiento por los años que restan hasta el fin de la concesión, establecido para el año 2048. Asimismo, la empresa seguirá abonando el canon anual de 127.000 euros que estaba fijado anteriormente.
Los cambios en este edificio pasan, por una parte, por subir desde la planta sótano a la planta baja los asentadores del mercado -carniceros y pescateros fundamentalmente-, con un acceso directo desde la calle. Se distribuirán a uno y otro lado de un pasillo que conducirá desde la plaza a la calle Iñigo.
Por su parte, en la primera y segunda planta se ubicará, mirando a Aldamar, el nuevo ambulatorio de la Parte Vieja, que dará servicio tanto a este barrio como al Centro -esta obra correrá a cargo de Osakidetza-; mientras que orientado a San Juan se emplazarán en el primer piso un espacio para la puesta en valor del producto local (talleres, catas, showcooking, etc.) y en el segundo se abrirá una pista polideportiva. La entrada a ambas instalaciones se realizará de manera independiente desde la calle Aldamar, que verá su acera ampliada para acoger un mayor flujo de tránsito de personas.
Y la reforma en la planta sótano permitirá una ampliación del establecimiento Lidl y una mejora de almacenes, espacios de carga y descarga e instalaciones. Asimismo, albergará un espacio para la distribución de «última milla» de mercancías en la parte trasera del inmueble, con salida a la calle Iñigo, que también será peatonal, para reducir el trasiego de furgonetas de reparto por el barrio.
Los puestos de las y los baserritarras pasarán de estar en la calle San Juan a estar en la fachada sur del edificio Arkoak. Este cambio permitirá acometer otra nueva mejora en este edificio con la apertura y rasgado de los arcos de las fachadas laterales. Esta operación devolverá al edificio su configuración original.
Por otra parte, se eliminará el 'tupper' y se creará un pequeño acceso a la planta sótano pegando a la calle Aldamar. La desaparición de este edificio central hará posible la creación de una plaza pública más diáfana.
El Ayuntamiento ha instalado en uno de los laterales del edificio 'tupper' unos paneles informativos para que los ciudadanos y visitantes puedan conocer los detalles del nuevo proyecto para La Bretxa. Además, en los mismos también se muestra el recorrido histórico y la evolución del edificio Pescadería y el entorno del mercado desde sus inicios, acompañado de fotos antiguas.
La colección de paneles muestra la distintas etapas desde que en 1870 se inaugurara el mercado hasta el día de hoy, ya que durante su historia ha sido remodelado en numerosas ocasiones, adaptándose a los tiempos. «Una ocasión para poner en valor la historia del mercado y su futuro», destacó el alcalde.
El anuncio lo hizo ayer el propio alcalde, Eneko Goia, junto al titular de Abastos Gestión -la empresa concesionaria- Jaime Gómez de Baluguera. El acuerdo entre la institución local y la empresa para reformar el entorno del mercado se firmó el pasado 23 de junio, después de un largo periodo de trámites administrativos y negociaciones con los asentadores, que dieron el visto bueno a los cambios. Con el semáforo en verde, a falta solo del informe de impacto ambiental, el Ayuntamiento acometerá en apenas dos meses las obras en Pescadería.
El consistorio será el encargado de contratar estos trabajos, si bien el coste de los mismos correrá a cargo de la concesionaria, Abastos Gestión, como parte del pago del canon de tres millones de euros que debe hacer al Ayuntamiento por los años que restan hasta el fin de la concesión, establecido para el año 2048. Asimismo, la empresa seguirá abonando el canon anual de 127.000 euros que estaba fijado anteriormente.
Los cambios en este edificio pasan, por una parte, por subir desde la planta sótano a la planta baja los asentadores del mercado -carniceros y pescateros fundamentalmente-, con un acceso directo desde la calle. Se distribuirán a uno y otro lado de un pasillo que conducirá desde la plaza a la calle Iñigo.
Por su parte, en la primera y segunda planta se ubicará, mirando a Aldamar, el nuevo ambulatorio de la Parte Vieja, que dará servicio tanto a este barrio como al Centro -esta obra correrá a cargo de Osakidetza-; mientras que orientado a San Juan se emplazarán en el primer piso un espacio para la puesta en valor del producto local (talleres, catas, showcooking, etc.) y en el segundo se abrirá una pista polideportiva. La entrada a ambas instalaciones se realizará de manera independiente desde la calle Aldamar, que verá su acera ampliada para acoger un mayor flujo de tránsito de personas.
Y la reforma en la planta sótano permitirá una ampliación del establecimiento Lidl y una mejora de almacenes, espacios de carga y descarga e instalaciones. Asimismo, albergará un espacio para la distribución de «última milla» de mercancías en la parte trasera del inmueble, con salida a la calle Iñigo, que también será peatonal, para reducir el trasiego de furgonetas de reparto por el barrio.
Los puestos de las y los baserritarras pasarán de estar en la calle San Juan a estar en la fachada sur del edificio Arkoak. Este cambio permitirá acometer otra nueva mejora en este edificio con la apertura y rasgado de los arcos de las fachadas laterales. Esta operación devolverá al edificio su configuración original.
Por otra parte, se eliminará el 'tupper' y se creará un pequeño acceso a la planta sótano pegando a la calle Aldamar. La desaparición de este edificio central hará posible la creación de una plaza pública más diáfana.
El Ayuntamiento ha instalado en uno de los laterales del edificio 'tupper' unos paneles informativos para que los ciudadanos y visitantes puedan conocer los detalles del nuevo proyecto para La Bretxa. Además, en los mismos también se muestra el recorrido histórico y la evolución del edificio Pescadería y el entorno del mercado desde sus inicios, acompañado de fotos antiguas.
La colección de paneles muestra la distintas etapas desde que en 1870 se inaugurara el mercado hasta el día de hoy, ya que durante su historia ha sido remodelado en numerosas ocasiones, adaptándose a los tiempos. «Una ocasión para poner en valor la historia del mercado y su futuro», destacó el alcalde.
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