Imagen: El Diario / Mujeres africanas |
Cerca de Bamako, la capital Mali, se encuentra un pueblo pequeño y aislado llamado “Damina”. Allí nació Dialla Diarra, una de las mujeres más luchadoras que he conocido.
Elisabet Matamala | El Diario, 2017-02-05
http://www.eldiario.es/desigualdadblog/Dialla-Diarra-sueno-lucha_6_608649148.html
A pesar de una infancia dura, Dialla tuvo la suerte de ser educada por su tío, quien le enseño todo lo que sabía como si fuera su propio “hijo”. A los trece años Dialla se casó. Fue un matrimonio concertado. Aun así, Dialla y su marido tuvieron la suerte de enamorarse. Un año después, ambos se fueron a Europa para empezar una nueva y mejor vida.
De ese día ya han pasado veinticuatro años, y quince de la muerte del marido de Dialla, quien falleció de accidente. A partir de ese momento, Dialla ha destinado su vida a luchar para cumplir el sueño de su marido: que las niñas y niños de origen africano tuvieran la oportunidad de estudiar. Con ese objetivo en mente, Dialla fundó la asociación 'Legki Yakaru' (“mujeres de hoy” en sarankule).
'Legki Yakaru' lleva hoy más de diez años trabajando con la comunidad africana, empoderando a mujeres y a niñas y luchando contra aquellas prácticas que suponen una clara vulneración de sus derechos. La mutilación genital femenina (MGF) es un ejemplo de ello. A pesar de todas las conferencias en las que Dialla ha participado (UNAF, Universitat Pompeu Fabra, mesas redondas, etc.), el Proyecto Heal (2016) ha sido la iniciativa que ha impulsado el trabajo de la entidad en la lucha contra la MGF.
Este proyecto, que forma parte del 'Programa Doméstico' de Oxfam Intermón, tiene dos objetivos: ‘informar y formar’. ‘Informar’ a la comunidad africana creando espacios de debate donde se pueda hablar sobre la MGF, la sexualidad y la salud abiertamente, sin que estos temas sean tabú. Y ‘formar’ a profesionales en los ámbitos de la sanidad, educación y cooperación. 'Legki Yakaru' lleva tiempo reivindicando la urgente necesidad de que estos profesionales sean capaces de detectar posibles casos de MGF, gestionarlos e incluso prevenirlos. Sin embargo, la formación sobre la MGF no debe empezar en la universidad, sino mucho antes: en la escuela. Las niñas de familias africanas nacidas en Europa, o bien suelen tener muy poca información sobre la MGF, o bien la desconocen. Sus familias no hablan del tema. Tampoco la escuela.
Cuando esas niñas son enviadas a África para casarse, interrumpiendo además sus estudios, a veces las familias de sus maridos no las aceptan si no están mutiladas. Como consecuencia, estas niñas pueden ser forzadas a someterse a la MGF. Pero lo peor de esa práctica no es el intenso dolor del momento, sino las consecuencias. Consecuencias que durarán toda la vida.
A través del 'Proyecto Heal', 'Legki Yakaru' pretende conectar entidades de Europa y de África para que cuando se envíe una niña a casarse, haya siempre alguien que la proteja. Cuando las niñas y los niños de familias africanas de Banyoles buscan protección, no recurren a su familia, sino a Dialla. Por eso en Banyoles se la conoce como “mama Dialla”.
El 6 de febrero de 2017, día mundial contra la mutilación genital femenina, conviene recordar más que nunca, que esta lucha es una defensa por los derechos de las mujeres, y por los derechos humanos.
Elisabet Matamala es colaboradora de la Asociación Legki Yakaru. Ha contribuido al desarrollo del Proyecto Heal, dedicado a la mutilación genital femenina. Trabaja en el campo de las Relaciones Internacionales.
De ese día ya han pasado veinticuatro años, y quince de la muerte del marido de Dialla, quien falleció de accidente. A partir de ese momento, Dialla ha destinado su vida a luchar para cumplir el sueño de su marido: que las niñas y niños de origen africano tuvieran la oportunidad de estudiar. Con ese objetivo en mente, Dialla fundó la asociación 'Legki Yakaru' (“mujeres de hoy” en sarankule).
'Legki Yakaru' lleva hoy más de diez años trabajando con la comunidad africana, empoderando a mujeres y a niñas y luchando contra aquellas prácticas que suponen una clara vulneración de sus derechos. La mutilación genital femenina (MGF) es un ejemplo de ello. A pesar de todas las conferencias en las que Dialla ha participado (UNAF, Universitat Pompeu Fabra, mesas redondas, etc.), el Proyecto Heal (2016) ha sido la iniciativa que ha impulsado el trabajo de la entidad en la lucha contra la MGF.
Este proyecto, que forma parte del 'Programa Doméstico' de Oxfam Intermón, tiene dos objetivos: ‘informar y formar’. ‘Informar’ a la comunidad africana creando espacios de debate donde se pueda hablar sobre la MGF, la sexualidad y la salud abiertamente, sin que estos temas sean tabú. Y ‘formar’ a profesionales en los ámbitos de la sanidad, educación y cooperación. 'Legki Yakaru' lleva tiempo reivindicando la urgente necesidad de que estos profesionales sean capaces de detectar posibles casos de MGF, gestionarlos e incluso prevenirlos. Sin embargo, la formación sobre la MGF no debe empezar en la universidad, sino mucho antes: en la escuela. Las niñas de familias africanas nacidas en Europa, o bien suelen tener muy poca información sobre la MGF, o bien la desconocen. Sus familias no hablan del tema. Tampoco la escuela.
Cuando esas niñas son enviadas a África para casarse, interrumpiendo además sus estudios, a veces las familias de sus maridos no las aceptan si no están mutiladas. Como consecuencia, estas niñas pueden ser forzadas a someterse a la MGF. Pero lo peor de esa práctica no es el intenso dolor del momento, sino las consecuencias. Consecuencias que durarán toda la vida.
A través del 'Proyecto Heal', 'Legki Yakaru' pretende conectar entidades de Europa y de África para que cuando se envíe una niña a casarse, haya siempre alguien que la proteja. Cuando las niñas y los niños de familias africanas de Banyoles buscan protección, no recurren a su familia, sino a Dialla. Por eso en Banyoles se la conoce como “mama Dialla”.
El 6 de febrero de 2017, día mundial contra la mutilación genital femenina, conviene recordar más que nunca, que esta lucha es una defensa por los derechos de las mujeres, y por los derechos humanos.
Elisabet Matamala es colaboradora de la Asociación Legki Yakaru. Ha contribuido al desarrollo del Proyecto Heal, dedicado a la mutilación genital femenina. Trabaja en el campo de las Relaciones Internacionales.