viernes, 31 de julio de 2015

#hemeroteca #mujeres | Iris Apfel: un extraño pájaro sobrevuela la gran pantalla

Iris Apfel: un extraño pájaro sobrevuela la gran pantalla
Suzy Menkes informa de la proyección en Londres de un nuevo documental de moda, 'Iris'
Suzy Menkes | Vogue, 2015-07-31
http://www.vogue.es/suzy-menkes/articulos/suzy-menkes-conoce-a-iris-apfel-en-el-estreno-en-londres-del-documental-iris/23264

Para el final de la cena en el chic restaurante Annabel's de Londres, Iris Apfel y yo aún no habíamos terminado de hablar de su joyería turquesa. Los tres brazaletes gruesos y las dos piezas de plata de su brazo izquierdo ya eran suficientemente fáciles, teniendo en cuenta que el exceso artístico se encontraba apartado de la manga del abrigo de pieles naranjas.

"Lo compré en una venta", dijo la reina de las coleccionistas, refiriéndose a la piel de imitación, pero no a los collares. Los tenía en aros y guirnaldas y han sido recolectados durante décadas: piezas grandes y fuertes compradas "hace años". Había algunas en forma de manojos de uvas y con piedras lisas contrastadas –uno de los collares era un regalo reciente "de Karl"–.

Yo no sabía hasta este momento que había tantas variaciones de piedras turquesa, ni que pudieran ser talladas de formas tan distintas. Pero no pedí más detalles de Iris –"94 en dos semanas", dijo mientras ponía su interminable acento americano. Yo ya había aprendido, viendo el documental Iris, del director Albert Maysles, que había miles de joyas, cientos de trajes más y docenas de pieles, sin mencionar los zapatos con ilustraciones bordadas, los animales de peluche y un gran número de objetos en su apartamento de Park Avenue en Nueva York.

Todo eso –y también en otro lugar de Palm Beach– es lo que ella y su marido Carl, que cumple 100 años durante la película, llaman hogar. Iris dice en un momento conmovedor que la pareja tuvo que elegir entre tener hijos y la construcción de su negocio juntos.

Iris es un trabajo de amor por el director, cuyas obras anteriores han incluido Grey Gardens. El amor es también el mensaje del documental: la pasión por los objetos y la negociación por ellos que ha llevado a Iris y Carl a través de continentes cuando tenían una empresa de decoración y fundaron Old World Weavers. Las últimas piezas de su colección aleatoria de mesas, sofás de terciopelo, estatuas de animales y singulares alfombras y papeles de pared se ven salir de la nave de almacenamiento de los Apfel en Manhattan durante la película.

Luego está el conmovedor amor que sienten el uno por el otro, el agudo ingenio de ambos, la complicidad después de casi 70 años de matrimonio, sus recuerdos. También se preocupan por la salud el uno del otro, ya que él va en silla de ruedas y ella tiene una fractura de cadera. No vemos a Iris con muletas en ninguna escena, pero puedes estar seguro de que podrían haber sido talladas en el mástil de un antiguo barco de pesca mexicano y compradas a un vendedor de extrañas antigüedades.

"Me encanta los zocos", dijo Iris con un suspiro de alegría al pensar en viajar por los siete mares en busca de lo original y lo excepcional. Las fotografías de sus numerosos viajes a través del mundo capturan la audacia de estos cazadores-recolectores arquitectónicos. Las imágenes también revelan el lado más desconocido de la pareja, que incluye haber trabajado en la Casa Blanca para nueve presidentes, desde Eisenhower a Clinton.

La película comienza –al menos así fue la proyección en Londres– con el diseñador Duro Olowu apoyando a la nonagenaria. En Londres, la sacó al escenario. En Nueva York, él la acompañó a los puestos del mercado de telas africanas, donde Iris regateaba tan ávilmente como cuando hizo su primera compra con 65 centavos a los 13 años.

Iris se refirió a su madre como una mujer que vestía de manera convencional, que le transmitió a su hija –"una hija de la Depresión"– que "si tienes un par de buenos trajes e inviertes tu dinero en los accesorios, puedes crear un millón de looks diferentes".

Hasta que su amigo Harold Koda, ahora jefe del Costume Institute en el Museo Metropolitano de Arte, incluyó su colección en una exposición en 2005 a la que llamó Rara Avis (una "rara avis de la moda"), Iris era una desconocida para el público en general. Pero cuando se hizo la película, la inteligente y lúcida diseñadora y coleccionista era familiar por mucho más que sus enormes gafas y sus looks cargados de bisutería, que ella dice que dan "entusiasmo y chispa" a un outfit.

La colección de prendas se exhibió de Nueva York a Palm Beach, de Long Island a Peabody Essex, en Salem; y en cada lugar se congregaba una multitud abrumada por la fascinación y el asombro.

Ahora los fashion films están súper de moda y estos dos están arrasando: Last Emperor, sobre Valentino, y Dior and I, sobre la primera colección de Raf Simons para la maison. En Iris está la calidez de Bruce Weber, su amigo y fotógrafo, y el entusiasmo del diseñador belga Dries Van Noten. Aún así, parece más una historia sobre el carácter y la originalidad que sobre la ropa, aunque Iris deja caer una mención aquí sobre una falda de Gianni Versace y otra allá sobre un vestido de Ralph Rucci.

Entre la agradecida audiencia de Londres estaba Roksanda Illincic, Nicky Haslam y la diseñadora de accesorios Charlotte Dellal quien, casualmente, había elegido las gafas redondas tan míticas de Iris Apfel como inspiración para su colección Crucero. Sosteniendo un bolso que tenía monturas de gafas por asas, Iris Apfel posó para los fotógrafos.

La película provoca muchas preguntas. ¿Por qué hay tan pocas personas originales en la moda en un mundo en el que todo se encuentra en internet? (Como era de esperar, Iris solo usa su 'smartphone' para hablar y evita todo lo que tenga que ver con redes sociales). ¿Se podrían hacer más películas –quizá de un nivel artístico menos elevado que el de Albert Maysles– para animar a los diseñadores noveles a ser más arriesgados y libres?

Se pudo ver a Iris hablando con estudiantes, haciendo sus clásicos comentarios tan divertidos, afilados e inteligentes sobre el arte de coleccionar y llevar objetos originales. Puede que los estudiantes sean los sucesores de estos espíritus tan, tan libres.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.