jueves, 31 de octubre de 2024

#libros #asexualidad | No sex : pequeño tratado de asexualidad y abstinencia

No sex : pequeño tratado de asexualidad y abstinencia / Magali Croset-Calisto ; traducción de Carmen Cocina.
Madrid : Carpe Noctem, 2024 [10-31].
118 p.

/ ES / Libros / ENS / Abstinencia sexual / Asexualidad / Disidencia sexual / Sociología / Testimonios

📘 Ed. impresa: ISBN 9788412929300 / 17.00 €
📝 Cita APA-7: Croset-Calisto, Magali (2024). No sex : pequeño tratado de asexualidad y abstinencia. Carpenoctem.

Una aproximación didáctica, amena y sin prejuicios a un fenómeno poco conocido pero cada vez más presente. 
¿Qué es la asexualidad? ¿Y la abstinencia? ¿Es posible no sentir atracción sexual por nadie? ¿Por qué los jóvenes parecen haber perdido interés en mantener relaciones sexuales? ¿Qué razones hay para dejar de hacer el amor? En una era aparentemente hipersexualizada y obsesionada con el rendimiento, ¿cómo viven su intimidad las personas que han decidido dejar de mantener relaciones sexuales? En este ensayo divulgativo y reciente, publicado originalmente en Francia en 2023, la sexóloga Magali Croset-Calisto acude a la historia, la sociología, el psicoanálisis y los testimonios directos para responder a múltiples interrogantes y analizar la abstinencia y la asexualidad sin olvidarse del lugar y el significado que tienen en nuestra sociedad. Este breve tratado instructivo aspira a resolver dudas y a arrojar luz sobre la sigla menos conocida de los modernos movimientos de disidencia sexual.

😏 Magali Croset-Calisto es psicóloga, sexóloga y experta en adicciones, además de Doctora en literatura moderna. Es autora de una obra multidisciplinar que aúna las ciencias humanas, la salud, la enseñanza, el arte y la literatura. Colabora habitualmente en medios de comunicación y ha publicado ensayos como ‘Fragments d’un discours polyamoureux’ (Michalon, 2017) y ‘Moins de stress grâce au sexe’ (Albin Michel, 2019).

miércoles, 30 de octubre de 2024

#hemeroteca #matrimonio #justicia | El Tribunal Superior de Tokio dictamina que prohibir el matrimonio homosexual es inconstitucional

Imagen de archivo de un Orgullo LGTBI en Japón //

El Tribunal Superior de Tokio dictamina que prohibir el matrimonio homosexual es inconstitucional

La jueza falla que vetar estas uniones supone una violación del principio de igualdad
Europa Press, 2024-10-30
https://www.europapress.es/internacional/noticia-tribunal-superior-tokio-dictamina-prohibir-matrimonio-homosexual-inconstitucional-20241030124238.html

El Tribunal Superior de Tokio ha dictaminado este miércoles que no permitir el matrimonio a las parejas del mismo sexo es inconstitucional, una decisión que los demandantes han tildado como "histórica" y que llega después de que un tribunal de Sapporo fallara también contra esta medida.

Esta resolución se enmarca en una serie de demandas presentadas ante cinco tribunales de todo el país en un intento de la comunidad LGTBI de reivindicar sus derechos, que no están blindados en Japón.

Sin embargo, esta última sentencia destaca por el uso de un lenguaje más contundente respecto a las anteriores, que declaraban que las leyes nacionales que prohíben el matrimonio homosexual violan la Constitución japonesa.

Ahora, la presidenta del tribunal, Sonoe Taniguchi, ha afirmado que permitir únicamente el matrimonio a parejas heterosexuales vulnera el principio de igualdad, pero ha desestimado las solicitudes de indemnización presentadas por los demandantes.

No obstante, ha detallado que esta prohibición viola el artículo 14 de la Carta Magna, que garantiza el derecho a la igualdad, y la segunda cláusula del artículo 24, que establece que las leyes sobre el matrimonio deben basarse en la dignidad individual.

"Las cuestiones relacionadas con el matrimonio y la familia deben tener en cuenta diversos factores, entre ellos las tradiciones del Estado y el sentimiento público", dice la sentencia. "Pero incluso si se tiene esto en cuenta, no hay base racional para distinguir si las personas tienen o no derecho a beneficios legales en función de la orientación sexual, una característica que no puede elegirse ni cambiarse a voluntad", ha aclarado.

Esta sentencia hace además referencia a la posibilidad de revisar la legislación vigente para conceder a estas parejas los mismos derechos, según informaciones recogidas por el diario 'The Japan Times'. Mientras, el Gobierno sostiene que la Constitución reconoce de manera implícita que un matrimonio es únicamente la unión entre un hombre y una mujer dado que el artículo 24 establece que debe basarse en "el consentimiento mutuo de las partes de ambos sexos".

Este veredicto sigue a otro similar adoptado por un tribunal de Sapporo en marzo de 2021, que indicaba que el Código Civil y la ley de registro familiar violan las garantías constitucionales de igualdad ante la ley.

No obstante, otros tribunales han indicado en el pasado que las legislaciones que prohíben el matrimonio entre personas del mismo sexo son constitucionales, si bien algunas cortes han matizado que la inexistencia de un sistema legal que reconozca estos matrimonios refleja en sí "un estado de inconstitucionalidad".

martes, 29 de octubre de 2024

#liburuak #musica #soziologia | Euskal Herria underground : 1986-2015 bidaia elektroniko bat

Euskal Herria underground : 1986-2015 bidaia elektroniko bat / Mikel Urkixo Aierdi.

Bilbo : Beta III Milenio, 2024 [10-29].
224 p.
Serie: Ensayo.

/ EUS / Libros / ENS / Cultura pop / Euskal Herria / Memoria sentimental / Música / Sociología / Testimonios / Underground

📘 Ed. impresa: ISBN 9788419227775 / 23.00 €
📝 Cita APA-7: Urkixo Aierdi, Mikel (2024). Euskal Herria underground : 1986-2015 bidaia elektroniko bat.


2001eko igande anonimoa. Amaitzear da mundu analogikoa. Galdua du borroka. Gazteetako batek dantzan jarraitzen du, Imanol Salvador ‘Ima Intermusic’ek gau horretan Pagoa klubean jarri duen azken diskoa gogoan. Ezin kabiturik. Zoroen pare egiten du dantza. Lehen orduko eguzki izpiekin batera mugitzen du gorputza. Arritmikoki. Gazteak oraindik ez daki Richie Hawtinen Minus-Orange1 dela, burmuineko arrakaletan gora, barrenak aldrebestu dizkion kanta. Liburu honek 14 protagonistaren testigantzak biltzen ditu. Musika elektroniko bazterreko eta autentikoenak gure herrian zer bide egin zuen ulertu edo ezagutu nahi duenarentzat, ezinbestekoa.

😏 Mikel Urkixo (1981), Zeberio. Soziologia eta Zientzia Politikoak. Euskal Herriko Unibertsitatea (UPV/EHU). Euskal Filologia. Euskal Herriko Unibertsitatea (UPV/EHU). Aurretik ‘Hustu artekoak’ (2022) liburua argitaratu du. Orain, 2024an, ‘Euskal Herria underground’ liburua argitaratu berri du.

lunes, 28 de octubre de 2024

#libros #gais #masculinidad | Masculinidades gays y maricas : en la cultura española contemporánea

Masculinidades gays y maricas : en la cultura española contemporánea / Iker González-Allende (ed.).

Barcelona [etc.] : Egales, 2024 [10-28].
382 p.
Serie: G.

/ ES / Libros / ENS / REC / Cultura gay / Gais / Homonormatividad / Homosexualidad / Identidades / Interseccionalidad / Mariconeo / Masculinidad

📘 Ed. Impresa: ISBN 9788419728654 / 21,95 €
📝 Cita APA-7: González-Allende, Iker (2024). Masculinidades gays y maricas : en la cultura española contemporánea. Egales.

«¡A Dios pongo por testigo! ¡A Dios pongo por testigo que ni yo ni ninguna otra mariquita volveremos a sufrir humillaciones!»
Este libro analiza la diversidad de masculinidades de los hombres gays y maricas en la cultura española desde 1975 hasta la actualidad. Se exploran las múltiples formas en que los hombres gays y maricas encarnan y entienden la virilidad, desde posiciones cómplices con la masculinidad hegemónica hasta las masculinidades alternativas alejadas del comportamiento normativo. Los once capítulos de este libro cubren diversos géneros literarios y audiovisuales como la narrativa, la poesía, el teatro, la televisión y el cine. Se abordan distintos tipos de masculinidades gays como la disidente, la hedonista, la intelectual, la homonormativa, la seropositiva, la basada en los afectos y la de los hombres con diversidad funcional. Se estudian diversos escritores y directores, algunos distinguidos en el canon gay español (Rafael Chirbes, Vicente Molina Foix, Dionisio Cañas) y otros reconocidos más recientemente (Roberto Pérez Toledo, Héctor Lozano, Juanjo Olasagarre, Ángelo Néstore). Los capítulos indagan en las masculinidades desde una perspectiva interseccional, considerando múltiples aspectos identitarios como la clase social, la edad, la raza, la diversidad funcional y la identidad nacional.

viernes, 25 de octubre de 2024

#hemeroteca #homofobia | Bob Pop, contundente con un analista de '59 segundos' en TVE: "Dios no existe, los maricones sí"

El Diario / Bob Pop //

Bob Pop, contundente con un analista de '59 segundos' en TVE: "Dios no existe, los maricones sí"

El famoso activista y escritor, creador de la serie 'Maricón perdido', debatió sobre homofobia en el programa de TVE '59 segundos'
Redacción verTele | El Diario, 2024-10-25
https://www.eldiario.es/vertele/noticias/bob-pop-homofobia-59-segundos-dios-no-existe-maricones-si-pablo-hertfelder_1_11766063.html

Aunque la estruendosa dimisión de Iñigo Errejón se comió buena parte de su tiempo, ‘59 segundos’ (La 1) también trajo a la mesa de debate una cuestión que, lejos de generar consenso entre los tertulianos, enfrentó a unos con otros.

