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| Google Imágenes / Manuel Castells |
Críticas al nuevo real decreto que tramita el Gobierno en pleno estado de alarma. CCOO lo considera "liberal" porque incluye medidas planteadas por el PP.
Olga R. Sanmartín | El Mundo, 2020-05-08
https://www.elmundo.es/espana/2020/05/08/5eb45c9c21efa0066a8b464c.html
Todos los nuevos planes de estudios universitarios que se aprueben a partir de ahora deberán incluir de forma obligatoria enseñanzas relacionadas con la igualdad entre hombres y mujeres. Lo anunció ayer en el Congreso el ministro de Universidades, Manuel Castells, que dijo que por primera vez esta medida "será por ley", y lo concreta el borrador del Real Decreto por el que se establece la Ordenación de las Enseñanzas Oficiales en el Sistema Universitario Español, al que ha tenido acceso El Mundo.
El texto, que está en proceso de consulta pública, señala que "entre los principios generales que deberán inspirar el diseño de los nuevos títulos, los planes de estudios deberán tener en cuenta los Objetivos de Desarrollo Sostenible y, en particular, que cualquier actividad profesional debe realizarse desde el respeto a los derechos fundamentales y de igualdad entre hombres y mujeres, debiendo incluirse, en los planes de estudios, enseñanzas relacionadas con dichos derechos, conforme a las competencias inherentes al título".
Estos planes también deberán tener en cuenta enseñanzas relacionadas con "el respeto y promoción de los Derechos Humanos y los principios de accesibilidad universal y diseño para todas las personas" con discapacidad, así como con "los valores propios de una cultura de paz y de valores democráticos".
Fuentes del Ministerio de Universidades explican que ésta es una medida novedosa, pues "hay unidades de igualdad en las universidades, pero en los planes de estudios la equidad no siempre está todo lo presente que podría estar". "El objetivo", añaden, "es tener un plan con medidas coordinadas para poder ayudar a las universidades a poder implementarlos".
La medida no le suena mal a la comunidad educativa, aunque auguran que traerá problemas. Algunas fuentes universitarias opinan que "no tiene mucho sentido introducir estas enseñanzas en carreras técnicas", mientras que otras más críticas consideran que es "una mezcla de Educación para la Ciudadanía y Formación para el Espíritu Nacional".
Una reforma legal tramitada en estado de alarma
El borrador del Gobierno que reforma la estructura de grados y másteres creada en 2007 a partir del Plan Bolonia va a traer más problemas que lo que parecía. Primero, porque la comunidad educativa le reprocha a Castells que lo esté tramitando en pleno estado de alarma. Segundo, porque, tal y como él mismo reconoció ayer en el Congreso, para su elaboración se "ha utilizado una parte de un documento que ya existía" de la época del PP.
El texto introduce algunas de las medidas que quiso poner en marcha el ex ministro de Educación Íñigo Méndez de Vigo, como la acreditación institucional, la creación de títulos con otros países europeos, posibilidad de escoger carreras a la carta o acercar la empresa a la universidad para que haya grados y másteres con mención dual, donde los alumnos trabajan con contrato laboral desde el primer día.
También consolida el modelo de grados de tres años que quiso implantar el ministro José Ignacio Wert y que tantas críticas recibió por parte del PSOE y de Unidas Podemos.
Consolidación de los grados de tres años
CCOO denuncia que "propone grados de 180 o de 240 créditos, y másteres de 60, 90 o 120 créditos" y "vuelve a la controversia del modelo 3+2, que castiga definitivamente a los estudiantes con menos recursos y favorece el mercado de títulos de posgrado en universidades privadas".
Para este sindicato, la propuesta de Castells "incluye itinerarios académicos abiertos sin garantizar la coherencia académica en un modelo liberal de universidad pública a la carta" y "convierte la educación superior en un mercado para los más privilegiados y al servicio del tejido empresarial".
"Entendemos que éste no es el momento adecuado para abordar una reforma estructural del sistema universitario español, sobre todo cuando se hace poniéndolo al servicio de la empresa privada", dice CCOO.
Otras fuentes universitarias opinan que el borrador de real decreto "introduce decisiones que benefician especialmente a las universidades que están trabajando con estudiantes extranjeros, como la Universitat Oberta de Catalunya (UOC)", de la que Castells es catedrático en excedencia, como el impuso a los grados de tres años o el incremento del número de créditos que se pueden obtener fuera de las titulaciones del 15% al 25%.
