Imagen: El País / Ed Razek y Kariie Kloss |
La marcha de Ed Razek se produce después de la contratación de una modelo transexual y de la cancelación del 'show' de la exclusiva firma lencera.
El País, 2019-08-06
https://elpais.com/elpais/2019/08/06/gente/1565094565_479190.html
El director de marketing de Victoria's Secret, Ed Razek, ha dimitido, según una nota enviada a los empleados por Leslie H. Wexner, el director ejecutivo de la compañía. La noticia fue confirmada por ‘The New York Times’. Razek ha sido clave en la elección de las modelos que aparecen en el 'show' de Victoria's Secret durante los últimos 15 años, lanzando las carreras de nombres de alto perfil como Tyra Banks y Gisele Bündchen. La dimisión se produce solo unos días después de que se conociera que la famosa firma de lencería ha decidido dejar de organizar su famoso desfile anual. Razek es una figura controvertida, ya que a él se le atribuye la decisión de ofrecer una imagen cosificada de la mujer y su oposición a la diversidad.
El año pasado Razek, de 71 años, provocó polémica después de anunciar que nunca contrataría una modelo transgénero. También insistió en que el público "no tiene interés" en la inclusión de modelos de talla grande. Y, precisamente, su marcha de la firma lencera llega un día después de que la modelo transgénero Valentina Sampaio haya filmado su primera campaña para la marca. La modelo brasileña, de 22 años, escribió en sus redes: "Nunca dejéis de soñar, gente. La vida es increíble. Quiere más, odia menos. El odio no sirve para nada, así que no pierdas el tiempo con ello".
El 'show' de Victoria's Secret de 2018 fue el menos visto de la historia con solo 3,3 millones de espectadores. Y las ventas de la firma van en descenso (en 2018 perdió un 50% de su valor). "Desgraciadamente, no va a celebrarse este año", anunciaba la modelo Shanina Shaik, que desfilaba para la marca desde 2011, al diario ‘The Daily Telegraph’ en Australia. "Me siento rara, porque todos los años por estas fechas estoy entrenando como un ángel", añadía.
El pasado mayo la CNBC ya adelantó que el show de 2018 podía ser el último de estos millonarios y célebres desfiles. Entonces, la cadena tuvo acceso a un informe en el que el CEO de L Brands, la matriz de Victoria's Secret, afirmaba que la televisión no era el "canal más adecuado" para el evento y confirmaba su intención de crear un "nuevo estilo de show". "La moda es un negocio de cambio. Debemos evolucionar y cambiar para crecer. Con esto en mente, hemos decidido repensar el tradicional desfile de Victoria's Secret. En 2019 y de aquí en adelante, nos centraremos en el desarrollo de contenido emocionante y dinámico y en un nuevo tipo de evento, que se difundirá entre nuestros clientes en otras plataformas pegadas a la actualidad", se leía en el comunicado.
El cambio de paradigma, la llegada del MeToo, la inclusión y aceptación de todos los cuerpos, el empoderamiento femenino, el rechazo al exceso de retoque fotográfico, el auge de la belleza real, el consumo de ropa interior más prosaica... Todo ello ha dejado paso a la extrañeza y la incomodidad ante el legendario desfile.
El año pasado Razek, de 71 años, provocó polémica después de anunciar que nunca contrataría una modelo transgénero. También insistió en que el público "no tiene interés" en la inclusión de modelos de talla grande. Y, precisamente, su marcha de la firma lencera llega un día después de que la modelo transgénero Valentina Sampaio haya filmado su primera campaña para la marca. La modelo brasileña, de 22 años, escribió en sus redes: "Nunca dejéis de soñar, gente. La vida es increíble. Quiere más, odia menos. El odio no sirve para nada, así que no pierdas el tiempo con ello".
El 'show' de Victoria's Secret de 2018 fue el menos visto de la historia con solo 3,3 millones de espectadores. Y las ventas de la firma van en descenso (en 2018 perdió un 50% de su valor). "Desgraciadamente, no va a celebrarse este año", anunciaba la modelo Shanina Shaik, que desfilaba para la marca desde 2011, al diario ‘The Daily Telegraph’ en Australia. "Me siento rara, porque todos los años por estas fechas estoy entrenando como un ángel", añadía.
El pasado mayo la CNBC ya adelantó que el show de 2018 podía ser el último de estos millonarios y célebres desfiles. Entonces, la cadena tuvo acceso a un informe en el que el CEO de L Brands, la matriz de Victoria's Secret, afirmaba que la televisión no era el "canal más adecuado" para el evento y confirmaba su intención de crear un "nuevo estilo de show". "La moda es un negocio de cambio. Debemos evolucionar y cambiar para crecer. Con esto en mente, hemos decidido repensar el tradicional desfile de Victoria's Secret. En 2019 y de aquí en adelante, nos centraremos en el desarrollo de contenido emocionante y dinámico y en un nuevo tipo de evento, que se difundirá entre nuestros clientes en otras plataformas pegadas a la actualidad", se leía en el comunicado.
El cambio de paradigma, la llegada del MeToo, la inclusión y aceptación de todos los cuerpos, el empoderamiento femenino, el rechazo al exceso de retoque fotográfico, el auge de la belleza real, el consumo de ropa interior más prosaica... Todo ello ha dejado paso a la extrañeza y la incomodidad ante el legendario desfile.