“¿Es España un país homófobo?”, les preguntó la presentadora del programa, Gemma Nierga. Bob Pop y Valeria Vegas, conocidos activistas LGTBI, tuvieron pocas dudas al respecto: en nuestro país todavía impera una cultura machista que, con más o menos sutileza, desprecia y castiga a las personas del colectivo. No solo importan los datos de agresiones; también la mentalidad colectiva.

Pero Pablo Hertfelder, presidente del Instituto de Política Social, fue menos categórico en este sentido, aunque reconoció que 'marica', “por desgracia”, todavía se utiliza como insulto. “Al igual que también se utiliza la expresión 'me cago en Dios'. Esto también se escucha, y esto es cristianofobia”, señaló acto seguido.

A Bob Pop se le atragantó la comparativa. “Dios no existe y los maricones, sí”, exclamó desde la otra punta del plató, molestando con sus palabras a Hertfelder, quien le hizo saber que “los católicos también se sienten ofendidos” con estas “declaraciones de que Dios no existe”.

Lejos de darle la razón, el creador de ‘Maricón perdido’ se mantuvo fiel a su argumento de partida: “No se pueden ofender por algo que es una verdad absoluta y científica, chiquillo”, respondió a su oponente, quien se revolvía en su asiento de pura indignación. “La fe es otra cosa. Que alguien crea, no significa que Dios exista. Yo respeto muchísimo que la gente crea en lo que quiera, pero los maricones, las bolleras, las personas transexuales, los bisexuales y las bisexualas no somos una cuestión de fe”, insistió el famoso escritor.

Dicho esto, la controvertida comparación pasó a un segundo plano y el debate se centró de nuevo en la pregunta inicial, así que Bob Pop aprovechó para recordar que “la homofobia no es solo un delito”, por lo que no se puede medir la homofobia de España en función del número de agresiones: “La homofobia es una cultura”, subrayó.

jueves, 24 de octubre de 2024

#hemeroteca #lgtbi #asistenciasocial | Atendidas en Navarra más de 400 personas por el servicio LGTBI+ este año

Presentación de la campaña LGTBI+ 'Estamos contigo / Zurekin bat' //

Atendidas en Navarra más de 400 personas por el servicio LGTBI+ este año

La mitad de las consultas son de tipo informativo y un 33%, para atención psicológica y sexológica
Jesús Morales | Noticias de Navarra, 2024-10-24
https://www.noticiasdenavarra.com/sociedad/2024/10/24/campana-servicios-colectivo-lgtbi-navarra-8844846.html

El servicio de Atención Integral a personas LGTBI+ Kattalingune ha atendido a 409 personas en los primeros nueve meses de este año, para sumar un total de 500 atenciones. Casi la mitad de ellas, el 49,6%, fueron relativas a solicitudes de información, un 33% relacionadas con atenciones psicológicas y sexológicas y un 14%, con atención jurídica, seguidas por acogida y acompañamiento social.

El Gobierno de Navarra lanza esta semana una campaña de promoción de sus servicios de atención al colectivo LGTBI+ bajo el mensaje ‘Estamos contigo / Zurekin bat’, adaptación de una campaña del Ministerio de Igualdad que busca impulsar la igualdad real de estas personas y actuar contra las agresiones que sufren, prestando asistencia a las víctimas e incidiendo también en prevención.

El objetivo es difundir la atención que se presta en la Comunidad Foral desde el servicio de Kattalingune y el teléfono 028, que ofrece asistencia 24 horas los 365 días del año.

La iniciativa ha sido presentada esta mañana por el vicepresidente primero y consejero de Presidencia e Igualdad, Félix Taberna, acompañado de la directora gerente del Instituto Navarra para la Igualdad - Nafarroako Berdintasunerako Institutua (INAI / NABI), Patricia Abad, que han comparecido antes los medios frente a las lonas de la campaña instaladas en la fachada del Palacio de Navarra, en Pamplona / Iruña. El acto ha contado también con la participación del Defensor del Pueblo, Patxi Vera, la subdirectora de Igualdad LGTBI+ del INAI / NABI, Luna Martinicorena, y representantes de grupos parlamentarios. Han asistido también representantes de colectivos LGTBI+ como Kattalingorri, Ilota Ledo y Navarra LGTBI+ Friends.

El vicepresidente Taberna ha recordado que tanto desde el servicio Kattalingune como desde el teléfono 028 se puede obtener información de interés para el colectivo LGTBI+ y acceder a recursos de información, acompañamiento social, apoyo psicológico, sexológico y jurídico tanto a personas LGTBI+ como a sus familias.

El Ejecutivo foral tiene previsto difundir los materiales de la campaña a través de anuncios en prensa escrita y digital, revistas locales, marquesinas en Pamplona y comarca, Tudela, Estella-Lizarra y Tafalla y en los mupis digitales de la capital navarra (soportes instalados en distintas calles de la ciudad que proyectan información servicio y campañas institucionales). La campaña estará también presente en los campos universitarios de la Universidad Pública de Navarra (UPNA) en Arrosadia y Tudela.

El vídeo creado para mupis y redes sociales lanza el mensaje ‘Estamos contigo / Zurekin bat’, con imágenes de personas LGTBI+ mirando a cámara, mostrando la diversidad de perfiles que integran el colectivo, dentro de la apuesta del Gobierno de Navarra por dar visibilidad a su realidad y difundir los recursos que tienen a su disposición para recibir asistencia o denunciar cualquier tipo de discriminación.

Atención garantizada 24 horas al día los 365 días al año
Cabe recordar que el Gobierno de Navarra, a través del INAI / NABI, y el Ministerio de Igualdad han suscrito este año un convenio para coordinar sus servicios telefónicos de información y atención integral, con el objetivo de reforzar la atención prestada a las personas LGTBI+.

Gracias a este acuerdo se presta atención de manera coordinada entre el Teléfono Arcoíris 028, recurso de carácter estatal activado en julio de 2023, y el servicio de atención a la diversidad sexual que se viene ofreciendo en Navarra desde 2016 en materia social, psicológica o jurídica, poniendo el foco en atender necesidades específicas de las víctimas de delitos de odio o de discriminación por LGTBI+fobia o de violencia intragénero.

El contacto con el número 028 es gratuito y confidencial, accesible a personas con discapacidad auditiva y/o del habla, y atiende en castellano, catalán, gallego, euskera, inglés y francés.

Gracias al convenio suscrito con el Estado, las llamadas realizadas desde la Comunidad Foral al número de marcación abreviada 028 relativas a información y atención integral en materia de diversidad sexual y de género y LGTBI+fobia se derivan al servicio telefónico desde el que ya venía prestando este servicio en Navarra, el 948 229 149, asegurando la prestación de un servicio público de cercanía de la manera más rápida y efectiva posible.

Si la llamada realizada al servicio telefónico 028 Arcoíris precisa atención de urgencia y emergencia se derivará inmediatamente al servicio 112 de la Comunidad Foral de Navarra, siempre con el debido respeto a la protección de datos en estos casos.

Del mismo modo, desde el teléfono 948 229 149 se deriva al 028 cualquier llamada relativa a discriminación y violencia LGTBI+fóbica cuando es necesario para garantizar la correcta atención de la misma; en particular, cuando la llamada recibida requiere ser atendida en idiomas distintos al castellano o el euskera, mediante medios específicos para personas con discapacidad auditiva o del habla o en horario no cubierto por el servicio navarro.

De esta forma se garantiza la atención durante 24 horas del día los 365 días al año a personas lesbianas, gais, transexuales, bisexuales, intersexuales y con otras orientaciones sexuales o expresiones de género con necesidad de atención social, asistencia psicológica y/o jurídica.

Servicio Kattalingune de atención integral a personas LGTBI+ y otras acciones en 2025
Por otra parte, el Gobierno de Navarra cuenta con el servicio de atención integral a personas LGTBI+ Kattalingune, que presta asistencia de forma gratuita a toda Navarra desde sus sedes de Pamplona, Tudela, Irurtzun, Tafalla y Estella – Lizarra. Un equipo multidisciplinar ofrece información, acogida y acompañamiento social, atención psicológica y sexológica y atención jurídica, tanto a personas del colectivo LGTBI+ como a familias, grupos y profesionales.

Entre las iniciativas del Servicio enfocadas a luchar contra las agresiones de las que son objeto las personas LGTBI+ destaca también la Guía para víctimas de delitos de odio por LGTBIfobia, disponible tanto en castellano como euskera, con información sobre qué son los delitos de odio y cómo identificarlos y pautas de actuación en caso de ser víctima o testigo de uno de ellos.

Cabe destacar que en 2025 está prevista la licitación de la gestión del servicio de atención integral a personas LGTBI+ Kattalingune, por parte del INAI/NABI, al objeto de avanzar en el impulso y promoción de la igualdad real de derechos del colectivo LGTBI+ y el desarrollo de medias de atención específicas para superar la discriminación de género que afecta a este colectivo.

Entre las acciones destacadas previstas para el próximo año figura también el diseño del futuro Observatorio sobre la LGTBI+fobia en Navarra, órgano que analizará la realidad LGTBI+ en el conjunto de la Comunidad Foral al objeto de coordinar el protocolo de actuación ante casos de LGTBI+fobia. También, la evaluación del I Plan de Acción LGTBI+, y la elaboración del II Plan de Acción, que es la herramienta esencial para el desarrollo de las políticas LGTBI+ y la transversalidad de las mismas en toda la acción de Gobierno.