"Se abre el camino a un peligroso reconocimiento de la actividad laboral y también se incrementa el ámbito y la formación que puede ser reconocida dentro de las titulaciones, abriendo el paso a cursos privados que pueden ser realizados en las propias universidades fuera de los precios públicos", añaden estas fuentes.
El texto también permite evaluar títulos sin permiso de las comunidades autónomas, otra reclamación de la UOC.
El texto, que está en proceso de consulta pública, señala que "entre los principios generales que deberán inspirar el diseño de los nuevos títulos, los planes de estudios deberán tener en cuenta los Objetivos de Desarrollo Sostenible y, en particular, que cualquier actividad profesional debe realizarse desde el respeto a los derechos fundamentales y de igualdad entre hombres y mujeres, debiendo incluirse, en los planes de estudios, enseñanzas relacionadas con dichos derechos, conforme a las competencias inherentes al título".
Estos planes también deberán tener en cuenta enseñanzas relacionadas con "el respeto y promoción de los Derechos Humanos y los principios de accesibilidad universal y diseño para todas las personas" con discapacidad, así como con "los valores propios de una cultura de paz y de valores democráticos".
Fuentes del Ministerio de Universidades explican que ésta es una medida novedosa, pues "hay unidades de igualdad en las universidades, pero en los planes de estudios la equidad no siempre está todo lo presente que podría estar". "El objetivo", añaden, "es tener un plan con medidas coordinadas para poder ayudar a las universidades a poder implementarlos".
La medida no le suena mal a la comunidad educativa, aunque auguran que traerá problemas. Algunas fuentes universitarias opinan que "no tiene mucho sentido introducir estas enseñanzas en carreras técnicas", mientras que otras más críticas consideran que es "una mezcla de Educación para la Ciudadanía y Formación para el Espíritu Nacional".
Una reforma legal tramitada en estado de alarma
El borrador del Gobierno que reforma la estructura de grados y másteres creada en 2007 a partir del Plan Bolonia va a traer más problemas que lo que parecía. Primero, porque la comunidad educativa le reprocha a Castells que lo esté tramitando en pleno estado de alarma. Segundo, porque, tal y como él mismo reconoció ayer en el Congreso, para su elaboración se "ha utilizado una parte de un documento que ya existía" de la época del PP.
El texto introduce algunas de las medidas que quiso poner en marcha el ex ministro de Educación Íñigo Méndez de Vigo, como la acreditación institucional, la creación de títulos con otros países europeos, posibilidad de escoger carreras a la carta o acercar la empresa a la universidad para que haya grados y másteres con mención dual, donde los alumnos trabajan con contrato laboral desde el primer día.
También consolida el modelo de grados de tres años que quiso implantar el ministro José Ignacio Wert y que tantas críticas recibió por parte del PSOE y de Unidas Podemos.
Consolidación de los grados de tres años
CCOO denuncia que "propone grados de 180 o de 240 créditos, y másteres de 60, 90 o 120 créditos" y "vuelve a la controversia del modelo 3+2, que castiga definitivamente a los estudiantes con menos recursos y favorece el mercado de títulos de posgrado en universidades privadas".
Para este sindicato, la propuesta de Castells "incluye itinerarios académicos abiertos sin garantizar la coherencia académica en un modelo liberal de universidad pública a la carta" y "convierte la educación superior en un mercado para los más privilegiados y al servicio del tejido empresarial".
"Entendemos que éste no es el momento adecuado para abordar una reforma estructural del sistema universitario español, sobre todo cuando se hace poniéndolo al servicio de la empresa privada", dice CCOO.
Otras fuentes universitarias opinan que el borrador de real decreto "introduce decisiones que benefician especialmente a las universidades que están trabajando con estudiantes extranjeros, como la Universitat Oberta de Catalunya (UOC)", de la que Castells es catedrático en excedencia, como el impuso a los grados de tres años o el incremento del número de créditos que se pueden obtener fuera de las titulaciones del 15% al 25%.
"Se abre el camino a un peligroso reconocimiento de la actividad laboral y también se incrementa el ámbito y la formación que puede ser reconocida dentro de las titulaciones, abriendo el paso a cursos privados que pueden ser realizados en las propias universidades fuera de los precios públicos", añaden estas fuentes.
El texto también permite evaluar títulos sin permiso de las comunidades autónomas, otra reclamación de la UOC.
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