Asimismo, desde el INAI se tiene previsto seguir trabajando de la mano de las entidades locales y las asociaciones y colectivos en el impulso a proyectos de igualdad LGTBI+ a través de diferentes convocatorias de subvenciones. También en la visibilidad de las personas LGTBI+ a través de campañas de sensibilización con el fin de promover el valor positivo de la diversidad.

martes, 22 de octubre de 2024

#hemeroteca #homofobia #editoriales | Leer a cara des-cubierta

El Salto / Literatura 'gay' a la sombra //

Leer a cara des-cubierta

Roca Editorial acaba de publicar un libro de temática LGTBI... pero no quiere que lo sepas.
Ramón Martínez | La mirada rosa, El Salto, 2024-10-22
https://www.elsaltodiario.com/mirada-rosa/leer-cara-des-cubierta 

Siempre que le hablo de la portada de un libro, mi amiga Miren, en la trastienda de la fantástica librería Mujeres y Compañía donde trabaja, me recuerda con vehemencia que ese trozo de cartón que envuelve las tripas de cualquier volumen realmente se llama “cubierta”. El lado posterior, como es lógico, tiene por nombre “contracubierta”. Son datos técnicos que tal vez solo interesen a quienes acostumbramos pasearnos por los bosques de la literatura, pero hace pocos días, visitando Berkana —la otra librería donde paso varias horas a la semana—, el nombre de esa parte de los libros ha cobrado una importancia especial.

Hace tiempo era realmente complicado identificar esa literatura que hoy llamamos “LGTBI”. Cuando un libro había sido publicado por una gran editorial resultaba prácticamente imposible saber a primera vista si entre sus páginas aparecería alguna referencia a la realidad de lesbianas, gais, bisexuales, trans e intersexuales. Incluso las obras de autores visiblemente LGTBI presentaban sus tramas con un pudor extremado, de suerte que, como mucho, solo a través de ciertos códigos muy particulares podía comprenderse qué tipo de texto ofrecían.

Creo que es una experiencia compartida: hemos leído muchas novelas donde el protagonista “explora su identidad”, “descubre una forma diferente de vivir” o “debe enfrentarse a sus secretos”, que es lo que aparecía en aquellas misteriosas contracubiertas, o mejor “encubiertas”, porque con esos textos ambiguos pretendían ocultar la verdadera naturaleza del libro que abrazaban.

Con el tiempo nuevas editoriales visibles y valientes comenzaron a publicar sin esos melindres. Por fin las traseras ofrecían los argumentos con claridad y ya no era necesario aprender a leer entre líneas. La oferta literaria empezaba a parecerse a la vida real: cada vez eran menos las personas que encubrían su verdadera forma de ser y también los libros podían salir de sus armarios de cartón.

En los últimos años un gran número de editoriales generalistas se han ido sumando a publicar sin remilgos literatura LGTBI visible y “des-cubierta”, pero, aunque siempre es motivo de celebración disponer de más publicaciones sobre las cuestiones que históricamente han sido relegadas a un segundo plano o, peor aún, al espinoso campo de la denominada “subliteratura”; surge ahora el problema de que no toda visibilidad debe considerarse positiva, más aún cuando esa supuesta visibilidad no aparece por ningún sitio.

Hace unos días llegó a Berkana ‘A la sombra de un laurel de indias’, escrita por Jesús Nadador y publicada por la editorial Roca, en cuya contracubierta no aparece ni una sola mención a que la homosexualidad del hijo del protagonista es el centro de la trama. Por eso Mili Hernández, que a estas alturas ya ha tenido que aguantar demasiados silencios, decidió añadir a la estantería donde descansa el libro un pequeño cartel donde puede leerse ‘Este libro tiene temática LGTBIQ+, pero Roca Editorial no quiere que lo sepas’ y, a continuación, un resumen de cuál es el verdadero argumento de la novela.

Aún no la he leído, pero se agradece que, frente a quienes deciden invadir un género literario por intereses comerciales —pese a que les gusta tan poco como para pretender borrar sus huellas y las tramas de sus publicaciones—, haya quien siga protegiendo las lecturas de quienes siempre hemos querido leer a cara “des-cubierta”.

lunes, 21 de octubre de 2024

#hemeroteca #nobinarie | ¿Tercera casilla o eliminación del sexo registral? El debate está servido en el movimiento trans y no binario

Bandera 'genderqueer' en el Orgullo de Valencia 2019 //

¿Tercera casilla o eliminación del sexo registral? El debate está servido en el movimiento trans y no binario

Añadir una opción más a las de “hombre” y “mujer” para después avanzar hacia la eliminación del sexo registral es la postura mayoritaria. Voces críticas con esta opción abogan por reivindicar directamente la descertificación: “La tercera casilla es pan para hoy y hambre para mañana porque perpetúa el sistema de género”.
Deva Mar Escobedo | El Salto, 2014-10-21
https://www.elsaltodiario.com/lgtbiq/tercera-casilla-eliminacion-del-sexo-registral-debate-servido-movimiento-trans-no-binario

“Votos emitidos: 345. Sí: 188. No: 150. Abstenciones: 7. En consecuencia, queda aprobado el dictamen”. El palco del Congreso de los Diputados, desde donde han seguido la votación personas representantes de las asociaciones que han participado en la redacción de la norma, estalla en júbilo. Con estas palabras, la entonces presidenta de la cámara, Meritxell Batet, daba por aprobada la ley trans. Sin embargo, una de las personas invitadas a la votación tiene una sensación agridulce: Darko Decimavilla, de No Binaries España, reconoce que la normativa trae avances, pero deja de lado una de las reivindicaciones principales de las personas no binarias: la tercera casilla de género no binario en el DNI.

Esa tercera opción supondría la igualdad de condiciones entre hombres, mujeres y personas no binarias, además de ser “cuestión de justicia social”, explica Decimavilla. La asociación de la que forma parte ha sido la única específica de personas no binarias en la mesa de negociación de la norma con el Ministerio de Igualdad y sus postulados se han considerado representativos de la demográfica que representan. No obstante, las voces de otras personas no binarias se han alzado críticas con la reivindicación de la tercera casilla y piden en su lugar la descertificación del sexo registral.
La postura de la asociación mayoritaria de personas no binarias en España es la tercera casilla por “suponer la igualdad con hombres y mujeres” y ser “de justicia social”
El debate no es entre una opción u otra —quienes defienden la tercera categorización lo hacen como primer paso hacia la eliminación del sexo registral—, sino sobre si la reclamación política debería ser pedir esa tercera casilla o pasar directamente al objetivo final de la descertificación. “Reclamar una tercera casilla es pan para hoy y hambre para mañana porque perpetúa el sistema de género. Esencializa lo enebé como una tercera identidad cuando queremos plantear una crítica a las identidades en sí mismas”, explica Clara Galé, integrante de la plataforma Orgullo Crítico de Madrid. Esta organización lleva varios años pidiendo en cada manifiesto del día del Orgullo la descertificación del sexo registral.

El posible punto medio entre tercera casilla y eliminación del sexo registral se llevó al Congreso de la mano de Unidos Podemos en 2018 y varios grupos en 2022. En ambas propuestas legislativas se pedían “medidas que permitan omitir, a petición de la persona interesada, la mención relativa al sexo en sus documentos oficiales”, aunque este seguiría constando en todos los sistemas de la administración. Todas las fuentes consultadas para este reportaje se oponen a la idea. “Si voy a la administración, meten mi número de DNI en el ordenador y ya les aparece el sexo por mucho que no lo ponga en la tarjeta, ¿qué más me da a mí qué ponga o no?”, resume Decimavilla.

Reconocimiento, avances y retrocesos

El Estudio sobre las necesidades y demandas de las personas no binarias en España, publicado en 2022 por el Ministerio de Igualdad, es de las pocas fuentes estadísticas sobre esta demográfica. En él, un 63% de personas encuestadas afirman que utilizarían la tercera casilla si existiera.

Para Darko Decimavilla, la tercera opción de sexo es una forma de que la sociedad reconozca la existencia de las personas no binarias. “Lo que no se nombra no existe”, aduce esta persona integrante de No Binaries España. A partir del reconocimiento, argumenta, se pueden tomar pasos legislativos para proteger a las personas no binarias. “La ley no contempla que exista una persona enebé, solo habla de hombres y mujeres. En el momento en que alguien consiga una tercera casilla, eso sienta precedente y tendrán que incluirnos en las leyes”, especula.
Por el momento, el “sexo no especificado” o género no binario está limitado a las personas con pasaportes extranjeros mientras que los intentos de incluir el no binarismo de género en otras entidades ha acabado en fracaso
Alana Speck, une no binarie de origen alemán, consiguió que el Registro de Extranjería le considere como de “sexo no especificado” tras una lucha que llegó al Tribunal Superior de Justicia de Andalucía. Esta persona ‘genderqueer’ estima que ahora serán unas 25 personas que, como elle, tienen una X en su sexo registral en lo que respecta a la administración de extranjería. Sin embargo, esto no ha abierto la brecha que esperaba en otros organismos. “Tengo diferentes géneros en diferentes administraciones”, cuenta Speck, para quien su lucha demuestra lo “absurdo” y “ridículo” que es el sistema de sexo registral.

Por el momento, parece que el “sexo no especificado” o género no binario está limitado a las personas con pasaportes extranjeros. Intentos de incluir el no binarismo de género en otras entidades han acabado en fracaso. En algunas ocasiones, ha sido el propio organismo quien se ha negado a reconocer el género no binario de la persona: el Registro Civil descartó inscribir a Decimavilla de esta forma en sus listados. En otros casos, un ente regulador ha deshecho lo que hizo una administración: la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) vetó en marzo de este año que el Gobierno de Canarias utilizara la casilla no binaria en sus documentos públicos.

Exposición en una sociedad enebéfoba

La argumentación que hizo el regulador de la privacidad para tumbar los formularios canarios era torticera y equiparaba el género con las creencias religiosas para aducir que no se debería dar más opción que hombre o mujer. Sin embargo, una de las explicaciones de la AEPD sí merece tenerse en cuenta porque reproduce la preocupación de muchas personas no binarias: que marcar una tercera casilla les exponga públicamente cuando prefieran pasar desapercibides.

Entre les encuestades para el estudio del Ministerio de Igualdad abunda la preocupación sobre algunos aspectos de la tercera casilla. Muches dicen que necesitarían más información sobre las consecuencias del cambio antes de dar el paso, y une de cada cinco confiesa que teme que constar como un “tercer género” le expondría a más discriminación. “Yo usaría el marcador de ‘tercer género’ (o, como mejor nombre, ‘no binarie’) si hubiese garantías (laborales, sociales...) de que es una opción segura respecto a mi integridad física y mental”, afirma una de las personas que participó en los grupos de discusión del estudio.
Para Darko Decimavilla, “la tercera casilla es más factible a corto plazo. La descertificación es una utopía y necesitaría abrir debates más amplios”
Decimavilla dice entender la preocupación “totalmente válida” de las personas que se expresan en esta línea, pero recalca que es el Estado el que debe encargarse de velar por la seguridad de les enebés. ¿Esta preocupación no desaparecería si elimináramos el sexo registral por completo? “Sí, pero la descertificación es una utopía y necesitaría abrir debates amplios, por ejemplo, sobre la ley de violencia de género. La tercera casilla es más factible a corto plazo”, responde Decimavilla. Esa es la postura de la asociación, aunque elle recalca que “una cosa es lo que defendemos por estrategia a nivel colectivo, y otra lo que pensamos como individuos”. “Cuando se eliminen las violencias por género y ya no sean necesarias las leyes que protegen a las mujeres, podremos eliminar el sexo registral”, analiza Decimavilla.

La descertificación y sus retos
Aunque minoritaria, la descertificación del sexo registral sería la opción preferida de un número considerable de personas no binarias. En el estudio encargado por Igualdad, un 17% de encuestades proponían esta medida. “Creo que más que añadir un tercer género en los documentos identificativos y administrativos, lo que debería hacer es eliminar el género por completo”, decía una de las personas participantes en el estudio.

Y es que reivindicar una tercera casilla es, para personas como Alana Speck, “abrir brechas, pero no la solución”. Esta persona afirma que incluir el género no binario en los registros en vez de eliminar el sexo pondría a las personas no binarias en el último escalón de una jerarquía. “En la Seguridad Social, la casilla uno es para hombre y, la dos, para mujer. Simplemente nos añadirían abajo del todo”, opina le ‘genderqueer’. Aunque ha luchado por su derecho a constar como no binarie en las administraciones, cree que “no vamos a cambiar el sistema de género con la tercera casilla” y que la eliminación de estas taxonomías permitiría fluir en el género.

Clara Galé, el integrante del Orgullo Crítico madrileño, también es rotundo: “Lo interesante tanto de la autodeterminación como de la abolición del sexo registral es quitarle poder al Estado para dárselo a la ciudadanía”. Y lanza una pregunta: “Si se pudieron eliminar casillas en la documentación como la referente al estado civil, ¿por qué no íbamos a poder suprimir el sexo?”.

En Reino Unido, país que carece de DNI y donde la identificación se hace de viva voz o mostrando un carné de conducir o similares, un estudio publicado en 2022 indagaba sobre las percepciones de las personas no binarias respecto al sexo registral. En sus resultados, muestran que un 57% de les encuestades estaban a favor de abolir el sexo legal, aunque creían que este horizonte es “un sueño imposible”.
Las posiciones a favor de la descertificación aseguran que es la medida necesaria en el camino para abolir el género y que no tendría por qué afectar a la legislación en materia de violencia de género o a las estadísticas
Cuando se habla de las dificultades de eliminar el sexo registral, muchas personas aducen preocupación en lo referente a las leyes de discriminación positiva hacia las mujeres o la recogida de estadísticas para elaborar políticas públicas. Speck cree que estas preocupaciones no tienen por qué tener fundamento: “Se puede luchar contra la discriminación sin que la identidad figure en el Registro Civil”. “Se prohíbe la discriminación por motivos de racialización, estado seropositivo o creencias religiosas sin que consten en ningún registro”, ejemplifica.

En lo que respecta a las estadísticas que recogen el género, este no binarie cree que con la autoidentificación puede bastar. Preguntade por qué pasaría si la gente mintiera para boicotear la propuesta —en la misma línea que influencers de la manosfera como Roma Gallardo afirmaban haberse cambiado el sexo a mujer para criticar la autodeterminación de género—, Speck responde que la verificación de los datos recabados “es un problema que tienen todas las encuestas”. Y recuerda que, según Foucault, las estadísticas y la mirada del Estado no solo reflejan la realidad, sino que también la construyen.

Más allá de visiones de un futuro sin género, las categorizaciones de hombre y mujer ya son un problema en el presente para personas trans y/o intersex que acuden, por ejemplo, al sistema de salud. Ya en 2020, el activista trans Rubén Castro denunciaba que su médica de cabecera no podía derivarle a ginecología porque el sistema no contemplaba poder citar a un hombre en ese servicio. Speck relata que su centro de salud no le invita a realizarse pruebas para el cáncer de mama o de próstata a pesar de estar en el rango de edad para ambos. Para esta persona, el motivo es que su cuerpo “no está previsto”. “Sería mucho más útil que el sistema incluya las características concretas del cuerpo de cada persona”, dice le ‘genderqueer’.

#libros #contracultura | Ángeles bailando en la cabeza de un alfiler : la explosión libertaria de 1976-1977

Ángeles bailando en la cabeza de un alfiler : la explosión libertaria de 1976-1977 / Pepe Ribas.
Madrid : Libros del K.O., 2024 [10-21].
326 p.

/ ES / Libros / ENS / Barcelona / Contracultura / Libertarias / Memoria sentimental / Testimonios / Transición

📘 Ed. impresa: ISBN 9788419119742 / 22.90 €
📝 Cita APA-7: Ribas, Pepe (2024). Ángeles bailando en la cabeza de un alfiler : la explosión libertaria de 1976-1977. Libros del K.O.

En la segunda mitad de la década de los setenta, Barcelona vivió una explosión libertaria cuyos ecos se replicaron, en mayor o menor medida, en gran parte de España. Se vivía la etapa más creativa en un país en el que había teatro independiente sin teatros, vanguardias sin escuelas ni museos, lectores y compradores de libros sin bibliotecas públicas. Una parte de la generación más joven supo cultivarse y crear sin reglas ni mandatos: las consignas, si existían, las arrastraba la brisa hasta el camión de la basura.

Como en una coreografía acelerada y delirante, Pepe Ribas (fundador de la mítica revista Ajoblanco) evoca aquella efervescencia libertaria que se desarrollaba sobre un confuso trasfondo social de ilusión y miedo, libertad y un atrevimiento hasta la asfixia, en el que todo parecía posible. El espejismo terminó desvaneciéndose: las instituciones y los partidos políticos maniobraron para, primero encauzar, y luego ahogar, esta fuerza libertaria demasiado imprevisible para la ortodoxia política (tanto de derechas como de izquierdas). Envolvieron la contracultura en diseño, sentimiento nacional y negocio, la alegría se transformó en interés individual y en neurosis. De compartirlo casi todo se pasó a la competitividad y a la insatisfacción bañada en alcohol. La heroína empezó a sembrar la calle de cadáveres y delincuencia. Pero ese espejismo no fue en vano: gran parte de su legado ha permeado hasta nuestros días a través del ecologismo, el feminismo, la liberación sexual y la cultura libre e independiente.

#libros #homosexualidad #literatura | Ellos y el tiempo

Ellos y el tiempo / Jaime Sempere : prólogo de Oscar Hernández Campano.
Barcelona [etc.] : Egales, 2024 [10-21].
456 p.

/ ES / Libros / NOV / Literatura / Homosexualidad / Relaciones amorosas /

📘 Ed. impresa: ISBN 9788419728661 / 22.95 €
📝 Cita APA-7: Sempere, Jaime (2024). Ellos y el tiempo. Egales.

París, 1874. Louis y Christophe creen estar en su mejor momento. Uno es dueño del periódico más vendido de la Tercera República francesa y el otro goza de un gran éxito como dramaturgo en los cafés-teatros de la capital. Ambos son ajenos a la realidad exterior, a los rumores que los señalan: están enamorados. Sin embargo, un telegrama urgente llega en la madrugada del 9 de mayo a la redacción del periódico. Un compañero de infancia e íntimo amigo de Louis ha fallecido. El magnate ignora que pronto se verá involucrado en una investigación por asesinato y que su destino está a punto de verse comprometido por una amenaza del pasado. Arriesgándose a perderlo todo, decide continuar adelante: la vida de Christophe, su amado, está en sus manos.

😏 Jaime Sempere (Madrid, 1985), Máster en Escritura y Narración. Ha ganado diversos concursos de relatos como el XV Certamen Literario Ateneo Cultural Paterna. En 2023 publicó "Los retoños" y participó en las antologías "Tu boca en mi piel" y "Yo no tengo la culpa de haber leído a Mendicutti", ambas publicadas por Egales. Colabora como corrector con Nórdica Libros, Capitán Swing o Fulgencio Pimentel, entre otras. Actualmente es librero de Berkana y editor de Flores Raras y Egales. "Ellos y el tiempo", finalista del IX Premio Internacional de Novela «Alcorcón Siglo xxi», supone su regreso a la literatura LGTBIAQ+.

#hemeroteca #lgtbi | Paula Iglesias, presidenta de la FELGTBI: "Llamar maricón no es una forma de hablar, es homofobia"

Paula Iglesias, presidenta de la FELGTBI: "Llamar maricón no es una forma de hablar, es homofobia"
"Siempre hemos ido de la mano del movimiento que consideramos feminista: aquel que no excluye a ninguna compañera" / "Con los casos de fraude se ha intentado instrumentalizar a las personas trans para restar valor a una ley"
infoLibre, 2024-10-21
https://www.infolibre.es/igualdad/paula-iglesias-presidenta-felgtbi-llamar-maricon-mierda-alguien-homofobia-no-forma-hablar_1_1883773.html

Paula Iglesias //
Parece difícil imaginar un examen más duro que aquel que se deslizó frente a la Federación Estatal LGTBI (FELGTBI+) allá por febrero de 2021. Entonces, salían a la luz los primeros borradores de la llamada ‘ley trans’. Aunque no era el punto de partida, sino el resultado de años de trabajo minucioso, se convirtió en el comienzo de una contienda extenuante que interpeló no sólo al colectivo, sino también a líderes políticos de distintos colores y a activistas feministas críticas con la ley. Han pasado ya tres años desde entonces, uno con la norma en vigor, y Paula Iglesias respira con aparente serenidad. La desde este viernes nueva presidenta de la FELGTBI cree improbable que la etapa que se abre ahora sea más convulsa que la anterior. Pero, además, la activista tiene tablas: durante los últimos cinco años ha ostentado el cargo de vicepresidenta de la principal organización LGTBI del país, así que sabe bien cuáles son sus prioridades, cuáles sus alianzas y cuáles los frentes donde merece la pena batallar.

En estos momentos está celebrándose el juicio por el asesinato de Samuel Luiz. ¿Qué significaría hacer justicia en este caso?

Lo que esperamos desde la Federación y desde todo el colectivo es que, si te matan al grito de 'maricón', la justicia reconozca que es homofobia.

Los acusados y los testigos admiten haber escuchado a los agresores dirigirse a la víctima al grito de 'maricón', pero las defensas se centran en enmarcarlo en un insulto corriente, sin una carga homófoba.

El lenguaje tiene implicaciones. Llamar 'maricón de mierda' a alguien no debe ser considerado una forma de hablar, es una forma de homofobia. Es un discurso homófobo y de odio que, además, como hemos visto, puede tener consecuencias muy graves, hasta el punto de acabar con la vida de alguien.

Esta semana el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, también ha sido insultado al grito de 'maricón'. ¿Estamos retrocediendo?

Quiero pensar que no. Pero es verdad que existe una minoría que quiere hacer ver a la sociedad que la diversidad es una amenaza y no un valor que la enriquece. Esa minoría quizá está teniendo ahora altavoces que antes no tenía, como las redes sociales y algunas instituciones.

La LGTBIfobia no deja de estar, año tras año, entre las principales causas de delitos de odio. ¿Qué es lo que está fallando?

Desde la Federación y desde otras entidades hemos impulsado el Pacto de Estado contra los discursos de odio hacia los grupos vulnerables, precisamente buscando una alianza entre los movimientos sociales y las instituciones para hacer frente a estos discursos que al final son la antesala de lo que luego es más visible, desgraciadamente, que son las consecuencias del odio.

Las cifras oficiales dejan fuera una parte importante de la violencia que no se denuncia. ¿Es la infranuncia un problema?

Sí, la infradenuncia es un problema. Lo que no se nombra y lo que no se visibiliza no existe, y para lo que no existe no hace falta tomar medidas. Es verdad que el colectivo LGTBI tiene una historia de discriminación que en determinados momentos de la historia también ha partido de los agentes policiales, pero afortunadamente ahora trabajamos con las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado para que la atención en estos casos sea la adecuada y que el colectivo LGTBI pueda encontrar en estos agentes personas aliadas, que les acompañen en un momento muy complicado y de mucha vulnerabilidad.

La Federación deja atrás una etapa complicada, especialmente en lo que respecta a las relaciones institucionales con los partidos políticos en torno a la 'ley trans'. ¿Será esta etapa menos convulsa?

Cualquiera que asume un cargo como el de la Presidencia de la Federación espera que la etapa sea lo menos convulsa posible y que se establezcan alianzas. El colectivo cada vez tiene más fuerza, pero necesita alianzas en la sociedad y también en las instituciones para seguir avanzando en derechos. Si no remamos todas a una, el camino se hace mucho más complicado.

Y sobre esas alianzas, ¿qué esperan del actual Ministerio de Igualdad? Especialmente tras un inicio difícil debido a los comentarios tránsfobos de la exdirectora del Instituto de las Mujeres.

En esta última etapa del Ministerio de Igualdad hemos percibido predisposición a trabajar conjuntamente, así que esperamos poder ir caminando juntas, especialmente en el tema del Pacto de Estado contra los delitos de odio.

Además de esa, ¿cuáles son las otras prioridades en la agenda?

El desarrollo del protocolo para el acompañamiento a las personas trans en el ámbito laboral, que además la ministra de Trabajo se comprometió a su desarrollo tanto en el Orgullo de este año como el viernes en la inauguración de nuestro Congreso. También nos gustaría abordar todo lo que tiene relación con identidades y realidades que han sido menos visibilizadas, como son las personas no binarias y el reconocimiento de su identidad, o la prohibición de cirugías y tratamientos hormonales a menores intersex y un adecuado registro que garantice sus derechos. También vamos a seguir trabajando obviamente por intentar conseguir centros escolares y aulas libres de esos discursos de odio, porque nos preocupa especialmente cómo se están difundiendo dentro de los centros. Trataremos de mejorar la atención sanitaria no sólo a nivel de atención a temas relativos a la salud sexual y reproductiva del colectivo, sino también abordar la salud mental que muchas veces es consecuencia de que sufrimos violencia.

Respecto a las personas no binarias, ¿cómo esperan que se materialice ese reconocimiento identitario?

Ya contamos con un caso en España: una persona que ha podido registrarse como persona no binaria porque en su país de origen así se lo permitían. Entendemos que es una cuestión de voluntad política y esperamos poder sentarnos para ver cuál es el mejor mecanismo que pueda reconocer la identidad de las personas no binarias.

Durante la legislatura se estuvo a punto. ¿Por qué cree que no han conseguido conquistar ese frente?

No sé qué es lo que falla. Es verdad que es un colectivo muy invisible, afortunadamente está empezando a visibilizarse más, no sólo su identidad, sino también las trabas que sufren a nivel social y a nivel de reconocimiento. Vamos a trabajar porque esa identidad se reconozca de alguna manera.

Esta legislatura también quedó marcada por discursos que ponen sobre la mesa fraudes relacionados con la ley trans. ¿Les preocupa esto?

Como toda ley, se puede cometer algún tipo de fraude. Pero además de suponer un fraude de ley, lo que se intenta es instrumentalizar a las personas trans para irestar valor a una ley que lo que hace es ampliar derechos, para seguir estigmatizándolas y discriminándolas. Pero la realidad es que se está haciendo un buen uso de la ley, únicamente se han rechazado en torno al 1,4% de las solicitudes, así que en general se está haciendo un buen uso de esa ley y está garantizando derechos para las personas trans. En los casos en los que se esté utilizando para cometer fraude, hay que perseguirlos como con cualquier otra norma.

¿Se ha cerrado la herida con el movimiento feminista? ¿Están preparados para ir de la mano?

Nunca han dejado de ir de la mano, siempre han sido movimientos aliados porque han compartido lucha. Las intersecciones nos atraviesan a todas y siempre hemos ido de la mano del movimiento que consideramos feminista, aquel que no excluye a ninguna compañera. Es verdad que ha supuesto una confrontación con determinadas personas que se denominan feministas, pero consideramos que es una minoría que ha hecho más ruido que otra cosa. La verdad es que la mayoría del movimiento feminista sigue de la mano del colectivo LGTBI y no va a permitir que de esa lucha se excluya a ninguna mujer.

Mencionaba antes que los discursos de odio están encontrando un altavoz en las instituciones. Los partidos que son portavoces de esos discursos, como Vox y el PP, ¿tienen cabida en el Orgullo?

No sería muy coherente ir en contra de los derechos de un colectivo y aparecer en el evento más reivindicativo del colectivo, una manifestación que reivindica derechos y que es una explosión del poder ser en libertad. Ahí, evidentemente, no caben los discursos de odio, en ningún caso.

#hemeroteca #lesbofobia #testimonios | Gordofobia, homofobia y relaciones tóxicas: los núcleos de la primera novela de Julieta Sverdlick

Julieta Sverdlick //

Gordofobia, homofobia y relaciones tóxicas: los núcleos de la primera novela de Julieta Sverdlick

La autora decidió escribir una historia basada en su paso de la niñez a la adultez en una familia “judía progre” y su sorpresa al enamorarse de una mujer y el proceso de aceptación.
Rosario Bernasconi | Perfil, 2024-10-21
https://www.perfil.com/noticias/cultura/gordofobia-homofobia-y-relaciones-toxicas-los-nucleos-de-la-primera-novela-de-julieta-sverdlick.phtml

‘Cuando quieras podés destruirme’ es la primera novela de Julieta Sverdlick que decidió hacer una ficción de su paso a la adolescencia en el que se enamoró de una mujer, se encontró con el odio a su cuerpo mientras su primer amor en secreto se convirtió en una especie de encierro donde crecía un vínculo cada vez más tóxico. “Yo fui encontrando mucha homofobia en lugares impensados, como en un colegio súper abierto o en una familia súper progre, pero el lugar que más me llamó la atención de entrada, fue en mí misma”, reflexionó la autora en diálogo con PERFIL.

La autora es argentina, pero vive hace casi siete años en Nueva York, Estados Unidos, a donde fue a estudiar actuación y terminó convirtiéndose en su hogar. Si bien la escritura siempre fue parte de su vida, su profesión eran las artes escénicas, por lo que anteriormente no se había dedicado de lleno a pensar en publicar sus textos. Pero durante la pandemia empezó a construir el relato que finalmente tomó forma de novela gracias a la tutoría de Luz Santomauro.

Su historia plasmada en la novela permite reflexionar sobre las limitaciones propias, las de la familia, el dolor que genera tener que ocultar una relación que no responde al mandato de heterosexualidad y el poder de palabras que, sin demasiada consciencia, el círculo íntimo dice o censura. La historia de Julieta se da en un contexto, que en un principio parecería ser muy abierto: sus padres son psicólogos, están vinculados al mundo del teatro y son “judíos progres”, según detalla ella, sin embargo, cuando se enteran de que M era más que una amiga, le prohíben verla.

Esta transición, que se da entre los últimos años del secundario y los primeros post egreso, va envolviendo a la protagonista de mucha culpa y permitiendo que su única par, M, la manipule y la lastime, porque ella misma cargaba también con heridas profundas. “A mi mamá le agarraban ataques de ansiedad y no podía respirar. Me llamaba y entre gemidos pedía que alguien la ayudara -sin dejar de remarcar que eso que le pasaba era mi culpa-, antes de volver a encerrarse en el baño”, dice uno de los pasajes del libro.

Actualmente, la relación de Julieta y sus padres se sanó. “Hoy somos todos muy conscientes de las cosas que pasaron, de cómo actuamos, de cómo podríamos haber actuado, de cómo cambiamos desde ese momento; fue un proceso súper acompañado de ellos también”, aclaró la autora a PERFIL. Pero su historia puede servir a quienes atraviesan situaciones similares o ayudar a comprender a quienes juzgan sin conocer lo que significa negar la identidad de alguien.

– Tu libro es una autoficción. Es una historia ficcional porque una vez que se convierte en novela, uno elige los órdenes, qué prioriza, qué no, pero hay personajes que son gente que te conoce, ¿qué sentiste al momento de publicarla?
–Yo también soy fiel creyente de que toda palabra escrita es ficción y eso a mí me dio tranquilidad, además es una novela contada en primera persona y claramente desde la subjetividad de su protagonista. Entonces yo no sentía que estaba revelando nada de nadie, porque en realidad son personajes vistos a través de los ojos de la protagonista de la novela. Y la narración cuenta todo lo que le va pasando, desde un lugar de crecimiento y desde el amor y desde una mirada en la que se note que no hay villanos, que todos están haciendo lo mejor que pueden hacer con lo que tienen en el momento.

– Como decís, no hay villanos en el texto, pero hay acciones que ponen a los personajes en determinado lugar.
– Hace poco, me preguntaban cuál era el desafío a la hora de mostrar lo que ahora se llama una relación tóxica. Para mí el mayor desafío en la relación amorosa que fue una relación tóxica o en cualquier relación entre dos personajes es poder mostrar un poco los dos lados y que también, sobre todo en una relación tóxica, tiene que haber dos para que ese vínculo se dé. Muchas veces uno es el que ocupa el lugar de manipular más y es al que la gente en general condena más, porque bueno, quizás sí es el que está teniendo un poco más de poder, pero también hay otro que lo habilita y que sigue ahí y también hay todo un contexto social y un contexto familiar. Ese contexto de los personajes de la novela es el caldo de cultivo perfecto para que surja una relación así porque en una relación en donde hay que mantener un secreto entre adolescentes que se sienten juzgadas por el afuera y que hay tanto miedo, eso es un marco perfecto porque uno pasa a depender 100% del otro porque si no está con el otro está solo y porque el otro es el único que sabe la verdad de lo que uno está viviendo entonces todo eso genera una circunstancia que permiten que eso se dé así.

–Una cosa que recuerda la protagonista es uno de los primeros libros que amó que es ‘El niño envuelto’ de Elsa Bornemann, ¿creés que hoy que existe ese vínculo entre los jóvenes o niños que empiezan a tener la posibilidad de lectura fluida, de tener un libro de cabecera como te pasó a vos?
–Es una buena pregunta, no tengo tantos niñes, alrededor, en este momento, pero los que tengo sí son de familias muy lectoras que entonces fomentan mucho eso. Sí me parece que hay algo de cuando uno es niño, que cuando se engancha con un mundo lo quieren volver a leer y volver a leer y volver a leer y lo tienen súper presente. En ese sentido creo que sí, que eso siempre tiene la posibilidad de existir, pero no sé cuán presente está la lectura en la niñez ahora que hay tanta pantalla.

– El texto, más allá de su valor literario, es valioso como testimonio y porque ayuda a la reflexión.
–Pienso que a mí me hubiese venido re bien leer algo así en su momento porque hay algo re poderoso en la representación, que por suerte hay cada vez un poquito más.

– Es importante para ser leído desde adentro de una situación similar y desde afuera para llegar a comprender toda la violencia de los silencios que hay en torno a determinadas cosas.
– Es parte de lo que quiero retratar en el libro. Yo fui encontrando mucha homofobia en lugares impensados, como en un colegio súper abierto o en una familia súper progre, pero el lugar que más me llamó la atención de entrada, fue en mí misma. Por eso todo lo que se decía afuera dolía y resonaba más, porque te estaba dentro.

#hemeroteca #homofobia #crimenesdeodio #justica | La foto de los (presuntos) asesinos de Samuel

Público / Imagen del juicio por el asesinato de Samuel Luiz //

La foto de los (presuntos) asesinos de Samuel

Paco Tomás | Público, 2024-10-21

https://blogs.publico.es/otrasmiradas/87802/la-foto-de-los-presuntos-asesinos-de-samuel/

Una de las últimas polémicas en redes sociales ha tenido lugar tras la difusión de las fotografías de cuatro de las cinco personas que están siendo juzgadas por el asesinato de Samuel Luiz el 3 de julio de 2021 en A Coruña. La publicación -un viral "ahora tú" difundido a través de las historias de Instagram- anulaba la ocultación del rostro de los acusados, algo que suelen hacer todos los medios de comunicación, y mostraba abiertamente las caras de Kaio Amaral, Alejandro Freire, Catherine Silva y Diego Montaña durante el juicio. No muestra la de Alejandro Mínguez. Cosas de la plantilla, que no da para cinco fotos.

La publicación se viralizó y provocó una reacción en la que se cuestionaba esta decisión y se consideraba un error difundir la imagen de aquellos que aún no habían sido condenados. Con conceptos del tipo "nosotros no somos como ellos", se intentaba alertar de la sed de venganza que se manifiesta a través de esa publicación, que surge en una instrumentalización del dolor. Publicar las fotos, en el banquillo de los acusados, de Kaio, Alejandro, Catherine y Diego solo alimenta -según las personas en desacuerdo con la difusión de las fotografías- el instinto punitivista que busca el castigo incluso antes de la sentencia, sin concederle a los acusados la posibilidad de reinsertarse en la sociedad como ciudadanos ejemplares, y generando más odio y violencia en nombre de la justicia.

Ese choque de opiniones me llevó a reflexionar sobre lo que se buscaba publicando en la imagen y sobre los argumentos de quienes se oponían a esa conducta. Y desde la reprobación de la difusión de los rostros de los acusados hay unos razonamientos con los que no estoy de acuerdo.

El primero responde al cada vez más cuestionable principio de inocencia garantizado por la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Toda persona es inocente hasta que se demuestre lo contrario. Sabemos que, aunque eso sea un principio jurídico clave en un Estado de Derecho, eso no es así. Basta estar imputado en una investigación para que medios y opinión pública te declaren culpable. Basta entrar en X -antiguo Twitter- para ver cómo todos los días se juzga y se condena socialmente a una persona por un tuit, por un titular, por un chiste. Esas personas podrían ser jurado popular algún día de estos y ya vienen de casa con el veredicto del prejuicio aprendido.

Tapar el rostro de un acusado, desde el primer instante de la detención, responde a dos razones concretas: la presunción de inocencia y que no afecte al desarrollo del caso si, por ejemplo, la víctima tuviera que reconocer al agresor y pudiera verse condicionada por las imágenes difundidas. En el caso de Samuel es evidente que la víctima no puede reconocer al agresor. Y respecto a la presunción de inocencia, claro que hay que esperar a la sentencia, obviamente, pero todos sabemos, incluida la defensa de los acusados, que aquí no estamos enjuiciando la culpabilidad o la inocencia. En la grabación de las cámaras de seguridad se ve la agresión y a sus responsables. Eso permitió su detención. Aquí estamos asistiendo a un juego de tácticas de la defensa para evitar que los cinco acusados cumplan entre los 22 y 27 años de prisión que pide la fiscalía. Maneras de atenuar la condena, no de demostrar su inocencia. Usar el consumo de drogas y alcohol como atenuante o huir del agravante de homofobia. De ahí que ya estemos viendo como Catherine o Kaio acusan directamente a Diego Montaña y a Alejandro Freire. Colaboración con la justicia para obtener un trato de favor. Hemos visto mucho cine judicial como para detectar las estrategias. De ahí que la publicación de las fotos no altere el principio de inocencia.

Las imágenes que se han difundido están extraídas de un juicio abierto. No se ha rebuscado en sus redes sociales para sacar esa foto familiar ni ese retrato perjudicado y malintencionado de una noche de fiesta. Son fotos al alcance de cualquiera. Eso no altera el proceso judicial como sí lo haría la publicación de las fotos del jurado.

Sentir rabia ante un crimen homófobo es nuestro derecho. Nadie puede ni debe arrebatarnos ese dolor. Y manifestarlo abiertamente no es venganza. Venganza es creerte Chuck Norris y tomarte la justicia por tu mano. Cometer un crimen para saldar otro. No publicar cuatro fotos en una historia. Y tampoco compro el argumento de que esa historia -que recuerden que es visible solo durante 24 horas- celebre el castigo desde un desbocado instinto punitivista. La justicia es punitivista. De lo contrario, ningún delincuente estaría en la cárcel y todos estarían haciendo cursillos de buena ciudadanía. Y no teman por el derecho a la reinserción. Está al alcance de todos los ciudadanos españoles. Incluso de los etarras, por mucho que les joda a algunos.

Decimos mucho que feminismo y lucha LGTBI+ van de la mano. Y es cierto. Entonces, ¿por qué cuando se publicaron las fotos, sin pixelado, de los violadores de la Manada nadie señaló que eso estaba mal? ¿Por qué todos conocemos el rostro de Ricardo González, el voto particular que exculpaba a los acusados y que solo vio "jolgorio" donde había una violación? Siento que nadie se atrevería a decir, con razón, que las movilizaciones del "yo sí te creo" que se indignaron ante la condena de nueve años por abuso sexual eran movilizaciones punitivistas que buscaban más castigo en lugar de entender la justicia como un espacio de reinserción. ¿Por qué cuando se habla de homofobia, de transfobia, hay tanto matiz? Incluso dentro de las propias comunidades LGTBI+, especialmente gais, hay corrientes de pensamiento que parecen destilar una superioridad moral -con seguridad yo también la he ejercido en otras ocasiones- que nos encumbra como seres de luz, personas que trasladamos el debate emocional de la calle a la sobriedad académica, si es que eso es posible. Como si las personas y entidades LGTBI+ no llevásemos años haciendo un trabajo pedagógico sobre el peligro estructural que supone el heteropatriarcado. No paramos de explicar que la homofobia también reside en el empleo de la palabra "maricón", independientemente de que quien lo reciba sea o no homosexual o bisexual. La agresión ataca a lo que se percibe de nosotros. Por eso hay violencia homófoba en el colegio, a edades muy tempranas. No porque tengamos deseo sexual -con seis años yo no lo tenía- sino porque el niño agresor, con su adoctrinada manera de ver el mundo, interpreta que no eres un hombre como él. Y eso debe ser castigado.

Todos aplaudimos a Gisèle Pelicot cuando decidió hacer público el juicio a su marido y a los 50 hombres que la violaron. Celebramos la dignidad de la frase "que la vergüenza cambie de bando". Precisamente al rostro visible de los agresores es a lo que se refería Gisèle Pelicot. ¿Por qué cuando nosotros mostramos los rostros de nuestros agresores estamos cometiendo un error? ¿Por qué nuestro miedo no puede cambiar de bando?

Por supuesto que publicar el rostro de los homófobos no acaba con la homofobia. Ni publicar el rostro del violador acaba con los violadores. Ni el del narco acaba con el tráfico de drogas ni el del político corrupto acaba con la corrupción. No somos tan ingenuos. Podríamos pensar, llegados a este supuesto, que o todos los rostros de los delincuentes deben permanecer en el anonimato o ninguno. Opino que la exposición pública ayuda a que la sociedad entienda que violar, agredir, asesinar, humillar, no sale gratis. Y eso no es incompatible con seguir trabajando en combatir la homofobia desde la educación. Pero sí ayuda a que el miedo y la vergüenza cambien de bando.

#hemeroteca #homofobia #crimenesdeodio #justicia | Sobre el juicio por el asesinato de Samuel Luiz: "Los crímenes por homofobia deben recibir condenas adecuadas"

Protesta por el asesinato de Samuel Luiz //

Sobre el juicio por el asesinato de Samuel Luiz: "Los crímenes por homofobia deben recibir condenas adecuadas"

Cuando se celebra el mediático juicio por el asesinato homófobo de Samuel Luiz, Ramón Martínez reflexiona sobre la importancia del mismo para luchar contra la LGTBIfobia.
Ramón Martínez | Shangay, 2024-10-21
https://shangay.com/2024/10/21/samuel-luiz-asesinato-juicio-homofobia-opinion/

Aunque pasó de puntillas por nuestro país, la Ilustración dejó algunas ideas que aún hoy resuenan en nuestra tradición filosófica. Una de ellas es aquel principio del derecho penal que prescribe «odia el delito, compadece al delincuente», pero –ustedes me perdonen– no tengo ni intención ni fuerzas para compadecerme de la suerte que corran personas como las que estos días están siendo juzgadas como responsables de la muerte de Samuel Luiz.

El asesinato de Samuel Luiz en 2021 provocó una ola de indignación: salimos en masa a las plazas a exigir #JusticiaParaSamuel, y aún hoy conservamos esa rabia, que, si bien nunca ha desaparecido, vuelve ahora a sentirse a flor de piel, cuando comienza uno de los juicios más importantes para el movimiento LGTBIQ+ del Estado español en toda su historia.

La cólera nos embarga ahora que los testimonios de testigos y posibles asesinos nos recuerdan cómo se produjo el asesinato de Samuel; pero creo que es necesario detenernos tan solo un momento para reflexionar en torno a qué podemos hacer con toda esa rabia, para preguntarnos de qué manera gestionar nuestra indignación de forma que resulte verdaderamente productiva.
«Si de verdad queremos justicia para Samuel y tantas otras víctimas de homofobia, no bastará con campañas en redes»
La pasada semana, cuando algunos medios de comunicación empezaron a difundir información en torno al juicio, se inundaron las redes sociales con las imágenes de los presuntos asesinos de Samuel. La publicación, compartida una y otra vez, denunciaba que, mientras el rostro de la víctima había aparecido hasta la saciedad en todas partes, las caras de sus asesinos apenas habían sido expuestas al público.

Aunque, irónicamente, las fotografías que acompañaban aquel mensaje se habían obtenido gracias a los medios que cubrían el juicio, la campaña recordaba a otras muchas denuncias sociales similares: también habíamos difundido los rostros de los violadores de “la manada” y, en Francia, una de las claves del juicio a los violadores de Gisèle Pelicot está siendo, precisamente, que todo el mundo pueda observar la aparente normalidad de quienes cometen delitos tan atroces.

Con todo, yo me encontré con serias dudas sobre la oportunidad de difundir esas imágenes. Comprendí que era una herramienta para exorcizar la rabia que nos atraviesa al recordar el brutal asesinato de Samuel, pero me inquietaba tanto que el clamor popular de la condena se adelantase a la sentencia e ignorase la presunción de inocencia –más que cuestionable a estas alturas–; como que ese pequeño exorcismo acabara siendo el único vehículo que empleara tanta gente indignada para mostrar su enfado, cuando no me cabe duda de que si de verdad queremos justicia para Samuel y para tantas otras víctimas de la homofobia, no bastará con campañas en redes sociales.
«Detrás de un asesino se esconde todo un entramado social» 
 Además, me preocupó también de aquella galería de fotografías acabara consiguiendo demonizar a los seguros culpables del asesinato del joven coruñés hasta el punto de que hiciéramos caer sobre ellos todo el peso de la homofobia y olvidásemos el verdadero alcance de esta, que va mucho más allá de un pequeño grupo de asesinos de una noche de verano. Ante la urgencia a la que nos obligan medios y redes sociales, creo hoy, con más calma, que nos equivocamos tanto quienes compartían las imágenes de los presuntos culpables de la muerte de Samuel como quienes no lo hicimos. Nos equivocamos, pero tampoco podíamos hacer mucho más en aquel momento para expresar nuestra rabia.

Hace ya varias décadas, Hannah Arendt publicó una serie de polémicos artículos en torno al juicio contra Eichmann, el oficial nazi responsable de supervisar la deportación de la población judía, de la que gran parte acabó siendo asesinada en Auschwitz. Durante el proceso Arendt comprendió algo importante: la banalidad del mal. El delincuente no es el único culpable de sus crímenes, sino que detrás de un asesino se esconde todo un entramado social que a través de distintas órdenes, normas y costumbres puede conducir a cualquier persona a un momento en que la decisión de cometer o no un crimen terrible acaba pareciendo intrascendente.

No quiere esto decir que no exista una culpa clara en quien empuña la pistola, golpea a alguien hasta la muerte o aprieta el botón que conduce a una persona hacia su exterminio, sino que es preciso también condenar a todo ese ambiente que facilita las armas, educa en los golpes, dispone las deportaciones y a quiénes deben destinarse. Por eso no basta con compartir las fotografías de los presuntos responsables del asesinato de Samuel, porque Samuel no es en absoluto la única víctima de la homofobia, la bifobia y la transfobia en nuestro país; porque, aunque logremos contemplar esos rostros culpables, ahí no puede acabarse nuestra rabia.
«Necesitamos canalizar nuestra rabia de la forma más inteligente, para allanar el camino de la fiscalía y las acusaciones»
Acaba de empezar uno de los juicios más importantes para el movimiento LGTBIQ+ del Estado español en toda su historia: su resultado puede marcar un antes y un después en la concienciación social del alcance de la intolerancia homófoba y, sobre todo, de sus consecuencias. Necesitamos proceder con toda cautela para que en este momento crucial el resultado del proceso refuerce nuestro mensaje reivindicativo. Necesitamos canalizar nuestra rabia y nuestra frustración de la forma más inteligente posible para allanar el camino de la fiscalía y las acusaciones –tanto las particulares como la acusación popular, en manos de la asociación LGTBI Alas, de A Coruña–, que, por lo que sabemos a través de algunos medios, están haciendo un trabajo impecable.

No dejan de insistir en preguntar a cada testigo si escuchó cómo el presunto asesino gritaba a su víctima «te voy a matar, maricón de mierda» poco antes de perseguirlo junto a otras personas y golpearlo brutalmente hasta acabar con su vida. Esa es la clave de este juicio: que se reconozca la motivación homófoba del crimen y se aplique adecuadamente el agravante del artículo 22 del Código Penal.

Así, puede que estos días sea preciso que contengamos la rabia y la respiración lo suficiente para que quienes están ahora en la primera línea puedan hacer bien su trabajo. Después, en caso de que la condena no sea la que exigimos, será el momento de desbocar la furia y el grito y, tal como sucedió en su momento con la sentencia de “la manada”, nos citaremos ese mismo día en el Ministerio de Justicia y el todas las Delegaciones del Gobierno del país para dejar bien claro nuestro mensaje: que los crímenes por homofobia deben recibir condenas adecuadas y que, en todo caso, este juicio es solo uno entre muchos.

Queremos #JusticiaParaSamuel y, también, que esta sentencia sirva de punto de apoyo para otras muchas, porque el asesinato de Samuel es un caso concreto y la homofobia ha sido, es y por desgracia seguirá siendo un problema común en España hasta que los tribunales se comprometan a aplicar adecuadamente las leyes que protegen los derechos humanos de las personas LGTBI.

domingo, 20 de octubre de 2024

#hemeroteca #trans #activismo | El Octubre Trans marcha contra la asimilación: “El objetivo del movimiento trans es abolir el sistema”

'Octubre trans' organizado por la disidencia en Madrid //

El Octubre Trans marcha contra la asimilación: “El objetivo del movimiento trans es abolir el sistema”

En un año sin llamada a la protesta callejera por parte de las asociaciones mayoritarias, colectivos autogestionados han convocado una manifestación para recuperar el espíritu crítico de esta fecha: “El movimiento trans tiene que luchar contra todas las opresiones”
Deva Mar Escobedo | El Salto, 2024-10-20
https://www.elsaltodiario.com/lgtbiq/octubre-trans-marcha-asimilacion-objetivo-del-movimiento-trans-es-abolir-sistema 

Banderas y pancartas avanzaban por las calles de Madrid la tarde de este sábado en la primera convocatoria del Octubre Trans en años en la que no han marchado las asociaciones que participaron de la redacción de la Ley Trans. Las personas participantes de la manifestación han clamado por la despatologización —la disforia de género sigue apareciendo en los manuales diagnósticos—, pero también contra el sistema psiquiátrico o el genocidio en Palestina. “Queremos un Octubre Trans combativo porque el problema del sistema es que es tránsfobo, pero también colonial, clasista o racista y queremos abolirlo”, declara Alexandra Fernández, portavoz del colectivo convocante Trans en Lucha.

Las movilizaciones por todo el Estado en años previos se centraban en exigir una Ley Trans. En la última edición, la protesta se centraba en el entonces anuncio de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, de recortar la legislación trans y LGTBIAQ+ autonómica. Con la Ley Trans aprobada y los recortes del PP madrileño en suspenso a la espera del dictamen del Tribunal Constitucional, la mayor parte del movimiento trans ha descartado la convocatoria callejera este Octubre Trans.

Carmen, manifestante que lleva acudiendo a las convocatorias del Octubre Trans desde su primera edición en 2007, recuerda que la Ley Trans que se ha aprobado “no ha llegado ni a cumplir lo que proponía el PSOE en 2019”. Pero las reivindicaciones van más allá: “No se puede celebrar que se ha aprobado la Ley Trans y ya está. No se trata de conseguir una inclusión parcial dentro del sistema, sino abolirlo”, resume Fernández.

Para Juls, que ondea una bandera palestina cerca de la cabecera, hay que protestar contra la invisibilización de lo trans en la sociedad. Además, “asumen que está todo ganado cuando se siguen dando violencias en muchos ámbitos”. Aunque le chique pone como ejemplo las violencias psiquiátricas, escasos minutos antes de hablar con El Salto, un hombre ha amenazado a les manifestantes: “Nos ha dicho que nos van a cortar el cuello”, relata Juls.

En la manifestación han marchado personas organizadas en colectivos trans, como el convocante Trans en Lucha o Euforia, pero también grupos bolleros o bisexuales. En total, la participación ha rondado en torno a las 200 personas. “Los colectivos autogestionados no tenemos el poder de convocatoria de las asociaciones grandes; está bien como primer paso”, valora Fernández.

Durante este mes consagrado a la despatologización de las identidades trans, las asociaciones que en los últimos años han convocado la manifestación se decantan por otro tipo de acciones. Federación Plataforma Trans, mayoritaria en la representación de esta demográfica, ha llevado a las instituciones europeas “la inacción del Gobierno de España ante el aumento de la LGTBIfobia” y preparan una campaña con el Instituto de la Juventud para “llamar a la empatía de la población joven para contrarrestar los discursos de odio contra la juventud trans”, explica Mar Cambrollé, presidenta de la federación de entidades trans.

Una mirada amplia

Según la encuesta Estado LGTBI+ 2023, publicada este año por la Federación Estatal LGTBI+, una de cada tres personas del colectivo ha sufrido acoso en el último lustro por formar parte de la comunidad cuir. Además, este mismo estudio expone que un 27 % ha sufrido discriminación y, casi una de cada diez personas, una agresión física o sexual en el mismo periodo de tiempo. A pesar de la dureza de estas cifras, el colectivo que ha convocado la manifestación de este sábado bajo el lema “Disidencia trans contra la psiquiatrización. Solidaridad, apoyo mutuo y autogestión” pide ampliar la mirada a cuestiones que no sean intrínsecamente LGTBIAQ+.

“El identitarismo y participar solo en las luchas propias nos quita fuerza cuando la opresión que sufrimos diferentes identidades y colectivas tiene el mismo origen. No solo hay que mirar lo que nos afecta en este momento, sino también a lo que afecta a nuestres compañeres y participar en la lucha contra ello. Hay que luchar contra todas las opresiones”, declara la portavoz del colectivo convocante.

En la manifestación se escuchan gritos como “no estamos todes, faltan les ingresades” o “que viva la lucha del pueblo palestino” en alusión a la causa antipsiquiátrica o a la palestina. Estas luchas no son ajenas a lo trans, argumenta Fernández, pues “la gente trans ha sufrido opresión por ser la otredad” y eso les hermana con otres que también quedan en los márgenes, como la población psiquiatrizada o palestina.

Una crítica a ediciones de otros años
En este Octubre Trans en Madrid faltan las pancartas que han encabezado las convocatorias de otros años; las asociaciones con más peso político, las que negociaron la Ley Trans, no están aquí. La organización no las echa de menos: “Las asociaciones que han venido convocando la manifestación los últimos años se han centrado mucho en las reformas legales y han perdido el objetivo de superar el binarismo”, sentencia Fernández.

Con la convocatoria de este mes, la organización no quiere tomar el relevo de las entidades que marchaban otros años; tienen la mirada puesta más atrás, en los inicios del Octubre Trans. “Guerrilla Travolaka fue un colectivo autogestionado que, a través de las acciones directas y las movilizaciones a pie de calle, luchó contra la patologización de los cuerpos trans ya en 2006, pero también se posicionaba contra la psiquiatrización y entendía la disforia como fenómeno social no intrínseco a las realidades trans”, declaran en el manifiesto leído en Sol.

El texto termina animando a las personas asistentes a organizarse, ya sea en colectivos transmaribibollos, en sindicatos de inquilinas o en centros sociales. “No queremos movilizarnos por una nueva ley trans, sino que la gente se sume a luchas por cambiar radicalmente la sociedad en la que vivimos”, finiquita Fernández.

miércoles, 16 de octubre de 2024

#libros #precariedad #feminismo | La nada fértil

La nada fértil / Sarah Babiker Moreno.
Madrid : Continta Me Tienes, 2024 [10-16].
296 p.

/ ES / Libros / ENS / Desigualdad social / Feminismo / Necropolítica / Precariedad

📘 Ed. impresa: ISBN 9788419323279 / 16.95 €
📝 Cita APA-7: Babiker Moreno, Sarah (2024). La nada fértil. Continta Me Tienes.

La periodista y antropóloga Sarah Babiker Moreno esboza en este ensayo los mapas posibles de la precariedad y la desigualdad de la ciudad actual, para tratar de dimensionar los efectos de la deshumanización y la necropolítica, desde una mirada que evita el derrotismo. De este modo, ‘La nada fértil’ presenta un recorrido por las edades en la ciudad precaria: infancia, adolescencia, juventud, edad adulta y vejez, en un estilo a medio camino entre la crónica y la (auto)ficción feministas.

En palabras de Layla Martínez, autora del epílogo: «Las ciudades actuales son el escenario de una violencia atroz del capital en forma de rentismo, explotación y contaminación, pero también el lugar donde es posible dar rienda suelta al deseo de encuentro con los demás. Puede que la ciudad se presente ahora ante nosotros como un lugar desolador y desesperanzador, como un espacio cada vez más vacío de afectos y posibilidades de vida, pero, como dice Babiker, es también un lugar fértil, el escenario de una tensión de fuerzas que podemos volver a poner a nuestro favor. […] La nada fértil pertenece a esa tradición de libros que retrata la ciudad y a sus habitantes en un momento concreto que sin embargo se acaba convirtiendo en un reflejo de toda una época».

😏 Sarah Babiker (Madrid, 1979). Hija de una chica madrileña de familia obrera y de un joven sudanés de clase media que pasó de estudiante a migrante en la España franquista, Sarah supo de clase y raza sin salir del barrio, aprendió de justicia social en un cole jesuita y, ya en la Facultad de Periodismo, constató que iba a ser todo muy difícil. Ha vivido en Italia, Marruecos, Argentina y Omán. Quiso saber más de antropología, países del sur, feminismos. Empezó estudios que ampliaban el mundo y generaban el vértigo de lo inabarcable. Aprendió humildad. Tuvo muchos curros precarios y de todos se llevó algo, aunque solo fuera una profunda aversión al trabajo. Hace años encontró casa laboral y política en El Salto Diario. Después de una vida de poesías y cuentos, de cartas y mails, de monográficos y artículos, a los cuarenta años empieza esta novela: 'Café Abismo'. Escribe, como escribía su abuelo Pablo, quien le legó su olivetti, sobre las cosas que le atraviesan el cuerpo y lo que le interpela de los otros, cerca y lejos.